Junto a su lado respiraba aire puro. Una paz llegaba a mí.
-Y yo a ti, Sarah. _Pegó su frente a la mía mientras acariciaba mis mejillas.
Fue hasta la cocina y me preparó algo de comer. Yo solo lo veía, cada movimiento que hacía.
Me llevó el plato después de terminar.-No voy... _Suspiró antes de terminar la frase. -No voy a quedarme contigo. _Dejé mi plato a un lado y me quedé mirándolo desconcertada, esperando a que me dijera el por qué.
-Viene mi último año en la universidad y... tengo que hacer mi práctica profesional en Inglaterra. _Su mirada trataba de esquivar mis ojos humedecidos.
-Pero... podemos escribirnos, hacer videollamadas, yo... yo te espero, Julián. _Dije con mil llantos y en súplica.
-No esperes por mí, no te haré éso, eres jóven, eres una niña que tiene mucho por vivir.
-Julián ¡No!, por favor. _Mis lágrimas salían aún más.
-Yo te quiero, Sarah, te amo, pero yo seré un estorbo, no quiero que ocupes tu mente pensando en mí, solo necesitas pensar en tu futuro que sé que será maravilloso.
-Yo sé que mi futuro será exitoso, y sé que tú estarás al lado mío. No me interesa lo que me digas hoy. _Me levanto, seco mis lágrimas y me retiro.
Sé que ésto es obra de papá, sé que lo amenazó y sé que si hago que Julián confiese, lo negará.
Observo que aún sigue en la sala. Esta situación es peor que la cruda que tengo.
Salgo corriendo al baño, y todo de mi estómago salió, creo que hasta mis pulmones, hígado, todo órgano dentro de mí... y por supuesto, mi corazón.
Me tiro al piso después de vomitar todo.
Cepillo mis dientes y como una menta para el mal olor.Me arrecosté en la cama para descansar un rato. Mejor dicho, unas...horas.
Unas cosquillitas en mi mejilla me hacen despertar.Abros mis ojos y miro aquellos que me endulzan la vida.
-No te quiero perder, mi amor. _Me siento a su lado mientras toma mis manos. -Pero tu padre... amenazará con llevarme preso y te mandará a Asia a estudiar Ingeniería, y sé que quieres estudiar veterinaria. No quiero perderte, pero tampoco quiero que tengas una vida que no quieres.
-La vida que no quiero, es sin ti a mi lado. ¿Qué tengo que hacer para tener una vida contigo?
Sus bellos ojos, esa barbilla varonil, sus labios, sus labios que son una delicia. Tomo su rostro y beso esa boquita que me derrite por completo. Esos labios dulces que me encantan morder y en donde mi lengua se fascina en entrar.
La puerta suena de repente con golpes insistentes.
-¡Estás bien! _Grita Lady al verme abrir la puerta. -¡Jamás en tu vida vuelvas a irte sin avisarme! ¡Y menos sola con un hombre! _Entra al cuarto y se acerca a Julián. -¡Gracias! _Le da un abrazo.
-¿Ya la castigaste, Lady? _Pregunta Carlos, quien se asoma a la habitación mirándome molesto. -Eres un caos, Sarah... _Suelto mi risilla.
-¿Y si vamos a desayunar? _Sugiere Lady.
-Lo vomitaría... ¡y apenas son las siéte de la mañana! Vayan ustedes, yo descansaré unas horas y luego bajo a comer. _Digo mientras me acurruco en mi cama.
-Esta bien Sarah. Cuídala Julián.
-¿No crees que hay que amarrarla para que no salga sin avisarnos? _Dice Carlos entre risas.
Continuo besándolo despues que Lady cerró la puerta.
-Duerme conmigo.
-Deberías desayunar.
-Lo haré, pero duerme conmigo. Despertamos a las 10 y bajamos a desayunar.
~¤~
-Un jugo super frío. Hielo, una cubeta con hielo y agua también. Unas tortillas grandes con bastante carne asada. _Dije mientras la boca se me hace agua.
-Y usted jóven, ¿Lo mismo? _Pregunta el mesero mientras ríe por la manera tan graciosa al pedir.
-Lo mismo, solo que a mi me da una taza de café.
El mesero se retira y de inmediato me traen el cubo con hielo y agua.
-Siento una sed increíble. _Me tomo dos vasos de agua de un solo golpe.
-Te vas ahogar. Toma con calma, mi amor.
-Es como si fuera que mi sed no se acaba. Siento que me quemo por dentro.
-Eso se llama resaca. No tomes más de esa manera y menos con desconocidos.
-Ya Julián, ya me regañaste lo suficiente. _Hago un puchero.
Comí el desayuno lo más gustoso y rápido que pude.
-Y ... ¿Ahora qué?
Él baja su mirada. Da un gran suspiro.
-Me voy a Inglaterra mañana...
... Y pensé que nada podía ser peor...
-¿Tan pronto?...
-Disculpa mi amor. Tengo que hacerlo. No quiero que me esperes. Tu debes esperar cosas mucho mejores que yo...
-Pensé que ya había quedado claro que nos escribiríamos todos los días. Te lo dije una vez, y te lo repetiré siempre, no quiero una vida sin ti.
Me levanto de la silla y camino a la habitación muy enojada y desconsolada a la vez.
-¡Sarah! _Grita por todo el pasillo.
Entro a la habitación y rompo a llorar.-Sarah... por favor no hagas esto más difícil. Eres una persona increíble, soñadora, alegre... tienes toda una vida por delante... Ve y descubre el mundo, el mundo tiene que ver lo extraordinaria que eres. No puedo amarrarte a que esperes por mí, eso sería egoista. Sí, te amo y no pensé que esto llegaría hasta tanto. Eres muy jóven para estar en un solo lado. Disfruta tu juventud. Yo ya recorrí bastante el mundo. Tengo a mi bella hija que casi no la veo... he dejado muchas cosas.... no estoy para aventuras ya.
¿Escuché bien? ¿Mis oídos escucharon bien? ¿Aventura?
-¿Porqué me dices ésto, Julián? ¿Porqué ahora? _Mis lágrimas salen aún más.
Él se acerca, me abraza y me da un beso en la mejilla.
-Perdon, pero es lo mejor. Fue bonito mientras duró. Ya olvidarás lo que ha pasado. Todos olvidamos en algun momento. Y esto no ha sido por tu padre. Esto lo he decidido yo por mi propia cuenta. Te amo, Sarah, pero debemos dejar todo hasta aquí.
Él solo se fue.
Y yo me quedé ahogándome en mis lágrimas de dolor.FIN
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Tú Eres Mi Amor ©
RomansaSarah Phill, estudiante de 16, esta a un par de años de salir de la secundaria. Es ricachona, humilde pero orgullosa. Es muy parrandera, le encanta la Rumba. Tiene unos padres increíbles, pero lo malo es que viajan mucho al extranjero por su trabaj...