Capítulo 4

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  -¿Estas bien?- dijo con la voz de una madre preocupada, no sabia como sentirse, si agradecido o enfadado, una chica le había defendido pero esa chica casi ni sabia de el, simplemente asintió.

-¿Tu estas bien? Tienes sangre.

-Si tranquilo no es mía es del simio.

Oyeron el timbre sonar y se dirigieron hacia sus respectivos salones, en medio del camino el viento empezó a correr primero suave y luego cada vez mas rápido, de la nada su brazo ya no dolía y al segundo el viento se corto, miro extrañado a Aria, ella se encogió de hombros se disculpo y se dirigió al baño, seguramente a lavarse, no la vio mas hasta que una hora antes de irse me llamo el director. Al parecer unos chicos habían grabado todo y él lo había visto, llegando a la dirección se encontró a Scott sentado en las sillas de al lado de la puerta, con toda la cara morada por los evidentes dos fuertes golpes de Aria, pasó por su lado y entro. Allí la vio, sentada frente al escritorio del director con los brazos cruzados y bastante seria.

-Me alegro de que hayas llegado Alec, estaba aquí hablando con Aria sobre lo sucedido en el receso ¿Quisieras decirme tu parte de la historia?- se sentó al lado de ella y le contó lo sucedido.

-Bueno chicos como sus relatos coinciden con el video que me mostraron no los expulsare pero si deberé suspenderlos por una semana a cada uno, ya llame a su casa Sr Cure y su madre ya esta en camino y Srta. San Clair por su falta de padres o tutor encargue a la señorita Susan mi asistente de que se asegure de llegar a casa en cuanto tenga su bolso armado- "¿Aria no tiene padres? ¿Que rayos?", de la nada le entraron ganas de saber mas sobre aquella chica que había golpeado a un imbécil por el.

-Emm creo que mi mamá podría acercarla si a usted y a ella no le molesta- lo dijo sin siquiera pensarlo y para su sorpresa, el director y ella accedieron a su propuesta casi de inmediato.

-Esta bien pero eviten meterse en líos hasta que tu madre llegue- dijo y le guiño un ojo y ahí se dio cuenta de que no era tan anciano como parecía, era un hombre apaleado pero no anciano. Se dirigieron a la puerta en silencio y salieron. Primero lo acompaño a su salón a buscar sus cosas y luego las de ella; al ver que tomaba uno de sus libros se dio cuenta que tenia escrito en letras grandes y vistosas ZORRA en la parte trasera del mismo, ella le miro y luego al libro repetidamente, simplemente lo metió en su bolso, saludo al profesor y se dirigió hacia donde estaba el afuera del salón.

-Gracias por golpear a ese tipo, aunque no deberías haberlo hecho, pero aun así gracias y debes mostrarme esos golpes algún día.

-Tu me defendiste debía devolverte el favor y emm aprendí boxeo cuando era mas chica nada genial.

-Nada genial? Debes de estar bromeando golpeaste a un simio de dos metros y lo dejaste en el suelo creo que debería contratarte de guarda espaldas- en ese momento la miro y me pareció ver que le corría una lagrima, se giro totalmente y la miro, "¿Qué hice para que llorara?".

-Oye ¿Estas bien? ¿Dije algo malo o algo así?- levanto la cabeza y lo miro, tenia los ojos llorosos como si aguantara las lagrimas

-Si estoy bien tranquilo, ¿Tu madre se tardara mucho?

-¿Segura?- ella asintió e intento una sonrisa mientras se refregaba los ojos evitando que ninguna otra lagrima volviese a soltársele

-Sip muy segura, ¿en dónde esperamos a tu madre?- preguntó intentado cambiar de tema

- ¿Te parece el aquellos asientos?- dijo señalando los del parque en frente del colegio

-Buena idea, por cierto que ¿edad tienes?

-Tengo 18 y ¿tu?

-17- ella respondió sonriendo

Pasaron unos minutos y el auto su madre freno frente a ellos e hizo señas para que subieran, Alec acercándose a su madre le pregunto si podrían acercar a una amiga hasta su casa, la mujer asintió y él le hizo señas a Aria para que subiera en la parte trasera junto a él, ella con una sonrisa se acercó al auto y se subió en el.

-Hola ¿Qué tal? Soy Aria compañera de Alec, un gusto conocerla.

-Hola querida soy Clara Cure un placer en conocer a la chica que defendió a mi hijo.

-Eh si yo pues en realidad el me defendió a mí y yo solo le devolví el favor- dijo un poco sonrojada.

-Mamá deja de atormentarla ya ¿si? Un simio llamado Scott la insulto yo la defendí y terminamos en pelea y eso es todo, ah y el miércoles tengo que ir a recogerla a su casa pues tenemos tarea de Arte- dijo un poco molesto.

-Ok, ok entiendo solo les pido no se metan más en líos ¿sí?, ahora vamos a llevar a esta jovencita a su casa.

Luego de que Aria le indicara el camino arranco el auto y se marcharon, hablaron de todo un poco ya que la Sra. Cure era bastante charlatana, aunque no logro sacarle a Aria ni una palabra de su familia ni nada referido al pasado.

El Libro De Los ElementosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora