Todo Cambió #1 (Juanpa Zurita)

Cap.10

Lele se quedó a dormir por lo que eso significó plática hasta las 4 de la mañana. El sol que entra por mi ventana se encuentra justo frente a mi cama por lo que cada mañana me anuncia que el día ya empezó.

Olvidé desactivar la alarma por lo que esta comenzó a sonar justo al lado de mi oreja.

- ¿Quieres callar esa cosa? - reprocha lele

- Hora de levantarse cariño.

Me paro de la cama y dirijo al baño sin apagar la alarma.

- Juro que voy a tirar tu celular si no desactivas eso.

- ¿Por qué recurrir a la violencia?

Lo tomo mientras lavo mis dientes y dispongo a revisar mis notificaciones. Luego de un rato bajamos a desayunar.

- ¿Qué haremos hoy? Aparte de esperar ansiosa que llegue la hora de tu cita.

- Que no es una cita.

- Lo és, pero bueno ajá.

Sonrío negando con la cabeza

- Pues el día amaneció bastante soleado y con un clima algo caluroso, ¿Quieres nadar?

- ¿Nadar? Osea ir a la playa.

- No hace falta. Ven.

La guio hasta la parte trasera de la casa y se impresiona al ver el tamaño de la alberca.

- ¿Qué? Casi dos meses siendo amigas y nunca me dijiste que tienes alberca.

- No preguntaste.

- Ay mira que payasa me saliste.

Reímos y subimos a cambiarnos, le regalé un traje de baño que a mi nunca me quedó y yo usé el mio. Estuvimos disfrutando del agua y el sol hasta que Austin llegó.

- Hola chicas. - me levanto los anteojos para saber de quien se trata y los vuelvo a poner al ver que es mi hermano. - ¿Que tal está el agua?

- ¿Por qué no entras y la pruebas tú?

¡Eso lele! ¡Sé atrevida!

Austin le sonríe coqueto y pone las manos en sus caderas.

- Ahora vuelvo.

Entra a casa y lele me mira haciendo un gesto de emoción.

- ¿Viste eso? Dios no sé de dónde saqué valor para decirlo.

- Creo que no necesitas mi ayuda.

- Claro que sí, que cosas son sus favoritas, sus gustos, película, comida y música favorita. Amiga, creeme que te necesito.

- Lele, si te soy sincera, creo que esa es la parte más bonita de conocer a alguien, que descubras por tí misma que es lo que le gusta y que no, porque yo te puedo decir pero en realidad puede que haya cambiado y aún siendo su hermana no me doy cuenta de esos detalles. - me regala una sonrisa.

- En serio no me arrepiento de haberte conocido Kath.

- Ni yo.

- Ya volvió por quien lloraban. - dice Austin y corre a la piscina para lanzarse por lo que salpica mi toma del sol.

- ¡Ahg, eres un idiota Austin! - reprocho secandome las gotas con una toalla.

Luego de un rato de juegos y una que otra broma llega la hora de salir del agua.

- Vamos, necesitamos arreglarte para tu cita. - dice lele

- ¿Cuál cita, con quién y con permiso de quién? - interroga mi hermano

- ¿No crees que ya estoy bastante grandesita para tener que andar pidiendo permiso o dar explicaciones?

Se cruza de brazos

- Me dirás o no niña.

- Saldré con Juanpa.

- ¿Juanpa?

- Juan Pablo, el hijo de Tere, ¿Recuerdas?

- Ándale, entonces siempre sí pudo conquistarte.

- Caes mal.

- Oye, papá se irá un tiempo de la ciudad, me pidió que te avisara.

- Oki.

Subo con lele y me doy una ducha algo rápida para quitarme el olor a cloro de la piscina, al salir noto que está más que embobada mirando el techo.

- ¿Y ahora que te pasa?

- Dios tú hermano es tan guapo.

- Ew

- Es obvio que nunca lo verás de esa forma

- Y estoy agradecida de nunca poder hacerlo.

- Pero bueno no hay que perder tiempo, a ver, ¿Qué usarás?

- Pensaba en estos jeans con este top.

- ¿Qué? Agh, a un lado.

Me empuja y luego de un par de minutos escoge un top straple de cuadros negros y blancos, junto con unos shorts negros un poco holgados y unos botines negros algo rudos.

- ¿Estás segura? - me quedo mirando el top

- Se te verá genial, te lo aseguro.

No muy convencida me pongo el outfit y me miro al espejo.

- ¿Ves? Te vez radiante.

- Se nota mucho mi panza y mis hombros anchos. - comienzo a taparme pero lele se levanta y se para a mi lado.

- Claro que no, estás perfecta, se te ve bien, confía en mi.

- ¿Por lo menos puedo llevar la chaqueta?

- De acuerdo.

Seguimos con el maquillaje y me hace algo un poco natural, claro que resaltando el delineado, las pestañas y los pómulos.

- Bien, creo que ya estoy.

- Suerte guapa, me cuentas todo cuando regreses.

- Claro que sí, gracias lele. - sonrío. - Te quedas en tu casa.

Me despido y tomo mis cosas para ir a encontrarme con el niño de bonitos ojos.

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