Aleación [SANGRE & ACERO #3]

Capítulo 40 - Búsqueda

POV RYAN

5 días después

Los ánimos estaban por el suelo, al igual que la esperanza.

Llevábamos cinco días dándo pasos de ciego, sin saber hacia dónde tirar, sin saber que hacer. No sabíamos absolutamente nada, ni si estaban vivos, si estaban muertos, si estaban capturados o libres, todo eran incógnitas.

- Bien, repasemos todo otra vez. - Repitió James, claramente cansado, llevaba cinco días sin dormir, y era humano.

- No hay nada que repasar, James. No sabemos nada.- Dijo Aiden con cansancio.

- ¿Quieres rendirte? - Me giré hacia él. - ¿Quieres darte por vencido?

- ¡No sabemos nada Ryan!- Reprochó. - No tenemos ni una sola maldita pista, Grayson no puede escuchar sus pensamientos y Jayce no puede encontrarlos.

- ¿Estás insinuando que está muerta? ¿Esa es tu respuesta?

Se dirigió hacia mi y se situó a unos centímetros, las lágrimas al borde de sus ojos.

- ¿Crees que esto te duele más a ti que a mi? ¡Es mi hermana!

- ¡Pues haz algo para encontrarla!

Se dió media vuelta, resoplando y volvió a sentarse en el sillón, tirando de su pelo con las manos, frustrado.

Me acerqué a Jayce, quien llevaba días aferrado a esa camiseta y me senté a su lado.

- Jayce, tienes que hacerlo, porfavor. - Le supliqué.

Ni siquiera me contestó, hundió su cabeza entre sus manos e inclinó su cuerpo hacia la mesa.

- ¡¿Es que nadie en esta casa va a hacer nada!?

Todos me miraron por unos segundos, para después volver sus miradas al mismo punto fijo de siempre.

Me senté frustrado.

Escuché la puerta principal abrirse, y cómo Anna recibía a dios sabe quien.

Después de unos segundos, los sujetos aparecieron por la puerta.

Mi sangre hirvió al ver a los Walker entrar por la puerta.

- Quien los ha llamado. - Dije rápidamente mientras me levantaba. - ¡¿Quien los ha llamado?!

- He sido yo. - Saltó Grayson poco después. - Pueden ser de ayuda, Ryan.

- No, no pueden. Lo único que van a hacer es empeorarlo todo.

- Es mi novia la que está desaparecida, tengo derecho a estar aquí. - Pronunció Hunter, siendo la gota que colmó el vaso.

Todos formaron un silencio sepulcral mientras yo me acercaba a él lentamente.

- Ryan .. - Intentó llamarme Arya.

- ¡No es tu novia! - Grité tan cerca de su cara que por inercia dió un paso hacia atrás. - No mientras yo siga aquí, no mientras yo viva. Me importa una mierda el cariño que te tenga o el que tu le tengas a ella, y también me importa una mierda los tornillos que tengas sueltos. - Di un par de golpecitos con mi dedo en su cabeza. - Mientras yo siga respirando no vas a volver a acercate a Sophie, porque juro por diós que me voy a encargar de que tu cabeza vuele hasta la otra punta del país.

Me miró con odio por unos segundos, realmente estaba esperando que hiciera alguna tontería, estaba deseando que diera algún paso en falso para poder darle una paliza.

- ¡Ryan!- Anna apareció en escena.

- ¡¿Y vosotros seguís confiando en ellos?! - Me giré hacia los demás. - ¡Sólo han traído problemas y desgracias!