13.

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Narra Warren

Cuando le vi por primera vez no estaba muy feliz que digamos, prefería una secretaria, si, me gustaba la idea de ver a una chica linda en la mañana cuando llegaba, aunque la mañana para mi era cerca de medio día, pero para mi sorpresa, el chico se veía muy bien de cerca. 

¿bien? no, aquello no era suficiente para definir lo bello que era el chico. Tenia unas caderas de ensueño, unos lindos labios, una melodiosa voz, unos bellos ojos y aquellos pequeños colmillos que asomaban por los costados de sus labios eran mas tiernos que cualquier cosa que antes hubiese visto.

Nunca me había sentido tan atraído por alguien, claro, había tenido muchas parejas anteriores, y sabia apreciar la belleza cuando la veía, pero nunca había estado tan atraído por una persona, menos aun por un chico, sin duda Kurt era una belleza. 

Esa vez que le vi temblar cuando alzaba la voz, fue un deleite para mi, era tan tierno, podía tener 20, 30 años, pero eso no significaba que fuese menos tierno. 

Me sorprendió bastante saber que tenia el contacto de Loki, por lo poco que sabia hasta aquel momento, el no tenia relación alguna con ese tipo de personas, pero me encantaba saber que podía contar con el para lo que fuese ademas era lo bastante eficiente para realizar cualquier trabajo que le pidiera, sin duda era perfecto. 

-creo que me gusta...- dije frente a los chicos mientras soltaba un gran suspiro, la gran risa de Alex se hizo escuchar en el lugar. 

-¿crees? Warren, amigo, te conozco desde pequeños, he visto como trataste a todas tus secretarias anteriores y es la primera vez que te veo tratar a una secretaria de esa manera, por lo general, estarías gritando y lanzando algunas cosas- Erik a su lado asintió confirmando lo dicho por Alex.

-ademas, si no te gustara, ¿por que sales con el a todas las citas? te recuerdo que no lo hacías con ninguna secretaria anterior, ademas ten en cuenta de que hasta la fecha, no ha llegado ninguna queja de tu comportamiento- Alex le miro y asintió. 

-¿debería invitarle a salir?- hable cubriendo mi rostro con mi brazo, a lo cual ambos respondieron con un firme si, a lo cual invente una rápida excusa para poder salir con el. 

Agradecía la ayuda de ambos, porque esa noche pude tocar los bellos labios de Kurt... fue como probar el mismo cielo. Lo malo, es que corrió apenas comenzaba a ponerse bueno. 

Luego de aquella prueba, no iba a dejarle en paz, claro que no, ese "amigo" suyo no me iba a quitar una oportunidad de estar junto a Kurt. 

La noche que bebió fue perfecto, no dejo de hablar de lo guapo que me encontraba y que de ser una mujer, no dudaría en coquetearme, ademas de no dejar de decir una y otra vez la suerte que tenia al ser guapo, mientras que a el, nadie se le acercaba por su color de piel.

Cuando estuvo mas bebido, me confeso que era un doncel, algo perfecto a mi parecer, me hablo de que el podría seducirme si lo quisiera y que yo no sabría quien me había golpeado una vez que pasara. 

Cuando estuvo aun mas ebrio, comenzó a cantar e hizo algo que nunca espere, se sentó en mi regazo para comenzar a moverse de manera insinuadora, comenzó a besarme de manera apasionada que estoy seguro nunca hubiese hecho antes y sobrio, pero eso no fue malo, lo malo, fue que luego del beso se durmiera sobre mi. 

A pesar de que podía dejarle en la habitación de invitados o algo por el estilo, decidí recostarlo en mi cama, le quite lentamente la ropa y le acomode en mi cama, para luego pegar mi cuerpo al suyo.

Kurt era increiblemente cálido y cómodo, nunca había tenido la dicha de estar así con él y ahora que lo conocía, no quería dejarle ir. 

Habia mandado a comprar un traje a medida para el, y cuando se lo puso, fue simplemente perfecto. Era un ángel, de ello no había duda. 

Ademas, me había molestado un poco al saber que Stark conocía sus medidas, por lo que no dude en averiguar todo acerca de él. 

Sus hobbies, rutina, empleos anteriores, fue ahi que me entere, para mi desgracia, de Remy Etienne LeBeau, su ex. 

Por lo que luego de todo el drama que se armo por culpa de Carter, decidi tomar una buena decision. 

-te quiero proponer un trato- le mire con una sonrisa.

Sabia que el dinero no era algo con lo cual lograria convencerle. De lo poco que conocia, sabia que Kurt no era esa clase de personas que cuando ve dinero se lanza de inmediato para ver que es lo que puede conseguir de ello. 

Cuando le pregunte a Alex y a Erik, lo mejor que pudieron decirme, fue que le dijera que la empresa estaba teniendo problemas por ello. Sabia, por como habia visto que se comportaba, que Kurt no me dejaria sufrir en desgracia, ademas, tenia la excusa para poder tocarle todo lo que quisiera. Algo simplemente perfecto. 

La reunion con Stark fue algo aun mejor, la verdad podria haberla programado para la semana siguiente, Stark tenia negocios que atender en la ciudad y nos podriamos reunir en algun lugar, pero no iba a perder la oportunidad de estar un fin de semana de vacaciones con Kurt.

Le conte a Tony acerca de lo que queria hacer y el solo sonrio apoyandome en todo lo que quisiera. La habitación para ambos fue lo mejor de todo. 

Esa noche, luego de que Kurt se durmiera, me acerque a el para atraerle a mis brazos. 

Estaba dormido como si fuese un pequeño angel, apenas se movia, pero soltaba algunos hermosos suspiros a veces. 

Comence a dejar algunos pequeños besos en su piel y luego lleve mi mano a su cintura para dejar algunas caricias en ella. Los suspiros de su parte aumentaron y tuve la necesidad de aliviarme en el baño luego de eso. 

Sin duda iba a disfrutar cada segundo en Malibu. 

Secretario personal (Nightangel Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora