Secretario personal (Nightangel Yaoi)

21.

Estaba feliz ahora.

Esperaba no arruinar nada con Kurt ahora que todo comenzaba a salir mejor.

Sólo deseaba que nos diera una oportunidad y accedió.

Charles entro a mi oficina en la tarde y se veía un poco preocupado.

-algunos de los empleados están inquietos, sabes que Carter, Thompson y Thomas quieren un informe financiero de todo ¿No?

-estoy enterado, no sé qué están planeando, pero por ahora sólo denles lo que piden, no tenemos nada que esconder a los accionistas de los proyectos, así que diles a quienes anden preocupados, que estén tranquilos- Charles sonrió y luego se sentó frente a mí.

-así que sales con Kurt... debo decir, amigo mío, que era bastante obvio el interés que tenías por él- me miro con una gran sonrisa.

-no mucho, por lo visto para él no fue muy evidente- me encogí de hombros peinando mis cabellos hacia atrás- aunque ahora no importa, accedió a darme una oportunidad que no pienso desaprovechar.

Él sonrió negando un poco- debería decirle al departamento de prensa que comience a hacer preparativos para quitarte de la lista de solteros codiciados, si tenemos suerte, para siempre.

Reí un poco y él se fue del lugar dejándome con mis pensamientos, debería llamar a mi asesor de imagen para buscar el traje perfecto, también necesitaba uno para Kurt, ambos combinados, sería una hermosura, aunque primero debo organizar lo que diremos, de qué manera, necesito a mi asesor de prensa.

Comencé a llamar a todos lados y en menos de media hora tenía a dos mujeres frente a mí.

-bien, Kitty, necesito que le entregues una copia del discurso a Kurt, no debes comentar con nadie que el asistirá y será una sorpresa cuando entremos al estudio- la chica asintió- Ororo, necesito que busques traje que combinen para ambos, apenas Kurt ingrese le tomaras las medidas y buscaras ambos.

La puerta fue abierta y mi, ahora, novio entro al lugar.

-¿me mando a llamar, señor?- pregunto con esa hermosa voz que tenía.

-sí, ella es Katherine Anne Pryde, mi asesora, bueno, nuestra asesora de prensa- la chica asintió y le entrego unos papeles- ella es Ororo Iqadi Munroe, nuestra asesora de imagen, ambas nos ayudaran para la presentación de hoy, además, de ahora en adelante, hablaran contigo cada vez que debas aparecer en algún evento público o entrevista.

Kurt asintió y las chicas comenzaron a prepararle, Kurt les sonreía mientras comenzaba a leer las declaraciones que daríamos en la noche.

No fue mucho de mi agrado el hecho de que fuese en un programa de espectáculos donde presentara a Kurt, pero era el programa que más problemas me causaba, y muchos más a la empresa, así que Kitty pensó que era lo mejor.

Las horas pasaron lentamente y al fin solo quedaban minutos para entrar al estudio.

-estoy un poco nervioso...- me susurro Kurt a mi lado, tome una de sus manos y deje un suave beso en ella.

-estoy contigo, todo estará bien- sonreí y fue nuestro turno de entrar.

-¡Damas y caballeros! Warren Worthington- se escuchó un aplauso y la cara de sorpresa de todos cuando entre de la mano con Kurt fue épica.

Saludamos a los panelistas y me senté en un sofá con Kurt a mi lado que aún se encontraba nervioso.

-bien, Warren, preséntanos al joven que te acompaña hoy- una rubia me sonrió mirando a Kurt.

-bueno, una de las razones que me trajo hoy aquí, es para presentar a mi amado novio- le hice un gesto para que hablara.

-buenas noches, mi nombre es Kurt Wagner y amo mucho a Warren- sonríe apoyándose en mi- lo mejor que me ha pasado en la vida- besa mi mejilla mientras yo tomo su mano con la mía para jugar con sus dedos.

Todos hicieron una expresión de ternura, aunque uno de los panelistas, que no dejaba de mirar a Kurt, interrumpió el ambiente.

-entonces, si ambos tienen tanto amor para darse ¿Qué nos dicen de eso?- la imagen de Kurt dándome una cachetada apareció en pantalla y el chico a mi lado me miro para luego bajar la mirada- ¿algo que decir?

-sí, debo decir algo- Kurt tomo mi mano y me sonrió- esa noche, me moleste porque Warren dijo que había una chica que conocía- sonríe- me moleste cuando dijo que iría a verla y me ignoro por ella- beso mi mano- fue solo un estúpido arranque de celos que ya arreglamos.

-así es, ambos hablamos de ello y Kurt sabe que solo tengo ojos para el... por eso, cualquiera que sea quien este frente a mí, yo no tendré dudas en escogerlo a él.

Luego de eso, nos preguntaron dónde nos conocimos y esas cosas, hablamos de algunas cosas al azar e incluso, luego de preguntarle a Kurt si era doncel, nos preguntaron si pensábamos tener hijos.

La noche salió bien, aunque fue bastante cansador, resulto bien.

Apenas salimos del estudio, Kurt comenzó a mirar su teléfono con una mueca de preocupación.

-¿todo bien?- pregunte sin soltar su mano, aprovechando aun que debíamos conservar las apariencias.

-si... solo... estoy viendo algo- sonríe soltando mi mano para responder con una sonrisa.

-oye... ¿tienes hambre? Vamos a cenar... tengo una reservación en un restaurante y- el me interrumpió antes de que pudiese seguir hablando.

-gracias, pero había hecho planes...- rasca su nuca un poco incómodo- quizás quieras ir con nosotros, aunque no creo que te agrade mucho...

El hace una mueca y entendí de inmediato a que se debía.

-no, quiero ir- le sonreí caminando a su lado hasta mi vehículo.

Íbamos en silencio, sin siquiera mirarnos, Kurt me indico el lugar y mis manos se apretaban a medida que nos acercábamos.

-¿estás seguro de querer ir?- pregunto con una pequeña sonrisa.

-claro que sí, debo conocer a los amigos de mi novio- sonreí mirándole, aunque estaba más molesto que nunca.

-si estas tan molesto no deberías ir- hablo cruzando sus brazos- además no quiero que trates mal a mi amigo, es importante para mí, más de lo que cualquiera lo es.

Detuve el auto y me volteé para tomar sus labios en un apasionado beso.

-lo hare por ti...- susurro sobre sus labios para luego retomar la marcha.

Minutos después, bajamos y vi una estela plateada derribar a Kurt.

- ¡¿Cómo es posible que salgas con un hombre guapo y no me hayas dicho?!- el chico se volteo para mirarme y yo puse la mejor sonrisa que pude.

-buenas noches...- y en ese momento comenzó el calvario...