Señales | JeongMo

Cap. 2

Narra Jeongyeon

Otro año en este lugar, espero pase más rápido que el anterior, parecía eterno y aún más cuando no conocía prácticamente a nadie.

Me levanté para así arreglarme, caminé por el pasillo hasta el baño, pero al ver que mi hermana estaba a punto de entrar me ví obligada a detener el tiempo, corrí hacia ella, la aparte un poco para que no la golpeara con la puerta y cerré rápidamente con seguro. A base de escuchar gritos de mi hermana me duché.

Al salir simplemente la ignore hasta salir de casa, sabía que a ella no le gustaba usar su poder por lo que siempre me aprovechaba de ella, y eso que era mi hermana mayor.

–¿Has Hecho enojar otra vez a tu hermana?–una chica de cabello rojizo y sonrisa de conejo me esperaba en la entrada.

A su lado había por lo menos 5 maletas, yo apenas llevaba dos y en una hasta me sobraba espacio.

–Nayeon, ¿Vas a llevarte todo eso?–pregunté incrédula, y de alguna forma sabía que me vería obligada a llevarlo todo.

–No, solo me gusta llenar maletas–dijo de manera sarcástica mientras se arreglaba el cabello.

Mientras se ordenaba el cabello opté por comenzar a caminar, para así dejarla sola y que tuviera que llevar todo ella.

Pero mi plan fué destruido cuando ella alzó aquella vara y me hizo volver a donde estaba hacia un momento, es decir, enfrente de ella.

–Jeongyeon, recuerda que debes llevar las maletas–dijo regalándome una sonrisa llena de malicia.

Tras unos... 30 minutos logramos llegar hasta nuestra nueva residencia, al mismo tiempo venían tres chicas, una de cabello anaranjado y piel blanca como la nieve, inclusive más; una de cabello más corto incluso que el mío y oscuro; y una chica muy alta de cabello castaño y largo.

Al ver que ellas también iban a la puerta, Nayeon decidió presentarse a ellas.

–Deben de ser nuevas. Yo soy Im Nayeon, la reina–decía mientras se arreglaba el cabello.

–Llamenla solo Nayeon, o conejo–senti una mirada sobre mi, pero la ignore porque sabía que venía de ella– Mi nombre es Yoo Jeongyeon.

La tres dieron una reverencia antes de que la de cabello ondulado y anaranjado hablara.

–Yo soy Kim Dahyun

Después de ella rápidamente hablo la más alta.

–Zhou Tzuyu–me pareció un poco raro que ella lo dijera de manera tan fría, daba un poco de miedo inclusive.

Luego la última se estaba por presentar pero pudimos oír que la puerta se abría.

–Vaya, aquí están las que faltan–dijo una chica sonriendo amablemente– Yo soy Park Jisoo, pero me pueden llamar Jihyo.

Después de eso ella de ayudó con las maletas de Nayeon, la cual entró rápidamente a presentarse con las demás.

Cuando ya todas estábamos dentro y las maletas igual, la que nos abrió comenzó a hablar.

–Bueno, como algunas no se conocen por favor digan sus nombres – optó mientras las veía amablemente, parece ser que todas ya sabían su nombre, ya que fué la que abrió a todas.

Una a una nos íbamos presentando. Al parecer la de cabello corto se llamaba Chaeyoung, era la más baja de todas por lo cual me causó bastante ternura.

–Una cosa – en eso preguntó una chica de cabello castaño y flequillo, creo recordar que se llamaba Momo–¿Como dormiremos? ¿Compartiremos habitación?.

–Si, compartiremos todas Habitación, hay 5 habitaciones, todas dormirán en parejas menos una – comenzó a explicar mientras sacaba un bol con 19 papeles– cada papel tiene un número, cada número corresponde a una habitación, las que tengan el mismo número dormirán en la misma habitación, la que tenga un papel blanco dormirá sola.

Todas asentimos antes de sacar un papel cada una.

–Bueno, levanten la mano quienes tengan el primer papel –comenzó a decir Jihyo antes de que Mina y Tzuyu levantarán la mano, ambas se miraron en silencio antes de hacer una reverencia, supongo serían la habitación más tranquila.

–Yo tengo el número dos –dije mientras veía como aquella chica con flequillo levantaba la mano, al parecer ella también tenía ese número.

Al final todas las habitaciones fueron así:

-Mina y Tzuyu.

-Momo y Yo.

-Chaeyoung y Jihyo.

-Sana y Dahyun.

-Nayeon sola. Menuda suerte tenía la narcisista.

Después de eso solo nos encargamos de llevar nuestras maletas a la habitación y caminar al internado, pues ya comenzarían las clases (al ser el primer día comenzarían tarde y acabarían pronto).

Al parecer Momo estudiaría con Nayeon y conmigo, Eso me alegró, pues Nayeon no era muy buen ejemplo, ya que era mayor que yo, es decir, repetidora.

Las clases fueron tranquilas, todos nos presentamos y algunos profesores hacían juegos para así conocernos todos, otros por el contrario comenzaban a explicar de que iría su asignatura.

Continuará.