Solo es un presentimiento. [Bill Weasley]

Capítulo 13.

En la tarde la sala común de Gryffindor estaba abarrotada de adolescentes preparándose para el gran evento. Subí a las habitaciones donde ahí ya se encontraba Ginny, Lavender y Parvatil, las saludé con la mano y fui directo a mi baúl donde había guardado el regalo está mañana. Deje salir un suspiro, no podía creer que estaba haciendo esto, tomé la caja donde se encontraba el vestido que había enviado Jenna y lo desdoble. El vestido era hermoso, gemí de la sorpresa, "El vestido" era de un color marfil, era de manga larga con puños en las mangas de color blanco y pequeños botones delicados como si fueran perlas que formaban una hilera y en todo el vestido habían estrellas bordadas de color dorado desde el top del vestido hasta el final, el material era suave, el vestido solo era un poco transparente en las mangas y en el torso.

Me fui quitando las capas de ropa hasta quedar en ropa interior y cubrí mi cuerpo con una bata de algodón de manga larga color rosa bebé, extendí el vestido en la cama, tome el espejo que tenía a lado de la cómoda y comencé a hidratar mi cara, el cuarto estaba silencioso, nadie hablaba, sólo se podía escuchar el ruido de los objetos de belleza que utilizábamos y uno que otro respiro frustrado.

Sí te era honesta no era muy diestra a la hora de maquillarme, así que decidí mantenerlo simple, puse corrector en mis ojeras que estos últimos meses se habían acentuado y comencé a difuminar, rellene un poco más mis cejas y comencé a enchinar las pestañas, decidí poner un color cobre con brillos en los párpados, a continuación puse rímel en las pestañas intente no embarrarme del producto mientras lo hacía lo cual fue una proeza, rubor en las mejillas de un tono durazno hacía que mi cara se iluminará y dejaba a lado la piel enfermiza y pálida que me traía por la falta de sueño y por último los labios, había escogido este labial que Jenna siempre me elogia, un pintalabios llamado "love is better" que se parecía al color natural de mis labios y el maquillaje estaba listo, al ver mi reflejo en el espejo creo que había hecho un buen trabajo para ser principiante, era sofisticado a mi parecer que quedaba con el estilo del vestido.

Inhale y exhale para calmarme porqué ahora tendría que pasar al cabello, agarre las cosas para mi cabello que se encontraban al fondo del baúl, no era muy dada a hacer mi cabello todos los día para ser honesta, comencé a cepillarme el cabello que a cada rato refunfuñaba por uno que otro nudo que se me había formado durante el día. Agarre un poco de crema para el cabello y extendí el producto en mi cabello y empecé a dar forma a las ondas de mi pelo, determiné que lo mejor que debería de hacer era torcer dos mechones de cabello y juntarlos en la parte de atrás, dejando que la demás parte de mi cabellera quedará suelta, mis brazos terminaron adoloridos y quise echarme a mi cama, pero ni siquiera pude hacerlo porque iba arruinar todo lo que había progresado hasta ahorita.

Y ahora el vestido y los zapatos, que eran del mismo color del vestido, con adornos dorados y el taco no era tan alto. El vestido parecía mágico cuando me mire al espejo ya que se acomodaba perfectamente a mi figura, me quedé unos segundos más inspeccionando cuando un "Wow" me sacó de mi enfoque.

—¡Te ves hermosa! —Ginny fue la primera en notarme.

Una risita nerviosa salió de mis labios ante su cumplido y negué con la cabeza. —No, no, no... Tú sí que te ves hermosa. —Ella se ruborizo.

—Tú madre tiene buen gusto. —Dijo Lavender con animosidad.

—¡Oh! —Toqué mi vestido con nerviosismo. — Sí, ella tiene. — Dije, mientras Brown se daba la vuelta y se llevaba a su amiga del brazo. —Por cierto no he visto a Hermione, ¿crees que esté bien?

—Créeme ella está bien, se fue a cambiar a uno de los baños porque aquí estaba ajetreado. —Me tranquilizo.

Ginny y yo salimos a continuación de la habitación para darnos cuenta que todavía la Sala Común de Gryffindor seguía abarrotada de alumnos nerviosos y emocionados por el gran baile de navidad, nos hicimos paso entre la gente y salimos de la sala, ella y yo tomadas de la mano para evitar caernos de las escaleras y darnos fuerza para seguir caminando, creo que yo estaba más nerviosa que Ginny, ya que ella estaba bastante emocionada.