Finalmente InuYasha y su equipo de valientes marinos llegaron a la isla, una niebla cubría la isla, pero a medida que iban llegando, se disipaba muy lentamente. Al tocar tierra, InuYasha observa que la isla estaba desierta ¿sería cierto que estaba habitada?, vaya uno a saberlo ¿y si aquellos marinos estaban borrachos o estaban alucinando?.
InuYasha : Myoga, ¿Estas seguro que esta isla está habitada?, yo no veo a nadie-. Dijo con gesto de suma desconfianza y mirando la blanca arena de la isla.
Myoga : Si, mi gran señor. La leyenda de que aquí viven seres extraños es cierta, además usted mismo lo comprobó con esa misteriosa sirena, su rastro llega hasta aquí-. Dijo el anciano.
InuYasha volvió a observar y presentía que alguien lo observaba, se paró en la proa del barco ya detenido y dio una orden a Myoga.
InuYasha : Escucha, Myoga, prepara a 10 de mis hombres y que el resto se quede cuidando el barco. Los quiero a todos armados y con sus equipos de campamento aquí y enseguida, bajaremos a investigar-. Ordenó seriamente.
Myoga acató al orden y sin perder tiempo obedeció la orden de su joven amo y preparó a 10 hombres, todos armados con sus escopetas y pistolas listas para ser usadas, junto a todo su equipo de camping. Bajaron del barco y empezaron a caminar por la arenosa playa rodeada de verdes y gigantescos árboles junto a muchos arbustos con coloridas flores y plantas y en el mar había enormes rocas llenas de algas y huevecillos de caracoles marinos u otros seres del mar. El sol brillaba con intensidad y hacía bastante calor. InuYasha y su grupo de Marinos, hicieron su campamento muy cerca de la playa.
Uno de los marinos creyó ver algo en el agua y observó con sus binoculares y divisó la cabeza de una mujer en el agua... ¿sería una sirena?, asustado alertó a su comandante, este tomó sus binoculares y miró hacia el mar y no vio nada.
InuYasha : Oye, Hakaku, estas seguro que no bebiste antes de bajar del barco?-. Dijo con sarcasmo.
Hakaku : No, señor. Pero le juro, vi la cabeza de una mujer en el agua y luego se sumergió-. Balbuceó tímidamente y algo temeroso.
InuYasha : Deja de temblar, Hakaku, yo no recluté gallinas si no, marinos valiente. Si realmente viste a una mujer en el agua ya saldrá-. Dijo con desdén.
Hojo : ¿Y si no sale?, que tal si es otra de esas sirenas?-. Dijo
InuYasha : No te preocupes, Hojo. Si es otra de esas sirenas, la haremos morder el polvo. Nadie me intimida en mi viaje-. Dijo con alevosía.
Todos los marinos, aclamaron y hurraron a su comandante, pero uno de ellos, un joven forjador de espadas, llamado Koga Ryoma. Observaba hacia donde Hakaku indicó vio a la mujer esconderse en el agua, el fue al viaje tras enterarse de que su tío, fue afectado también en aquel viaje y con la aprobación de InuYasha fue. El también fue un valiente marino, pero decidió ejercer la profesión que dejó su difunto padre, la de forjar espadas y armas para marineros.
Koga : InuYasha, creo que tengo un mal presentimiento, que pasa si es esa sirena que nos atacó durante nuestro viaje-. Dijo cruzado de brazos frente a la orilla del mar.
InuYasha : No te preocupes, Koga. Ya te dije lo que le sucederá si nos ataca-. Dijo firmemente.
Mientras los marinos terminaban de armar su campamento, InuYasha salió a dar un paseo solo por la isla, observaba fascinado el hermoso campo verde lleno de grandes árboles y campos de flores, se acercó a un arbusto lleno de hermosos y blancos jazmines, su perfume era atrayente. Mientras el valiente príncipe de los mares admiraba ese hermoso campo de flores, una misteriosa mujer lo observaba y se sumergió cuando vio a InuYasha que estaba volteando hacia el mar, el joven príncipe sacó su pistola y apuntó en esa dirección, pero la mujer se había vuelto a esconder bajo el agua, pero no estaba sola, había otras 2 con ella, eran sirenas, que estaban espiando a los invasores que llegaron a la isla, debían avisarle a la princesa de las sirenas para que alerte a su padre sobre ellos.
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La isla de las sirenas ( InuXKag ) [Terminada]
Roman d'amourInuyasha Taisho un joven de 21 años busca la cura para la enfermedad para su padre que tiene una grave enfermedad, lo que hizo fue comer carne de sirena para obtener la juventud, pero fue una mentira para que el rey lo comiera. Kagome higurashi es u...