Digimon R3

Capítulo XLVII: Lancelot al Rescate

     Cañones de Hadrones. Espadas. Explosiones. Slash Harkens volando a diestra y siniestra. El campo de batalla era un tremendo caos. Los edificios adyacentes se derrumbaban tras recibir el impacto de alguna técnica Digimon. Los Elevens que aún no eran evacuados soltaban gritos de terror cada vez que veían volar los Slash Harkens. No había rastros de Cornelia ni del ejército de Britannia.

     Lelouch jamás se sintió tan afortunado de tener a Nene como en ese momento. Gracias a los Monitormons, Lelouch podía comunicarse con el comité estudiantil y atender los comunicadores al mismo tiempo. Con Shirley, Rivalz y Milly había un Monitormon que les mostraba a Lelouch en pantalla. El chico les explicaba el funcionamiento de los Knightmares al mismo tiempo que le indicaba a Kallen y CC hacia dónde moverse. Nene ya no necesitaba las instrucciones de Zero pues conocía a la perfección el funcionamiento del Gawain.

     Tswarmon seguía luchando contra el Guren. ZeekGreymon peleaba contra los Knightmares de Oggi y el comité estudiantil. Arresterdramon se defendía de Tamaki mientras seguía evacuando a los civiles. Xros Up Ballistamon era de gran ayuda para bloquear los ataques. Por último, OmegaShoutmon no le daba tregua al Gawain. Dorulumon y Beelzebumon se habían unido también a la contienda, luchaban uno contra el otro.

     Lelouch reía a carcajadas pues parecía ser que la victoria sería para él y los Caballeros Negros. Nene tan sólo esperaba que Suzaku regresara pronto.  No quería ser ella la que asestara el golpe final contra Taiki y su Digimon.

     Tal y como era de esperarse, la batalla se estaba transmitiendo en vivo. Cualquier canal que se sintonizara mostraba esas imágenes. Monstruos Digitales, Knightmares y Elevens enloquecidos. Sangre, gritos y densas nubes de humo.

     Desde la comunidad del diván rojo de su enorme habitación, Cornelia observaba la contienda a una distancia bastante prudencial. Desde el inicio de la transmisión se decidió a no interferir. Aquello quebrantaba su alianza con Zero, lo sabía, pero el ataque del Xros Heart iba dirigido al Área 11 y no a Britannia. Por esa misma razón prefirió quedarse en la comodidad de su diván mientras Guilford se dirigía al sitio de la batalla para mantenerla al tanto de los detalles que la transmisión en vivo no alcanzaba a ver. Lo único que deseaba Cornelia en ese momento, aunque fuera demasiado cruel, era que Lelouch pereciera en la batalla.

     Las técnicas ninja de Tswarmon no servían en contra del Guren. ¿De qué le servía desaparecer si los otros Knightmares alertaban a Kallen de su presencia en tal o cual punto? 

     Yuu no se quedaba atrás. Intentaba trepar por las piernas del Guren para llegan a la cabina de control. Kallen utilizaba sus ondas de expansión para deshacerse de él pero Yuu siempre volvía. 

     No existía rival que se pudiera comparar con Kallen. Incluso Yuu debía admitir que resultaba fascinante su forma de pilotear el Knightmare rojo. Un 80% de las explosiones eran causadas por Kallen y su lanzagranadas.

     Tswarmon intentaba destruir los brazos del Guren por todos los medios posibles. Prestaba especial atención en el brazo que provocaba las ondas radioactivas. El Guren lo tomó por los pies con sus afiladas garras y lo lanzó a los aires para acribillarlo con sus proyectiles. Yuu dio un salto para esquivar un Slash Harken del Gawain y volvió a treparse a la pierna derecha del Guren. Kallen utilizó nuevamente las ondas expansivas y Yuu salió volando hasta estrellarse contra una montaña de escombros. Tswarmon voló a toda velocidad para prenderse de la cabeza del Guren pero fue interceptado por Mervamon y su Heartbreak Shot. Aturdido, Tswarmon cayó al vacío y las garras del Guren lo atraparon.

     — ¡Pase largo, E7!  —exclamó la pelirroja por su comunicador.

     El Guren giró sobre sí mismo y soltó a Tswarmon que salió volando en dirección hacia el Gawain.

     — ¡Destrúyelo, Nene!  —exclamó Zero.

     — ¡Lo tengo!  —respondió la aludida.

     Presionó con el dedo índice el botón que activaba el cañón de Hadrones. Escuchó gritar a Tswarmon poco antes de que sus Datos fueran aniquilados. Pudo escuchar la sonrisa de Kallen a través del comunicador y deseó poder chocar las palmas con ella para celebrar. Intercambió una sonrisa con Lelouch y retomó su pelea contra OmegaShoutmon. Jamás en su vida pensó que sería capaz de asesinar a un Digimon. Mucho menos al compañero de su hermano menor. Pero, por Zero…

     << Por él, daría la vida… >> pensaba.

     Devastado tras haber visto a su amigo morir de esa forma, Yuu colapsó. Su rostro estaba desencajado y gritaba sin parar hasta taladrar con su voz los tímpanos de sus amigos. A Taiki le partió el corazón y no pudo evitar darse cuenta de que todo aquello, toda esa tragedia, había sido culpa suya.

     — ¡Tagiru, llévate a Yuu!

     Fue Kiriha quien tomó el control al ver el pánico reflejado en los ojos de Taiki.

     — ¡Estoy ocupado aquí!  —respondió Tagiru acalorado.

     El chico conducía a los Elevens hacia uno de los edificios que aún no se derrumbaban. Ya que el chico no se daba abasto entre tantos civiles que proteger, Zenjirou corrió con Yuu y lo tomó por los hombros para hacerlo andar y marcharse.

     — ¡Suéltame!

     De un empujón, Yuu se sacó a Zenjirou de encima y fue corriendo hasta el sitio donde yacía una montaña de escombros. Encontró ahí un tubo de acero tan pesado que le costó levantarlo la primera vez. Cuando consiguió blandirlo, corrió hacia el Guren. Dejando una estela de lágrimas a su paso, el chico llegó con el Knightmare rojo y le propinó un golpe con el tubo de acero. La abolladura era de un tamaño considerable aunque no consiguió desestabilizar a la mole de metal. El ataque de Yuu llamó la atención de ZeekGreymon, quien atacó al Guren con su Zeek Flame.

     — ¡¡Kallen!!

     Nene, Lelouch, Oggi y Milly soltaron ese grito al unísono. Kallen se cubrió el rostro con los brazos cuando escuchó la colisión. 

     El cañón de Hadrones del Gawain impactó contra la Zeek Flame de ZeekGreymon, anulando su ataque. Y aunque Nene no hubiera realizado su movimiento, la Zeek Flame no habría conseguido impactar al Guren.

     —No… No puede ser…

     Kallen se quedó sin palabras al verlo. 

     El Lancelot estaba frente a ella con un brazo extendido hacia un lado a manera de escudo para protegerla y con su brazo libre apuntaba a ZeekGreymon, listo para disparar su rifle.