Tú Eres Mi Amor ©

¡Qué trastada!

La verdad es que muchas veces me sorprendo de mí misma.

Actúo de una manera tan sucia. No sé de donde aprendo estás cosas, pero las hago.
Dulce y pervertida adolescencia la mía.

Los autos empezaron a pitar.
Me quito de encima de él.
Y dejo que continué.
Solo avanzó un par de metros.

-¿Eso era toda la bulla? ¿Para avanzar 2 miserables metros?

-Ves, ahora me dejaste caliente.

-Tranquilo, resista como macho con pelo en el pecho.

Ríe con ganas.

-¿Quien te enseña esas cosas, niña?

-¿Qué cosa? ¿Moverlo rico o qué? Eso lo aprendí sola.

Ríe nuevamente, pero esta vez más fuerte.

-¡Hablo del macho con pelo en el pecho! Dice casi sin respirar por la intensa risa.

-¡Ahhh! Pero especifícate oye. Bueno, eso también lo aprendo sola.

-Que bobita eres.

Me jala los cachetes a lo que le respondo con una mueca.

Despues de pasar el enrrollo ese del tráfico, finalmente llegamos a casita.
1 hora más tarde que lo acostumbrado.

Después de saludar a mamá y papá, subo al cuarto y me doy un gran baño.

Bajo corriendo a la cocina. La hambre es grande.

-Mamá, comida porfavor, estoy que me como lo que sea.

-Hay espárragos.

-¿Ah? ¡Guacala! ¿Y eso porqué?

-¿No dijiste que te comías lo que sea? Pero era mentira, híce papas salteadas con carne asada.

-¡Oh, eso sí me gusta!

Después de terminar el primer plato, fui por el segundo.
Mi mamá se lució con la comida.
~¤~

Han pasado, no sé....unos meses.

Mis padres ya no salen de gira.
Y eso es bueno. Claro, por una parte, porque por la otra, no hay mucho tiempo con Julián, y eso sí que es malo.

Bueno, Julián y yo no podemos estar como antes porque nos pueden descubrir.
Él aveces no está por asuntos de la universidad.

Mi amiga Lady, encontró el amor y me alegro por ella.
Espero y no le haga daño porque si no, lo mato.

Como este es mi último año en el colegio, gracias a Dios, le pondré más empeño.
Ya se esta acabando el semestre y ya tengo muchas cosas planeadas.

Va 1 semana que no veo a Julián, pero hoy regresa nuevamente.
Y eso significa.....ponerse encantadora.

-Sarah, querida, ¿Dónde estás?

Escucho los llamados de mamá dentro de mi habitación.

-Acá mamá, en el baño.
Grito para que me pueda escuchar.

-Nena, escucha. Ahora, como a las nueve llegará Julián. Recuerda que tu padre y yo iremos a ver a tus abuelos .....

Grito en silencio mientras me baño.
Alzo las manos en son de alegría.
No hay noticia más buena que ésa.

-¡Okay mamá! Salúdame a la abuela, pero en especial al abuelo.

Espero la respuesta de mamá....

-¡Mamá! ¿Sigues ahí?

Sólo se escucha el agua que cae de la regadera.

~¤~

Veo a los Simpsons mientras espero a Julián.

Espero que suene el timbre o que se abra esa puerta en cualquier momento.

Escucho una llave introducirse en el mango de la puerta.

Miro directo a la entrada.
¡Mis plegarias fueron escuchadas!

No pasa ni un segundo en abrir la puerta cuando ya yo estaba encima de él besándolo como loca.

-Como te extrañé.
Me mira con esos ojos de amor que enamoran.

-¡Eh.... tus padres nos veran!

-No, ellos se fueron a ver a mis abuelos.

Caminamos hasta la terraza, a los cómodos sillones de afuera.

-Esperame aquí, ya regreso, iré a bañarme y eso.

-Sí, te prepararé algo de comer.

Creo que estando por allá lo hizo ponerse más guapo, hasta tiene más musculos y ....oh sí... hasta tiene más trasero.

Preparo un licuado de frutas mientras el regresa.
Una gran sonrisa tengo desde cuando llegó y no se quita de mi rostro.

-Listo, ahora si estoy más cómodo.
-Toma, es de fresa y piña.
-¿Y si me da ganas de ir al baño?

-¡Oye! Está bueno, pruébalo.
Solo ríe el condenado.

-¿Qué hacías por allá que estas como más fuerte?
Digo mientras toco sus brazos.

-Hay un gym cerca de la universidad, asi que aproveché.

-Ammmm... ¿Y qué tal todo?

-Que te puedo decir... profesores horribles, en dos ocaciones se me quemó la comida en las prácticas.

-Oh, bueno, mejor no pregunto más. Río al igual que él.

Se tomó todo el licuado y colocó el vaso a un lado.

-Dámelo acá, después se llena de hormigas, ya mamá me ha regañado por eso.

Dejo el vaso en la cocina y regreso de una vez.

-¿Por qué me miras así?

-No pude evitar mirar lo que tienes puesto.
Se acerca seductoramente.

-¿Que tiene mi pijama?
Mi respiración se contrae cada vez que se acerca.

-Tu pijama no. A ésto me refiero.
Baja un poco mi pantalón mostrando el encaje que tengo por ropa interior.

Me acuesta en el sillón y se trepa salvajemente besándo mi cuello.

Quita toda ropa puesta en mí dejandome desnuda.

Pasa su mano por todo mi cuerpo mientras su lengua baja lentamente por mis pechos, después por mi abdomen hasta llegar bajo mi ombligo....

Su lengua remoja todo a su alcance.
Saca un gran gémido en mí.
De arriba a abajo con una velocidad impresionante mueve su lengua.

Me agarro fuerte del sillón, pero no puedo contener los gritos de placer.

Para lentamente y mi respiración llega casi a la normalidad.

Saca el paquetico y me lo da mientras el se quita toda su ropa.

-En verdad que estas más fuerte....
-Tranquila, no te lastimaré, sabes lo que te proporcionaré.

-¿Porqué tenias ese condón en el bolsillo de tu pantalon?

-Porque... pues, sabía que esto iba a pasar. No entretengas el momento.

~¤~

Amaneció rápidamente.
Me duele la espalda por haber dormido aquí, en este sillón.

-¡Julián, despierta! Llegaran mis padres pronto.

Escucho la puerta deslizarse, la que da con la cocina.

-¡Así es, Julián, despierta que ya llegamos!........
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