Hope

Capitulo 6

-Para, para -le dije separándome de el.

-¿Que ocurre?

-Es solo que... yo... ehm... me voy a casa -dije levantándome.

-Pero aún necesitamos hablar sobre tod...

-No hace falta Jake, te creo. Adiós.

Y como siempre huí.

Me había besado... En ese momento no sabía que sentía. ¿Asco?¿Felicidad? No, no, felicidad no.

¿Quién se creía que era? Hacía poco que me había tratado como si fuera basura delante de todo el mundo y ahora me acababa de besar.

Llegué a casa, mi madre estaba durmiendo en el sofá.

Decidí no despertarla y subir a mi habitación.

Cuando eché un vistazo a mi móvil, me encontré con 5 llamadas y 2 mensajes de John.

Suspiré.

No sabía que hacer, ¿se supone que ahora le había de contar la verdad?

Supongo que si...

Pero esa no era la cuentión.

La cuestión era, ¿quien cojones le había contado a Clara lo que pasó en esa estúpida fiesta?

***

Los días pasaron y las cosas fueron exactamente como yo me esperaba.

La gente se reía de mí y bueno, los que no se reían me miraban con lástima.

-Pobrecita -decían.

John, Carlota y Ann se enfadaron conmigo por no contárselo, y Jake, bueno a Jake desde que me besó no lo he visto más.

De todas maneras, lo hubiese evitado. No me quería juntar con él. No quería tener nada a ver con Jake Matthews.

Ya veis. Así es mi vida. Una jodida montaña rusa. Un día estoy subiendo, con el sol brillando en mi cara, y al otro bajo la pendiente hasta tocar fondo.

Bueno la verdad es que ahora las cosas me iban como al principio. Antes mi vida era así. Bueno la verdad es que mi vida no ha sido fácil...

Pero no os la voy a contar.

No es necesario.

***

¡Mierda, mierda, mierda!

¡Llegaba tarde a clase! Me vestí lo más rápido que pude. Me puse unos pantalones cortos claros con una camiseta negra con el logo de vans, me lavé los dientes, cogí una manzana y me puse a correr.

Las 7.57. No llegaba. ¡No llegaba!

Me pasaba las noches en vela, pensando y torturándome mentalmente y cuando llegaba la mañana no me levantaba.

Solo quería tener una vida normal, sin problemas, sin nada que me la amargase. Una jodida vida normal.

Cuando estaba a pocos metros de la entrada, vi que el conserje estaba apunto de cerrar la puerta.

-¡James espera por favor! -le grité mientras iba corriendo hacia la puerta.

-Jess es la tercera vez esta semana.-me dijo.

-Lo sé y lo siento. No sé donde tengo la cabeza.

-Anda pasa, pero la próxima vez, seré más estricto.

-¡Muchas gracias! Me voy que llego tarde a clase -dije mientras empezaba a correr; otra vez.

Llegué a mi clase. La puerta estaba cerrada.