Los ángeles son una tentación.

CAPITULO 11

Cuando la tutora nos obliga a salir, me entero de que Bri le dijo que me encontraba mal y que necesitaba dormir.

Bajamos a la piscina, donde están todos. Me siento en el césped y Scott a mi lado. Visualizo a Mindy, que está al lado de Pam mirándonos con odio. Le sonrío y le guiño un ojo.

-Scott.-Me giro hacia él.

-¿Qué?

-¿Como que "qué"?-Digo intentando imitar su voz- ¿Que fue lo que pasó allí arriba?

-Al parecer corté con Mindy. No me gustaba.- Se encoge de hombros.

-Según tú, se comporta como si fuese un objeto.-Digo enarcando una ceja.-Y... que yo era una chica increíble. Aunque seguro que solo lo dijiste para dejarla.

Tarda unos segundos en contestar.

-Exacto.

***

Esa misma noche, los chicos volvieron a reunirnos a las chicas en la piscina. Me pongo un pantalón largo, ya que esta noche hace bastante frío, un jersey azul claro en el que pone Born in the 90's, y unas vans rosas.

Salimos las mismas del otro día menos Mindy.

Cuando llegamos a la piscina, los chicos también son menos.

-Chicas, hemos preparado un pequeño juego.-Dice Trevor dando un paso adelante.-Hemos escondido unos pañuelos por ahí.-Dice señalando la maleza.-Iremos de dos en dos por el bosque, y cuando los encontremos, volvemos. Estas son las parejas:

Pam y Ross.

Karen y Louis.

Rocío y yo.

Emma y Brad.

Dani y Scott.

Bri y Nazan...

Dice el resto de las parejas, y cuando acaba, Scott se acerca a mí y caminamos todos juntos hasta llegar al claro del bosque.

-Si de aquí a dos horas no encontrasteis nada, debeis volver.-Dice Nazan.

Todos asentimos, y de un momento a otro, Scott y yo estamos caminando por el bosque, solos.

***

Dos horas después no encontramos nada.

-Deberíamos volver.-Digo frotándome los brazos. Hace mucho frío.

-De acuerdo.-Se acerca a mi y se quita su chaqueta, para luego ponérmela por los hombros.

-¿No tendrás frío?-Le pregunto.

-No. Estoy bien.-Dice sonriendo.

Empezamos a caminar, pero tras un rato, me doy cuenta de que estamos andando en círculos.

-Scott... no sé por donde hay que volver.-Digo mordiéndome el labio.

Escucho el aullido de un animal, y ahogo un grito.

-Tranquila.-Scott se acerca de forma protectora, y pasa un brazo por mi cintura.- Yo tampoco sé donde estamos. Todo está muy oscuro. Deberíamos buscar un lugar donde pasar la noche, es demasiado peligroso intentar volver por ahora. Podríamos alejarnos todavía más. Cuando amanezca saldremos.

-¿¡Dormir aquí?!-Exclamo.

-No dejaré que te pase nada, te lo prometo.-Dice apretándome más contra él.

Asiento entre temblores.

Caminamos un poco más y damos con una cueva más o menos escondida.

-Aquí está bien.-Dice entrando.

Yo también entro. La cueva no es muy alta, Scott casi llega al techo.

Nos sentamos en el suelo, uno enfrente de otro. Scott coge unos pocos palos y con su mechero enciende una mini-hoguera.

¿Tiene un puto mechero y no tiene un móvil? Hay que ser gilipollas.

Quince minutos después, la temperatura desciende mucho, y aún con la chaqueta de Scott estoy tiritando.

-Dani, lo que te voy a decir ahora alomejor es un poco incómodo.-Scott está apoyado contra la pared de la cueva, haciendo que su camiseta negra marque sus músculos.

-Dime.

-Primeras normas de supervivencia.

-¿Eh?-Le pregunto confundida.

-¿Sabes cuales son?

-Solo una, y por una peli. Hay que desnudarse para...-Abro los ojos como platos al darme cuenta de sus intenciones.-No, nononono...

-Estás helándote. Dani, hablo en serio.-Su expresión no es para nada graciosa.

Me lo pienso un segundo.

-De acuerdo.-Susurro.

Scott se levanta y se quita la camiseta y el pantalón, quedándose en boxers.

-Vamos, Dani, me estoy helando.

-Ya voy. No me metas prisa.-Me incorporo y me saco la chaqueta de Scott.

Me alegro de ir conjuntada con la ropa interior por una vez.

Una escalofrío recorre mi columna, y mi cerebro me manda que me tape, pero sé que no debo.

Me quito el jersey y me quedo con el sujetador negro de encaje. Luego, llevo mis temblorosas manos hasta el botón de mi pantalón y me lo desabrocho. Me los quito y me sonrojo al ver a Scott recorrerme de arriba abajo.

-Deja de mirarme y abrázame de una vez, que tengo frío.-Me acerco a él y me cruzo de brazos.

Él asiente y se sienta en el suelo, con las piernas cruzadas.

-Súbete.-Dice, dándose una palmada en las piernas.

Me acerco más a él y me siento en su regazo de cara a él. Mis piernas le rodean su cintura inconscientemente, y mi cabeza se apoya en su pecho. Mis manos le rodean el cuerpo y le frotan la espalda para entrar en calor. Él apoya sus manos en mi espalda, y me aprieta contra él, de forma que no queda espacio entre nosotros. Me sonrojo al darme cuenta de lo que parece que estamos haciendo. Me separo un poco de Scott para mirarle a la cara. Tiene una sonrisa esbozada, apenas visible para un ojo que no sea muy detallista. Sonrío.

-¿Por qué sonríes?-Me pregunta extendiendo su sonrisa.

-No lo sé. Esto está... bien.-Le digo sonrojándome ante la "declaración" que le acabo de hacer.

Su expresión se vuelve seria. Pienso que no le ha gustado mi comentario, pero en vez de eso lleva una mano a un mechón de pelo que me cae por la cara y me lo coloca detrás de la oreja. Su mano queda en mi mejilla, pero haciendo presión para que me acerque a él. Lo hago, y fundo mis labios con los suyos en un dulce y cálido beso.

Apenas dura diez segundos, pero ha sido tan expresivo, que me dan ganas de reír, llorar, saltar, correr y besarlo más.

Así que vuelvo a unir nuestras bocas. Sus manos se deslizan hasta el final de mi espalda, y me la acaricia formando círculos con su dedo índice.

Cualquier otro chico se sobrepasaría, pero él no.

Pongo mis manos en su pelo y lo revuelvo un poco. Finalmente nos separamos, y sin darme cuenta, me quedo dormida contra su pecho, escuchando los rápidos latidos de su corazón.

Aquí os traigo el cap que os prometi!! Que os parece??? Besos!