Incluso mi inerte piel podía notar el frío que aquel día nos asolaba, incluso a través de la gruesa armadura de cuero negro que James nos había proporcionado.
Los copos de nieve caían sobre nuestros hombros y pelo, mezclándose con mi tono platino, derritiéndose en él.
A pesar de la densa niebla, veía demasiado. Cientos de personas por todos lados, armados y preparados para intervenir, a una distancia considerable del edificio de Kylie.
Sabían que veníamos, queríamos que nos sintieran llegar, el bosque estaba rodeado, no podían escapar.
Observé el gran edificio de oficinas abandonando en la distancia, sitiado y listo para ser asediado. Me gustaba imaginarme a Kylie en lo más alto, temblando mientras me miraba, sabiendo que su fin estaba cerca, y no podía hacer nada para impedirlo.
Eché un rápido vistazo a mi alrededor, cómo todos colaboraban y se preparaban para lo peor.
James había armado a sus cazadores con ligeras armaduras de cuero negro y armas de plata. Nos enfrentaríamos a vampiros, así que no habría ningún problema, tampoco con los Price o los Walker, quienes no necesitaban mas que sus manos para defenderse.
Yo, en particular, había llevado el regalo de Marie.
Observé como James dejó de hablar con un grupo de cazadores y se acercó a mi.
- ¿Estás lista? - Preguntó, el plan empezaba por mi. Asentí y me cogió del hombro, dirigiéndome por el improvisado campamento. - Querrán quedarse dentro y matarnos uno a uno cuando intentemos entrar por las pequeñas ventanas, por eso es importante que abráis todas las entradas posibles, cada lado del edificio tiene unas cuantas puertas. No sabrán por dónde les vienen los golpes.
Asentí tratando calmarme mientras llegábamos hasta los Price y los Walker, todos listos y mentalizados para la batalla.
- Savannah, Hunter y Sophie, preparaos, esto va a empezar. - Dijo James decidido.
Asentí y me acerqué a la pequeña mesa allí situada, me puse los guantes que Marie me había dado y cogí mi lanza de plata con punta de obsidiana, ya afilada y lista para ser usada.
Savannah se dio la libertad de observarme de arriba a abajo y después a mi arma.
- Bonito juguete. - Murmuró.
- Mata que da gusto. - Contesté.
- Entonces te va a venir de perlas hoy. - Intervino Hunter guiñándome un ojo. Sonreí y me limité a esperar nuevas órdenes de James.
Seguí observando el campamento improvisadamente levantado detenidamente. James y Lexa corrían de allá par acá, examinando cada cazador, repasando cada estrategia y explicando cada parte del plan. Noté movimiento a mi lado, y observé a Cole alejarse de nosotros, mi cuerpo se paralizó al ver con quien se fue a encontrar.
No me lo pensé dos veces y caminé hasta ellos, haciendo crujir la densa nieve bajo mis pies. Ni siquiera se habían dado cuenta de mi cercanía, y charlaban como si nada. No presté atención a la conversación y aparté a Cole de un manotazo, encarándome con el mal nacido allí presente.
- ¿¡Me puedes explicar ahora mismo que cojones estás haciendo aquí?! - Solté con firmeza mientras zarandeaba a Luke del brazo.
- ¡Vengo a ayudar! - Se defendió.
- De eso nada, no sabes pelear, lo único que vas a conseguir es que te maten, vete a casa Luke.
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Aleación [SANGRE & ACERO #3]
VampireTercera y última parte de la trilogía Sangre & Acero. Los libros anteriores en mi perfil.