Capítulo 6: Rojo Carmesí

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¡WARNING!

Este capítulo contiene ESCENAS SANGRIENTAS, no actas para un público sensible.

Se avisará cuando se hayan finalizado las escenas

La mano enguantada de FellGaster se introdujo en el interior de la herida de tu vientre y sin ninguna delicadeza por parte del científico comenzó a extraer tus viseras, examinando cada tramo de su anatomía con gran fascinación; se sentía en el paraíso al encontrar tal hallazgo en tu interior, un preciado tesoro.-Tu nivel de regeneración y adaptación es fabuloso, se aprecia que eres una creación mía-.Amplió su sonrisa macabra mientras depositaba en aquella mesa quirúrgica tus vísceras, le estaba maravillando tener aquellos órganos en sus manos; la excitación recorría todo el cuerpo de FellGaster. Con cada nuevo miembro que extraía de ti se tomaba su tiempo en evaluarlo, diseccionarlo y analizarlo, sus cortes eran precisos y las agujas cargadas, de a saber que contenido, no faltaban en la mesa; la sangre fluía libremente sin ningún impedimento llegando a gotear por los extremos de la mesa, manchando el blando e impoluto suelo de tu valioso liquido carmesí.

Mientras el científico se divertía tu estado estaba empeorando, no importaba cuantas dosis de anestesia se estuviera administrando, el dolor era simplemente atroz; no podías articular palabra alguna, tu cuerpo no obedecía tus órdenes y la sangre se escapaba con abundancia de tu cuerpo. Pronto morirías desangrada si FellGaster no hacía nada para impedirlo, pero realmente a estas alturas poco te importaba morir, quizás esa era la única escapatoria para ti, para el sufrimiento que sentías; ya regresaste una vez de la muerte ¿Volverías a regresar una segunda vez?

Un movimiento brusco por parte del maniático produjo que una gran cantidad de sangre saliera al exterior a través de tu cavidad bucal, provocando una dolorosa tos y la sensación de asfixia por la abundante cantidad de líquido que se había drenado al interior de tus pulmones.-La resistencia ósea es mayor que lo estipulado en otros exámenes, se ha requerido utilizar magia de nivel II para romper las costillas IX y X-.Aquel ser nauseabundo documentaba todo lo que te hacía mediante una cámara, la cual estaba situada a unos pocos metros por encima de vosotros de manera que captara de forma clara y precisa los movimientos realizados por FellGaster; ninguna acción debía escapar a su lente, todo debía estar perfectamente documentado .-Según voy avanzando el organismo se vuelve más resistente a la magia empleada, logrando a veces ser inmune.

(Finalización de las escenas sangrientas)

Tu visión comenzaba a nublarse, producto de la falta grave de sangre en tu cuerpo, estabas rogando, casi suplicando para que tu cuerpo entrara en shock y así dejar de sentir tanto dolor; cerrar los ojos y despertar al lado de tus seres queridos, era lo que más anhelabas en esos momentos.

Procederé a extraer una muestra del tejido cardiaco, cerebral y del alma, para posteriormente proceder a analizarlos con cautela. Necesito hallar el por qué de su~-.Un fuerte estruendo, proveniente del exterior de la habitación en la que os encontrabais, interrumpió a FellGaster. Él cual solo liberó un gruñido de frustración mezclado con rabia; dejó de manera brusca los instrumentos quirúrgicos en una pequeña mesa que tenía cerca.-Esos estúpidos bastardos

FellGaster apartó de tu rostro aquella mascarilla que había estado administrándote medicamentos por vía aérea, para acto seguido pasar sus dedos enguantados, todavía manchados de tu sangre, por tu pálida mejilla.-Has sido de gran ayuda en mi investigación, me arrepiento de haber matado a tu versión de Underfell. Tenía que haberte dado otra oportunidad.-Esbozó una tenue sonrisa, no macabra como las anteriores, esta sonrisa tenía algo más profundo, algo que no sabrás identificar nunca.-Nos volveremos a ver, aún necesito más muestras-.Depósito un delicado beso en tu frente, se apartó un poco de ti para observarte una última vez y segundos después de admirarte en completo silencio las manos esqueléticas que usó para secuestrarte aparecieron alrededor de él agarrando su valiosa cámara; al instante de tenerla entre sus manos desapareció, dejándote completamente sola en aquella habitación.

Tu mirada fija en aquel techo blanco empezaba a fallar, todo lo que te rodeaba estaba desapareciendo en la oscuridad y solo un punto fijo, al que habías estado mirando desde que enfocaste la mirada, era lo único que lograbas ver. Tu cuerpo había perdido calor, tus mejillas ya no tenían ese hermoso color carmesí y tus ojos, tus ojos comenzaban a perder ese brillo especial que solo tú tenías.

¡****!

Una voz débil llamándote fue lo que te pareció oír.

Unas sombras, de seres a los que no reconocías, estaban a tu alrededor y sentías de manera pobre un contacto. Como si esas personas te agarraran.

¡Esto es demasiada sangre! ¡Necesita ayuda urgente!

Ayuda...Es lo que estabas suplicando constantemente, junto con las ganas de morir.

de alguien que la puede ayudar

Eso fue lo último que escuchaste antes de que te volvieras a sumergir en la oscuridad.

(...)

Está estabilizada, no tienes que seguir preocupándote.-Habló con voz tímida aquella mujer de cabellos rubios, sus ojos verdes eran cubiertos por unas gafas que la hacían ver adorable.

Muchas gracias Alphys, te debo una-.Un chico alto, de cabellos blancos al igual que su piel agradeció enormemente la ayuda de su amiga, había salvado la vida de la nueva guardiana.-Te llevaré mañana unos animes

No hace falta Sans, haría lo que fuera por ayudar a alguien-.Alphys, dejó una hoja en manos de su amigo, en donde estaba escrito los medicamentos que debía tomar **** junto con su forma de administrar-.Tengo que ver a Undyne, regresaré en un rato.-Se despidió de ambos acompañantes de la muchacha herida y salió de la habitación en silencio, no queriendo molestar a otros pacientes.

Menos mal que llegamos a tiempo-.Chara hizo su aparición al lado de su compañero y contemplo tu rostro, el cual por fin se encontraba relajado, como si nada hubiera pasado.-Tuviste una gran idea al traerla a este Au

Si, la Alphys humana era la más acertada para sanar ese tipo de heridas.-Cross dejó escapar un largo suspiro y se dejó caer en una de las sillas que poseía aquella habitación, tanto estrés le iba a matar.

Tienes mucho que explicar yo huesudo-.Sans introdujo sus manos en su pantalón mientras tomaba asiento al lado de Cross, no le agradaba en absoluto el ser fantasmal que acompañaba a esa versión de él, pero si quería saber lo que había pasado tendría que soportarlo.

Es una larga historia.-Cross frotó su nuca mientras desviaba su mirada hacia cualquier otro punto de la habitación, no quería mantener una mirada fija con su versión humana; le resultaba raro verse a si mismo con carne.

Tengo todo el tiempo del mundo amigo.-Sans se puso cómodo y de su bolsillo sacó una tableta de chocolate, ofreciendo un poco a su nuevo acompañante.-¿Quieres un poco de chocolate?

¿Chocolate? ¡Chocolate!.-El repentino grito de Chara interrumpió a ambos Sans y, como si de una bestia se tratase, se lanzó hacia su amada presa.

Guardian of my soul (Au's Sans x Lectora) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora