DON'T FORGET ME [Joshler]

22

Tyler:

No dejaré que lo que el pequeño Jeremy dijo me arruine el momento, estoy muy feliz. Sin embargo, siento una punzada en el pecho cada vez que pienso que podría decepcionar a tantas personas, no me había planteado qué pasaría si no volvemos a los escenarios.

También dijo que estaba enfermo, ¿realmente lo estoy? Es decir, desde hace una semana no escucho voces, estoy muy tranquilo pero, ¿realmente ya superé todo eso? Me he resignado a no recuperar la memoria así que eso ya no me preocupa, lo único que me asusta es que el de la cara borrosa vuelva a hablarme.

—¿Ty-Ty?— Brendon chasquea los dedos enfrente de mí.— Siempre tengo que traerte a la realidad, chico. Me alegra saber que algunas cosas no cambian.— habla con la boca llena de papitas, y en consecuencia me cae un trozo en la mejilla. Bren abre mucho los ojos, denotando sorpresa.— Perdón Ty, siempre me pasa mientras como y hablo a la vez.— La quita de mi cara y se la vuelve a comer.

Miro a Josh y ve la escena con una expresión de asco, pero sin dejar de sonreír, al Igual​ que a mi, le resulta muy divertido.

—Gracias a Dios ya llegamos, me muero de hambre.— dice Bren chupándose los dedos.

—Acabas de comerte una bolsa grande de papitas.— Josh lo mira incrédulo.

—¿Y? Eso sirvió como aperitivo, no comemos desde hace mucho. Siento que me faltan calorías.

—Pero comimos en el avión, Brendon...— digo y él me mira fingiendo molestia, lo sé porque intenta no reír.

—Dejen de criticarme, ¿Si? Soy de buen comer.

—De excelente, diría yo.— suelto sin pensar.

—Ya vas agarrando confianza Ty-Ty...— Bren arquea las cejas.— Es bueno saberlo.

Trago en seco al oír la insinuación, este tipo está loco.

Entramos al hotel del parque y es espectacular. Quedé fasinado. Parece una inmensa mansión de color perla con los techos pintados de azul marino, hay pequeñas banderas rojas en la sima del gigantesco inmueble.

Toda la entrada está rodeada por una gran piscina con el agua más cristalina que he visto, solo hay un pequeño camino de concreto para acceder a la entrada y un puente, muy bonito de color blanco, se anexa a una pequeña isla con una gran palmera. No puedo esperar a entrar al lugar, no creo en  nada que pueda ser mejor que esta visita.

Estaba equivocado. A dentro del hotel es tan hermoso como a fuera. Los empleados te reciben con una gran sonrisa, todo esta perfectamente acomodado. Adoro que para donde mire me encuentre con la temática de Disney, pero sin parecer dirigido a los niños. Todo es muy elegante y refinado, con colores agradables a la vista de un adulto. En la recepción del hotel nos dieron las llaves de nuestras habitaciones, nos despedimos momentáneamente de Brendon para descansar un rato y dejar nuestro equipaje, y subimos a nuestros cuarto.

En este momento yo soy un "Wow" constante, vuelvo a ser un niño estando en este lugar, me siento realmente maravillado. No puedo creer lo feliz que me resulta estar aquí, compartirlo con Brendon y Josh.

Josh... Es verdaderamente mágico estar aquí con el chico de quién estoy enamorado, y más sabiendo que él me ama. Me es inevitable sonreír al pensar esto.

Entramos a la habitación y, como era de esperarse, es realmente hermosa. Tiene un color vainilla en las paredes y es blanca en el techo, la alfombra es azul marino al igual que el sillón más grande que está en la pequeña sala, hay otro sillón de color rojo, cuenta con una pequeña mesa con dos sillas, y en el fondo está una inmensa cama.

Todo se mira de cinco estrellas, jamás imaginé estar en un lugar así. No puedo evitar llorar de felicidad, y al ver esto, Josh me abraza muy fuerte, como intentando funcionar nuestro​s cuerpos. Siempre que lo siento tan cerca de mi una corriente de energía recorre todo mi cuerpo. Se separa del abrazo, me sonríe, y Dios esa sonrisa me hace soñar,  deja un largo beso en mi mejilla provocando que me avergüence. Recién le comienza a crecer la barba, puedo sentir un agradable raspar en el contacto. Se separa, pero antes de que lo haga por completo me cuelgo de su cuello y lo beso, solo que yo lo hago en los labios.

Siento cosquillas en la parte baja de mi abdomen. Mi piel se eriza cuando siento sus manos tomarme de la cadera para acercarme más a él. El beso es cálido, empieza lento, pero siento como poco a poco se intensifican los movimientos de nuestros labios. Siento la lengua de Josh acariciar la mía, rosar mis labios. Besa mi mejilla, deja un beso húmedo en mi cuello que casi provoca que emitiera un gemido, y antes de separarse de mi, deja un último beso en la frente.

—¿Estas feliz?— Pregunta acariciando mi mejilla. Apuesto que estoy sonrojado.

—Si, Josh. Demasiado, gracias por todo esto.

—No me agradezcas a mi, cariño.  Al que le debes de agradecer es a Bren, que por cierto debe tener hambre. Vamos a buscarlo.— Sonriente se dirigió a la salida, pero lo detuve.

—Oye Josh...

—¿Si cariño?

Debía decírselo, quería hacerlo, sentía que era lo correcto...

—Yo...— Me miró un poco curioso.

—¿Tú... Qué?

—Yo... Bueno...— Te amo.— Yo... Estoy feliz de estar aquí contigo.

—Y yo de tenerte aquí conmigo, Ty. Soy muy afortunado de ver esa sonrisa. Ven, vamos con Brendon.

Asentí y fuimos por nuestro amigo, me sentía un poco culpable por no decirle lo que sentía, que el amor no se había ido con mis recuerdos, pero algo me detuvo, tal vez no era el momento adecuado...

¿Qué dijeron? ¿Qué este era el capítulo de smut? Pues Naranjas, dijera mi papá. xD

No creo que haya otro hasta el lunes, o martes porque voy camino para verme con mi novio.

PD: No corregí ortografía, por si las moscas.

NO TENGO SEÑAL DESDE HACE DOS DÍAS.