Propuestas

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   Y ahí seguía charlando con ese albino que tanto estimaba, simplemente, no me aburría de sus peculiares conversaciones o chistes, siendo sincera, me agrada cuando de alguna u otra manera se la pasaba hablando y hablando, me gusta su rostro pálido y sonriente al mirarme.

   —¿Kiddo? ¿Sigues ahí?– pregunto Sans mientras picaba levemente mi mejilla, por esta acción me sonroje un poco, asentí rápidamente, el sonrió y continuo hablando.

   —Te preguntaba si sí iras con Mettaton a su casa para lo de su tonto vídeo– preguntó algo molesto mientras me miraba fijamente, yo asentí nerviosa, había hecho una promesa, no podía romperla.

   —Ya veo, ya veo, oye lindura, te propongo un trato– me guiño el ojo tomando un corta pausa para continuar –Sí tu no vas con Tanner, yo haré lo que quieras, sin excepciones, ¿que dices?– sonrió para después posar sus manos en los bolsillos de sus chaqueta azul. ¿Lo que yo quiera? Es algo muy... Extraño, no me agradaba la idea de defraudar a Mettaton, pero, Sans, es algo diferente, si propuso eso fue porque siente algo en contra de él, serán... ¿celos?

   Rayos, esto es muy... Nuevo para mi.

   —¿Y bien? ¿Que dices kiddo? ¿Aceptas?– extendió su mano, dude por unos segundos tomarla pero, termine aceptando, estreche su mano por unos momentos para después soltarnos.

   —Solo que... Tengo una condición– dije mientras me cruzaba de brazos.

   —Claro hehe ¿cual?– preguntó con su típica sonrisa.

   —Que me ayudes a decirle a Mettaton que no podre asistir...– trataba de mantenerme firme pero, sabia que eso iba a provocar que quizás Mettaton ya no me hable siquiera, la idea me aterraba.

   —Hecho– en un abrir y cerrar de ojos, Sans ya no se encontraba conmigo, para ser un chico flojo se mueve muy rápido. Opté por irme a mi salón a esperar a que Sans me dijera que ocurrió con él. Ojala nada malo.

   ...

   —¡Frisk!–

   —¡¿?!– me desperté exaltada por el grito, frote mis ojos y mire al despertador, era Asriel.

   —Disculpa pero, las reglas especifican que no se puede dormir en clase– toco mi frente con su dedo índice y sonrió –¿No dormiste bien anoche?– preguntó aun manteniendo esa sonrisa tranquila.

   —S-Sí pero... No se que me ocurrió, no volverá a pasar– no me había percatado que me había dormido, supongo que ya ha pasado un buen rato desde que vi a Sans, me levante de mi asiento y camine un poco hasta que la mano de Asriel en mi hombro me detuvo.

   —¿Que ocurre Asriel?..– pregunte mientras volteaba a verle, tenia un rostro que demostraba tranquilidad, paciencia principalmente.

   —Antes de que te vayas... Quería preguntarte... ¿tienes alguna relación amorosa con Sam Morgansten?– soltó mi hombro y se mantuvo firme, era una pregunta algo complicada, no tenía una relación con Sans, pero, sus acciones me hacen querer... Tenerla.

   —¿Por que la pregunta?– dije tratando de evadir su pregunta, se mordió el labio inferior.

   —No, por nada... Bueno, nos vemos– se veía... decaído, inicio su caminata hacia la salido, una parte de mi quiso de detenerlo pero otra parte me lo impidió, el término yéndose. Me detuve a pensar unos minutos, mire de reojo a los demás asientos y ví a Chara, tenia una mirada asesina en mi cara, me incómodo un poco así que decidí irme al patio.

   —Cuidate Frisk, alguien puede apuñalarte por la espalda en cualquier momento– escuche susurrar a Chara mientras salía. ¿Apuñalar? ¿A qué se refirió con esa oración?

   Caminaba algo desorientada por los pasillos hasta que me tope con aquel rubio que me recibió el primer día.

   —¿Uh? Oh diablos, que mala suerte de encontrarme contigo– bufo mientras hojeaba una carpeta.

   —Un gusto verle de nuevo, Flowey– sonreí a este, el rodó los ojos hacia la derecha y dijo.

   —No digo no lo mismo, y dime, ¿quienes te han callado esa boca por no escuchar?– su pregunta me recordó a su consejo, "callar o ser callado", a pesar de todo este tiempo nunca lo entendí.

   —Pues... eh...– no sabia que responder.

   —Idiota, ni siquiera sabes a que me refiero, si TU nunca pones atención a lo que pasa a tu alrededor alguien más te abrirá los ojos, haciéndote sentir como una boba– exclamó con ademanes, por fin entendí su referencia.

   —Ya entiendo...– si alguien me callaba por no saber algo sería tomada como una tonta, pero, si yo terminaba callando a los demás sería tomada como alguien grande, era un buen consejo al final de todo.

   —Tengo una idea, te propongo que apostemos algo, si sales siendo callada por alguien... te irás para siempre de esta escuela, pero si tu eras la que calla, yo seré uno de tus mejores amigos, ¿que dices? ¿aceptas?– se acomodo sus mechones rubios que se encontraban en su rostro sin perderme de vista.

   Era una apuesta arriesgada.

   Pero.

    Estaba determinada a lograrla.

   —Sí, aceptó– estreche mi mano con Flowey, el sonrió de una manera muy rara, pero no le di suma importancia, tenia ahora un objetivo nuevo.

    El primero, ganarle más cariño a Sans.

   Y el segundo, hacer que Flowey sea mi amigo, mejor dicho, que el me considere como su amiga.

   Me despedí del chico, baje las escaleras y me encontré con Sans al final de ellas.

   —Kiddo, tenemos que hablar–

    Por su tono de voz, eso no era bueno.

The New Life (Undertale ~Frans~) (HIATUS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora