Tú Eres Mi Amor ©

Eres una Seductora

Ese momento en que no sabes como callarle la boca a alguien.
¡Es frustrante!

¿Quién es peor? ¿Papá hablando de más o Julián hablando de más?

-Vez, Saita, ¡Eres hermosa!
-Sí, papá. Digo con los dientes entrecerrados.

-Me caes muy bien Julián. Veo que se han llevado muy bien ustedes. Saita siempre quizo un hermano mayor. Espero que tu lo seas para ella.
-Seré mucho más que eso, señor.

_Ya veo. Julián pasa el límite.
¡Trágame tierra!

-Bueno, muy rica tu comida Julián. Irémos a descansar. Dice mamá.

-¡A la orden!

-Ehm, mamá, papá. Le pedí a Lady que viniera a buscarme mañana. Asi que, Julián, no tendrás que hacerlo.

-Pero para que le pides eso a Lady si ya tienes chofer?
-Okay, será ultima vez.
-Bueno, eso espero, pero Julián, tú si vas a recogerla cuando salga. Dice papá en son de advertencia.

_Puff! Y eso que pensaba hacerlo por un buen rato.

Camino hacia un rincón de descanso. Trataré de evitar hablar con Julián.

La hamaca es un buen sitio para dejar el estres o alguna preocupación.
Cierro mis ojos.

-Bonita, no me ignores por favor!

_Ya viene este!
Volteo y le doy la espalda.

-Bonita, discúlpame, no me hagas esto. Yo, yo te quiero.

Lo escucho, pero sigo ignorándolo.

-Si sigues ignorándome, te agarraré en peso y te tiraré a la piscina!

_Carajo!

-Qué? _Digo enojada.

-Qué tengo que hacer para que me perdones?
-Solo vete. No quiero hablar contigo.

Suspiró, y se fue cabizbajo.

Tál vez estoy siendo muy dura con él. Yo lo quiero también, pero falló, y las cosas no se perdonan tan fácilmente.
~☆~~☆~

Se hízo de noche.
Mis padres duermen como osos invernando.
Camino hacia mi cuarto, pero me detengo enfrente del de Julián.

Abro la puerta con cuidado.

Julián duerme al igual que mis padres.
_Como enojarme con alguien como tú. Lo amo, así de sencillo.

Me arrecuesto con cuidado en la cama.

Como si fuera la primera vez.
Lo abrazo y beso todo su rostro. Despierta
-Yo, yo te amo. Y sí, te perdono, cosita.

Toma mi rostro con sus manos y deja un rico beso en mis labios.
_Y todo lo que me faltaba regresó!

-Gracias, bonita. Y yo también te amo.
Tomó mi mano y la puso en en su pecho.
-Soy solo para tí y para nadie más. Prometo amarte y respetarte por siempre. Ni la muerte me alejará de ti.

Esa satisfacción. Ese sentimiento placentero que te hace sonreír.
Todo en tí se ilumina.
El amor verdadero si existe!

¿No hay nada perfecto?
Esto sí lo es.

-No me hagas enojar nunca más. Solo hazme feliz.
-Entendido hermosa comandante!
-Esta bien. Te veo mañana, cosita.

~☆~☆~

Puta escuela!
Me siento en la silla. Y observo la cara de dormidos de todos.
Recuerdan a mi profe de Bio? Si pues, almenos va a ser lo mejor para empezar clases.

-Muy buenas, chicos. A ver, levantemonos todos y estiremos para dejar esa pereza atras.

Todos gruñimos a la vez mientras nos poniamos de pie.

El profe empezo a moverse y nosotros copiábamos lo que hacía.

Santa cachucha!
El hacía un movimiento con sus brazos que hacía que se marcaran sus enormes bíceps.

-Señorita Sarah! ¿Porqué no está calentando?

Rayos! ¿Tengo cara de embobada?
-Como no profe! Mire, estoy hasta que sudo! Dije mientras me ponía a hacer cualquier tipo de calentamiento a lo loca.

-Okay chicos, pueden sentarse.

-Está más guapo que nunca, cierto?
Dice Jeily. Mi compañera de mesa.
-Estoy que me caliento allá abajo.
Las dos reímos.

Y como siempre, después de ésta clase, las demás se tornaron aburridas como es de costumbre.

~☆~

-Te dije que no es nada, sólo era para ver como te ponías, Lady.
-Segura?
-Claro que sí, mana.

Como le había dicho a Lady que tenía algo que contarle, se puso intensa con las preguntas. No le contaré nada porque es algo que olvidaré, como si fuera que nunca pasó.

-Sarah, tu chofer. Está más guapísimo.
-Yo lo tengo así, querida. Soy toda una diva.
-Suertuda!
-Hasta mañana, Lady, Cuídate!

~☆~

Y aquí, en medio de un tráfico insoportable.
Llevamos casi media hora sin movernos.

-¿Pero qué es esto? Qué  estará pasando allá adelante? Decía mientras veía la larga fila de autos.
-Tál vez un accidente. Dijo Julián.

Miré  a mi alrededor.
Y enfoqué mi mirada en Julián.

-Sabes lo bueno de este auto?
-Eh, no. ¿Qué es?

-Qué puedo hacer esto sin que nadie pueda ver.
Dije mientras me montaba encima de él.

-Sabes? Dijo con voz entrecortada. De dónde aprendes ser tan seductora?

-Y no te gusta? Digo mientras me desabrocho la camisa en donde mis pechos sobresalen.

Muerde sus labios.
-No sabes cuanto me fascina...

Me tiro  a besarlo como loca mientras inclino el asiento hacia atrás.

-Estás segura que nadie puede ver?
-Las ventanas están súper ahumadas. Asi que no, nadie pueder  ver!

Hago menear mis cadera mientras lo beso.
Siento como su miembro se va endureciendo.

-Soy débil ante tu cuerpo y tus movimientos.

Sigo meneandome sobre él.

-Mira como me pones, y eso que estas con ropa. Ahora imagínate sin ella.