Nonins (Una noche que debe ser recordada.)

Capítulo 11

Al ver a Marianna en esa situación me hizo sentir indecisa e indefensa. Quería proteger a Marianna, pero no quería enfrentar a mi padre.

Ese sentimiento de debilidad se hacia presente en mi, lo que viene no sera algo bueno. Siempre que empezaba a sentirme sin salida y débil, llegaba la impotencia y el odio y eso despertaba ese lado de mi que tanto intento controlar. Mi otra naturaleza.

Voy a herir a alguien si no hago algo al respecto y puede que arruine el plan, los gritos de Marianna pidiendo que la soltaran, no son de ayuda. Mi padre cada vez estaba mas cerca.

- Owen! - el chico al que llamaba se encontraba a pocos pasos de mi, pero aun así grite su nombre. * necesito que te vallas y te lleves a Mike y Marianna, sigan con el plan*

*que vas a hacer?* el estaba parado a un lado mio, se le veía enojado y preocupado.

* voy a perder el control, lo estoy sintiendo y es muy probable que llame mucho la atención y aparezcan los asesinos*

*en ese caso te voy a detener*

*No te atrevas, debo ayudar a Marianna*

Caí de rodillas, ya estaba empezando, como siempre primero las risas siniestras.

Empezaba a pensar en cosas como, romperle los brazos a Dylan para que la soltara, lo cual en mi estado era divertido, tan solo el hecho de pensar en crear un caos y que alguien salga lastimado, me excitaba y me parecía la cosa mas emocionante del mundo y imaginar sus caras de sufrimiento era lo mejor que podía pasar.

- olleee, Iaann - después de las risas, venia la parte en la que los provocaba - te acuerdas de mi - el me miro perplejo. Intencionalmente lo había llamado como su hermano muerto.

- Que demonios acabas de decir? - su cara de desconcierto no podría verse mejor, por lo que empece a reír sin ningún pudor, ya se estaba enojando y su rostro lo delataba.

Mi padre cambio su mirada de Marianna hasta mi, como si acabara de ver al ser mas repulsivo de la tierra.

- ups - fingí inocencia y cubrí mis labios - Ian fue quien murió? - me tuve que tragar mi risa sin ningún disimulo - lo siento Dylan, pero es gracioso - le dirigí una mirada altanera - Mate a tu hermano de una manera tan sencilla. Lo mas divertido fue como te miraba, como si quisiera protegerte aun sabiendo que el era quien iba a morir.

- No te atrevas a hablar de mi hermano o le cortare el cuello a tu amiga - el si que sabia jugar, tenia un cuchillo en el cuello de Marianna, mientras tiraba de su cabello y esta no hacia mas que llorar - quien demonios eres?

- Todavía no sabes quien soy? - fingí sorpresa - me decepcionas primo.

- Lisset - pronuncio mi padre en un tono tan bajo que casi no logro escucharlo.

Mi progenitor tenia una cara de desconcierto que me dio la impresión de que el no quería creer que era yo, su hija.

- DIN! DIN! DIN! - grite fuerte y claro - tenemos un ganador!

- esto es imposible, tu estas muerta - el no podía creer lo que tenia frente a sus ojos - después de esa noche...

- Cállate, Franco! - lo mire con rabia - no te atrevas a mencionar nada de esa noche - y tu, déjala ir - señale a Marianna

- tu no mataste a mi hermano! - me miro serio - creo que estas confundida.

- si lo hice y si no quieres que también te mate a ti, mas te vale que la...

- Tu no lo mataste, eso es lo que todo el mundo quiere que crea, pero yo se lo que vi esa noche y no fuiste tu. - el se veía tan confiado que por un momento dude de lo que era real -y te lo advierto, antes de que puedas acercarte, la matare y luego te matare a ti y sus amigos las seguirán.