Los monstruos también se enamoran.

|Dudas.|

*narra Kellin*

Miraba el anillo en mi mano, solo un poco, y la boda seria un hecho.

-¿En que piensas amor?

-¿Eh?, no en nada.

-no te estarás arrepintiendo ¿verdad?.- me pregunto mientras me abrazaba por la cintura, a la vez que juntábamos nuestras frentes.

-claro que no, como podría pensar en algo así.

-Eso espero, por que tu eres lo mas importante para mi.-

-Y tu para mi.-después lo bese, lo quería tanto, pero algo en mi comienza a dudar.

-Quiero esta siempre contigo.

-Yo también, pero debo regresar a casa, mi madre me quiere de regreso.

-Aun es temprano.

-Conoces a mi madre "nada de dormir juntos hasta el día de la boda"

-Tu mami es mala.

-Mi madre es un amor, por algo somos madre he hijo.

-Pero enserio, quédate.-comenzó a besar mi cuello, y en verdad que eso me encendía realmente rápido, sabia todo sobre mi, mis reacciones, mis gestos.

-Ahhh.....-se me escapo un gemido, y después de esto no hay vuelta atrás.

Nuestra respiración comenzó a agitarse, nos atraíamos el uno a el otro.

-Vamos arriba.-dijo entre el beso, yo solo asentí y rodee su cintura con mis piernas, el me sujeto por los muslos, y torpemente subimos a su habitación.

Llegamos hasta la cama tropezando con todo somos muy torpes.

Me acostó en la cama, al momento que lo atraía y lo besaba al mismo tiempo que desabrochaba su camisa, y la aventaba a cualquier parte de la habitación, al igual que toda la ropa restante.

En segundos,  estábamos piel con piel, nuestras manos unida al igual que nuestros cuerpos y alma.

Sin duda eramos almas gemelas.

El sentirlo entre mis brazos, sentir como golpea dentro de mi cada vez mas rápido, la sensación tan agradable que se siente al momento en el que besa mi cuello y baja por mi espalda, este sentimiento de amor, esta sensación de estar en el lugar correcto es de las mejores sensaciones.

<<Kellin>>

Caminaba por el parque donde había conocido a ese chico, pero el no estaba ahí, así que con la esperanza de verlo de nuevo, tome la invitación que había apartado, y la deje en el columpio donde nos habíamos visto, después me senté en el columpio de a un lado, por alguna razón quería verlo de nuevo.

Es como si, mi corazón quisiera ayudar a ese chico, el ver sus ojos tan vacíos como la vez pasada fue algo que definitivamente me marco, es totalmente inexplicable para mi, y siento que aunque lo vea de nuevo no podre saber aun el porque de esto que siento, ¿porque tengo esta sensación de querer estar con el, de ayudarlo?

-Mi chaqueta.- si, soy tan distraído que olvide mi chaqueta en casa de vic, y muy probablemente también olvide mi celular, así que regrese las pocas calles desde el parque.

*narra Oliver*

Por alguna razón regrese a el mismo parque, estaba tan distraído que no me fije por donde iba hasta que llegue a los columpios y vi algo, me acerque para tomarlo.

Te invito a nuestra boda.

Víctor Fuentes y Kellin Quinn.

Para el chico de los columpios.

Así que se va a casar, me senté en el columpio y puse música, mis audífonos estaban por explotar debido a el volumen.

De pronto unas manos taparon mis ojos, instintivamente le di un golpe y me coloque sobre el sujetando sus brazos con mis piernas, tras el movimiento brusco mis audífonos y celular salieron volando y terminaron en algún lugar.

-Tranquilo jajajaja solo soy yo.

-Por que demonios haces eso, pude haberte matado.

Estábamos tan cerca, que podíamos sentir nuestras respiraciones.

Se que te prometí no enamorarme y no hacer lo mismo, pero, esto es mas fuerte que yo, perdóname.

Pensé antes de desaparecer la poca distancia que había entre nosotros, estaba comenzando a corresponder, cuando me empujo y salio corriendo.

Era obvio de entender, el ya estaba comprometido, con alguien que lo amaba, y que lo trataba bien, yo no soy competencia para el.

—Aun que lo fueras, tú estás atado a mi Oliver Sykes.

—Lo se, no tienes que recordarlo.

Una silueta se veía sentada en uno de los columpios frente a Oliver.

Editado el 28|06|2018

Editado por segunda vez: 24|09|2018