Warren
A la distancia se podían distinguir claramente los gritos del rubio moviéndose en su celda de un lado a otro.
-¡sáquenme de esta mierda!- grito cuando ya no pudo mas, llevaba tres días en aquel lugar alejado de todo contacto con el exterior.
No había visto a nadie, no tenia derecho a visitas era lo que le habían dicho, y aquello solo le desesperaba mas.
Los guardias se reían al pasar por su celda, burlándose de su situación. Si bien, se encontraba en una cárcel exclusiva para personas con nivel económico alto, eso no impedía que le gritaran cosas.
"¿Donde quedo el millonario fanfarrón de antes?" "aquí sabrás lo que es trabajo, princesa" "ahora que no estas disponible ¿podemos quedarnos con tu noviecito?" "cuando venga tu chico voy a tocarle ese culo de los dioses" "cuando se rinda, dile que aquí tiene hombres que si saben cumplir"
Y como esas, muchas cosas mas le decían...
Pero lo que mas le dolía, y estaba seguro de que era así, era que lo había perdido... había dejado ir al hombre de sus sueños...
Paso cerca de una semana para que pudiera recibir una visita, su padre llego aquel día junto a Azazel, su abogado, mientras que el aun había conservado la esperanza de ver a Kurt.
-¡Me estas jodiendo!- grito luego de que Azazel le contara que sucedía- ¿es una maldita broma? ¡soy inocente!
-Lo sabemos, Warren, pero Carter hizo todo para que pareciera que el único responsable de la perdida de fondos y de las malas declaraciones de impuestos fuese tu culpa- hablo calmado el tipo rojo.
-no puede ser... no he firmado nada que no lea antes, siempre reviso las declaraciones antes de firmarlas- habla sosteniendo su rostro- ¿y cuanto tiempo quieren darme?- pregunta aun con las manos en su rostro.
Ambos hombres frente a el se miraron y su padre asintió- de 10 años hasta 25, hijo...- hablo y el rubio le miro incrédulo.
-debe ser una jodida broma...- habla fastidiado.
Los tres se quedaron en silencio, sin querer decir algo para no crear mas caos... Warren miraba sus manos inquieto.
-y...- debía preguntarlo, necesitaba hacerlo- y ¿como esta-?
Su padre le interrumpió antes de que terminara la frase.
-no te hagas esto, hijo...- Warren le miro y el hombre negó lentamente con la cabeza- ahora debemos ver como sacarte de aquí.
Warren asintió con una mueca... claro que no iba a quedarse.
Hablaron de lo que pasaría durante la siguiente semana, se había presentado un recurso de protección para al menos, que pudiese cumplir sentencia en casa, pero nada había resultado. Alguien con bastante poder estaba interfiriendo en el juicio.
Los días pasaban y la soledad comenzaba a pesarle.
Lentamente, había comenzado a crear una rutina en aquel lugar, salia al patio, iba a la biblioteca, se ejercitaba, luego volvía a la celda, había comenzado a pintar en un taller, jugaba ajedrez con otros reos, a veces solo hablaba con ellos... al menos dentro no era tan violento como había visto en la televisión.
Pero cuando la noche llegaba, cuando se encontraba en su cama, a solas con sus pensamientos... no podía evitar pensar en Kurt.
Esperaba el chico fuese feliz... lo merecía, pero dolía... recordaba su rostro cuando le habían ido a buscar, podía ver claramente la decepción en su rostro...
Intentaba no pensar en el, pero luego notaba que en el lienzo que estaba usando, había una nube azul...
Lo extrañaba... pensaba en el cada día... algunas veces con ganas de llorar, otras con una sonrisa.
Estuvo cerca de un mes en aquel lugar sin obtener resultados. Lo único que le había contentado era que los accionistas estaba apoyandole, en su mayoría, y que habían decidido mantener la empresa con los mismos trabajadores que siempre han estado.
Pero la desesperación era evidente, quería salir, volver a su hogar, ver a sus compañeros de trabajo, ver a Kurt...
Estaba en el gimnasio esa tarde, un saco de arena era lo que estaba sufriendo todas sus descargas de ira, golpeando, uno tras otro... cuando recibió un llamado, tenia visita.
Era extraño porque su padre venia cada cierto tiempo a verle y era en la misma hora, pero aquello le pareció muy sospechoso.
La esperanza surgió en el cuando le dijeron que era un chico joven, quiso correr a ver si era el.
Camino con el corazón en la mano... hasta que lo vio.
Con una sonrisa burlona le miraba desde su lugar, le saludo con la mano y el rubio tuvo intenciones de irse, pero la voz del chico le detuvo.
-traigo noticias que pueden interesarte- hablo de manero burlona.
De mala gana, camino hacia el para sentarse frente a frente, tenia tantas ganas de estrellar su rostro contra la mesa y borrar la maldita sonrisa que tenia el castaño en su rostro.
-Escucha, Remy, si vienes aquí a burlarte de mi, juro que romperé cada uno- un papel le fue entregado y su pequeño discurso se detuvo de inmediato.
-me pidió que te entregara esto- hablo mirándole- y eso es todo lo que debo decirte...
Warren tomo la hoja pulcramente doblada en sus manos.
-Nos vamos a Francia en unos días- hablo Remy para levantarse e irse- te enviare algunos cigarrillos para que la espera dentro de este lugar no sea tanta.
Sin mas, se fue dejandole ahí...
Con cuidado abrió la hoja y pudo identificar aquella pulcra letra de inmediato.
"Lo siento,
Se que debería hacer esto en persona, pero mi corazón no lo permite... lo mejor es estar alejados, lo sabes y lo se, por ello, seguiré mi camino mientras tu sigues el tuyo...Nunca olvidare los momentos en las que estuvimos juntos... pero estoy tomando esta decisión por los dos.
Lo siento, de verdad lo hago...
Siempre tuyo, Kurt W."
Quiso romper aquella carta en miles de pedazos, hacerla trizas y traer a Kurt para que le diera una explicación... pero no podría hacerlo.
Bien sabia el, que aquello era lo mejor para ambos, lo tenia claro, pero su lado egoísta no le permitía dejarle ir.
Aquel día estuvo recostado sin hablar con nadie... leyendo y releyendo aquel papel... intentando aceptar lo que sucedía
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Gracias por la espera, ire subiendo apenas pueda, asi que no dejare la historia, ahora no tengo mucho tiempo, espero les guste!!!
Saludos!!
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Secretario personal (Nightangel Yaoi)
FanfictionKurt Wagner era un chico muy culto en busca de un buen empleo, cuando su amigo Peter le informa que en las empresas W.W. están en busca de un secretario ejecutivo, no duda en ir a presentarse a la entrevista. Su jefe, hará de su vida tanto un infier...