Todo Cambió #1 (Juanpa Zurita)

Cap.6

Al parecer se trataba de un viner por lo que no tomé importancia, fuímos por nuestros helados y de regeso pasé a dejar a lele a su departamento. Mientras iba en camino me entró una llamada de mi hermano.

- Hey, ¿Qué quieres?

- Dice papá que nos tiene una noticia algo importante para él. Apúrate que ya está en casa y quiere decirnos.

- Ya estoy en camino.

- Bien, te estamos esperando.

Cuelgo y acelero un poco. Un par de minutos después llego a casa y al entrar noto que ambos están en la sala.

- Holi

- Hola cariño, toma asiento por favor.

Ou, su semblante es algo serio por lo que suena a que no será buena noticia.

– ¿Y bien? 

– Hijos, hace un tiempo conocí a una mujer llamada Tere Arellano, es empresaria y tiene ideas muy buenas y  con mucha visión. En fin, decídimos asociarnos aunque para ello hay un pequeño problema.

Intercambio miradas dudosas con mi hermano.

- ¿Qué problema y qué tenemos que ver nosotros con esto?

- Es cuestión de logística niños, no creo que lo entiendan, pero bueno, ustedes entran en la parte dónde se casan con sus hijos y forman un bello patrimonio que podría durar cientos de  generaciones.

- Disculpa me perdí en la parte dónde mencionas algo de casarse.

- Hija...

- No, me rehúso a hacerlo. No pienso casarme con nadie.

- Eres mi hija y estás bajo mis reglas.

- Pero es mi vida y yo decido que hacer con ella.

- No mientras yo te mantenga.

- No me obligues a odiarte papi.

- Odíame todo lo que quieras, yo ya tomé una decisión y cerré un trato, no pienso cambiar de opinión. - mira a Austin. - ¿Tú no piensas decir nada?

- No hay nada que decir, no me queda de otra más que también odiarte por arruinar nuestras vidas.

Ambos nos levantamos del sofá y subimos a nuestras habitaciones.

Días después...

Las cosas siguieron tensas entre él y nosotros, más conmigo, no le he dirijido la palabra y creanme que no pienso hacerlo hasta que se disculpe. Perdón pero mi orgullo sí es más grande que mi familia.

Austin y yo nos encontramos ayudando a la cocinera cuando papá entra a la cocina.

- Buen día. - dice sonriente

¿Qué tienen de buenos?

- Buen día señor Downey. - responde Gloria, la cocinera.

Entablan una pequeña charla y luego ella se va para hacer unas compras.

- ¿Hasta cuando va a durar su ley del hielo?, maduren ¿Quieren?

- Lo dice quien duerme con calcetines de dinosaurios y sábanas de carritos. - me dice Austin y río

- De acuerdo de acuerdo, burlense todo lo que quieran. - está por salir. - Solo les aviso que esta noche irémos a una cena con sus futuros esposos y espero que sean igual de graciositos. Ah, y si se niegan me encargaré de bloquear todas sus cuentas y quitarlos de mi testamento.

No lo haría.

- Y no me reten niños, no saben de que puedo ser capaz.

Sale de la cocina aún con una estúpida sonrisa en su rostro y siento como la sangre hierve en mis venas.

- Kath...

Clavo el cuchillo en la tabla de picar y Austin da un brinquillo.

- En serio lo odio.

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