Mi Crush y Yo [27]

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Narra Jackson.

-Muy bien Jackson. Llevamos casi tres horas buscando a Clarice. ¿Por qué tenías que decirle eso? -dijo Abel muy enojado, aún caminando con la vista en todos lados.

-Lo siento, ya lo dije mil veces y sé que no bastara -dije triste y asustado porque no aparece, llamamos a la casa y dijeron que ahí no esta.

-Si, pero no respondiste el porque contestaste así -dijo Edwin sentándose en la orilla de los escalones de un edificio, Abel y yo lo imitamos.

-Yo lo hice pensando en que se lo tomaría con humor, caminé hacia ustedes y voltee lo más pronto posible pero ya no la vi, juro que jamás lo hice con intención de lastimarla -bajé la mirada triste.

-Está bien. Ahora, concentrémonos en encontrarla, podemos ir a los lugares donde probablemente fue. Hay una heladería, un restaurante, está el parque, el cine... -dijo Abel enumerando los lugares con sus dedos.

-Bien, podemos descartar el restaurante -dije algo obvio. No podría estar ahí, y en caso de, no hace mal dar un vistazo.

-¿Tienen batería en su celular? -preguntó Abel desbloqueando el suyo, inmediatamente lo imitamos -. Yo solo tengo el 23 por ciento.

-Yo tengo el 38 por ciento -dijo Edwin encogiéndose de hombros.

-Bien, yo tengo solo el 16 por ciento, esperemos sobreviva un buen rato -hablé mientras me levantaba de los escalones.

-Muy bien, pues hay que dividirnos. Cada quien tomará una calle, entrará a los lugares posibles a donde fue Clarice y preguntará por su paradero. Cualquier cosa -dijo Abel haciendo énfasis en la palabra cualquier-, nos texteamos.

-Inclusive podemos preguntar a las personas que están pasando por las calles -hizo una pausa Edwin pensando-, alguien pudo verla y tal vez hacia dónde se dirigió.

-Claro, podemos mostrarles una foto de ella, con el celular -dije obvio.

-Pero yo no tengo alguna foto de ella -dijo Abel con una expresión de confusión en su rostro.

-Estoy en las mismas -le siguió Edwin encogiéndose de hombros.

-Bueno, escriban sus números -extendí mi celular-, ahora mismo agrego sus números y les envío un par de fotos de ella.

Cada uno escribió su número de teléfono y de inmediato les mande las fotos de Clarice y mías.

-¡Ay! -chilló Edwin- ¡son tan adorables juntos!

-Ella es la que me hace adorable -sonreí moviendo levemente de un lado a otro mi cabeza recordando aquellos días juntos, siendo así, los mejores de mi vida-. Y podría sonar demasiado dulce pero la necesito. La necesidad de estar con ella me consume.

-Que romántico, los amo juntos -soltó Edwin agitando sus manos emocionado.

-Muy bien ¿y qué estamos esperando? -sonrió Abel y asentimos refiriéndonos para irnos.

Cada quien tomó su calle separándonos.

...

Es la 1:38 de la mañana y lo único que tenemos es que una pareja de ancianos la vio con un chico con un perro "parecido a un lobo". Preguntamos si no saben algo más y contestaron que no, pero nos dijeron en la dirección que se fueron. Eso fue hace más de media hora y ya casi por completo recorremos la calle preguntando a los dueños de las casas si saben su paradero. Aquellos señores me hicieron pensar que el resto de mi vida la quiero pasar a lado de Clarice y ahora me siento más triste. Clarice, te amo y siempre te amaré, sea donde sea que te encuentres.

-Hola, qué tal -dije a un muchacho medio dormido parado en la puerta.

-No quiero comprar lo que vendas, gracias -apunto de cerrar la puerta, metí mi codo y él la abrió.

-No, no vengo a ofrecerte algo. Quiero saber si de casualidad no viste pasar a está chica -le extendí mi celular con la foto de Clarice y mía.

-Oh, claro. La vi sentada en una de las bancas de el parque y charlamos, luego la invite a pasar el rato aquí, acepto y después me pregunto si podía quedarse aquí a dormir y dudoso acepte -cuando termino de hablar tenía tenía unas inmensas ganas de golpearlo porque es decir ¿a qué persona en este mundo se le ocurre invitar a alguien a su casa cuando se conocieron en una hora? Y peor aún, ¿a quien aceptar su propuesta? Estoy enojado con Clarice pero eso no interesa por ahora.

-Jack, tranquilízate -dijeron al par Abel y Edwin al ver que me tense.

-Perdonen, en fin. ¿Puedes devolverme a mi chica?

-Claro, pasen -nos dirigimos a lo que parece su sala-. Así que ¿tú eres el idiota del que ella me habló? -asentí-. ¿Cómo pudiste hacerle algo así a una chica como ella?

-Solo quería hacerla reír y... -me interrumpió.

-¡Mierda mierda mierda! -gritó asustado y comenzó a recorrer la habitación con una expresión de tensión.

-¡Habla que me pones nervioso! -le grite. Gruñó.

-Es una historia larga que les resumiré. Conmigo vive un amigo que tiene demasiados problemas en casa, con su familia, en fin. Ayer cuando Clarice vino llegó un rato después Dylan y la miro con demasiado interés. Él venía un poco borracho, seguramente escucho el sonido de la puerta cuando tocaron hace unos minutos y aprovechó el momento para llevársela. Él en su cuarto tiene "escondida" -hizo comillas- droga y no sé cuántas cosas más, hay probabilidad de que las haya usado con ella aprovechándolas.

Bien, cuando aquel muchacho termino quería golpearlo. Pero aún, quería matar al desgraciado que se llevó a mi chica. Es decir, ¿quien es él realmente y por qué tanto interés en Clarice? ¿Por que se la llevó? ¿Y hacia dónde se dirigen?

Hola papitas, sé que ya había publicado este capítulo pero lo modifique un poco, solo el final como verán, lo siento pero es que tengo mejor futuro con esta actualización.

Y quería saber ¿cómo están mis papitas mexicanas? Yo igual soy de aquí, la CDMX, pero aquí donde vivo está más calmado que en el centro de la ciudad.
Y bueno, me queda decir que lo de menos fue la cancelación de el concierto de Shawn, me preocupa mi ciudad y saber cómo están si son de aquí y que nos recuperemos pronto.

Cuídense y que la suerte los acompañe, los ama Carla.

Mi Crush y Yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora