Secuestro {Rubius Y Tu}

✖ CAPÍTULO 16✖

Dedicado a: rodvee

Me desperté en la cama tapada por una manta y no me desperté por lo típico de los rayos del sol, si no de un escalofrío que sentí en mi espalda.

Me senté en la cama y me froté los ojos para despejarme un poco. Me incorporé y me dirigí al armario, saqué unos pantalones largos negros y una sudadera blanca sin capucha bastante bonita y simple. También había ropa interior de encaje, elegí uno de ellos y cogí las deportivas blancas de Reebok que ya me dió Rubén días antes.

Lo cogí todo y me fui al baño,me quite una camiseta que llevaba de pijama y prendí el grifo del agua caliente de la bañera. Cuando ya estaba lo suficiente llena me sumergí en ella y mi cuerpo dio gracias por entrar en calor.

Estuve unos 15 minutos metida en la bañera sin pensar en nada. No quería llegar a conclusiones precipitadas de si me matarían o no. Recordaba que Rubén de pequeño era un cielo,cuando quería. Pero ahora era un hombre frío sin escrúpulos, es más, yo creo que ha matado a alguien durante este tiempo.

Salí de la bañera y mi cabeza se revolcó en los recuerdos que tenía con Nerea,mis grandiosos momentos de risas, lloros y ayudas. La idea de no volverla a ver nunca más me mataba poco a poco por dentro.

Me sequé el cuerpo con una toalla blanca y el pelo me lo cogí con otra toalla blanca. Me eche crema para el cuerpo que encontré de pura casualidad y me vestí con la ropa que saqué del armario. Sequé mi pelo con la toalla,pues no había secador,me dirigí otra vez a la cama, la hice y mire el reloj digital que se encontraba en la mesita de la derecha de la cama. Marcaba las 9:45.

Cuando tenía más o menos ordenada la habitación, salí al pasillo y me dirigí al cuarto de mis amigas. Toqué a la puerta pero nadie respondía. Abrí la puerta y no había nadie.

- ¿Buscas a alguien?- me dijo alguien rozando mi hombro. Por mi parte pegué un chillido y un salto por no esperar a nadie detrás de mí. Me giré y vi al asesino hijo de mil llenas.

-Tutututu...¡tú fuiste el que la mató sin hacer nada!- se trataba del grandioso Samuel llamado Vegetta.

Por su parte soltó una risita y yo le respondí:

-A mí no me hace ni puta gracia que acabases con su vida sin haber hecho absolutamente NADA- dije acentuando la última palabra, la ira se estaba apoderando poco a poco de mí.

El payaso se paró de reír y se dio la vuelta dándome la espalda.

-Fue sin querer,el gatillo se disparo solo- dijo con tono de burla, que ganas me dieron de tírame encima de él y partirle el cuello y después decirle que fue un acto reflejo - por cierto,si quieres comer algo están desayunando abajo- termino de decir para andar por el pasillo y adentrarse en otra habitación.

- Pero el gilipollas este ¿De que va? - dije en voz baja.

Miré a las escaleras y mi estómago retumbó al recordar las palabras del payaso "abajo hay comida" JAJAJAJA que hambre joder. Bajé corriendo las escaleras y paré al verlos sentados a todo el grupo junto a mis amigas desayunando, faltaba Samuel álias el payaso.

-Buenos días - dije algo tímida

-Buenos días - dijeron todos mirandome divertidos.

-Pasa a la cocina y coge lo que quieras - me dijo Rubén amablemente.

-¡Meno' lo' bollo'! ¡Son mío! - gritó gracioso Mangel al cual todos respondimos con una risa.

[10 min.]

De vuelta estaba sentada en la cama de lo que era mi nueva habitación. Estaba esperando alguna orden de parte de Rubén o de sus amigos, no podía hacer nada por ahora.

De un momento a otro Rubén entró a la habitación y cerró la puerta detrás de él. Venía con miedo, ¿que le pasará?.

-¿Hay algún problema Rubén? - pregunté un poco inquietada.

- No para nada- dijo mirándome a los ojos y acercándose hacia mi posición.

Yo seguía sentada en la cama y él me dio la mano para levantarme de mi sitio. Pasó su brazo por mi cintura impidiendo mi escapatoria y sentí algo frío en mi cintura.

El me miró con los ojos encharcados en lágrimas y dijo:

-_____, vas ha salir de esta, confía en mí- terminó para darme un beso.

En ese momento sentí algo clavándose en mi costado, intenté gritar pero él seguía pegado a mis labios. Mire de reojo a mi costado para ver qué había pasado.

Tenía una navaja clavada en mi costado. Lágrimas de dolor salían por mis ojos. Rubén sacó la navaja haciendo muchísimo daño y me dejó tendida en el suelo.

Mi vista se empezaba a nublar y comencé a cerrar los ojos.

Alguien empezó a pegar golpes a la puerta de mi habitación y entró de golpe.

-¿Los ves? Está muerta,la maté está mañana- dijo Rubén con la voz temblorosa.

-Asegúrate,métele los dedos en la herida y si hace alguna mueca le pego un tiro -dijo el otro hombre misterioso.

"Momento de no moverse aunque duela como 1000 demonios "

Noté como Rubén se inclinaba hacia y posaba una de sus manos en mi cintura no herida y con su otra mano metía dos dedos en la herida.

En verdad no notaba nada,solo unos pinchazos leves,eso significa que no me tocó fondo la navaja gracias a Dios.

- Te vuelvo a repetir que está muerta- dijo Rubén un poco mas convencido y más serio al ver que no me había movido.

- Vale, se lo comentaré a Lanita que ya está muerta- dijo el hombre.

- Puta coneja - pensaba mi mente.

- Por cierto, dígale a Lanita que quiero hablar con ella, cogeme cita o lo que mierda sea eso- dijo Rubén muy seguro de sus palabras.

- Yo se lo diré, ella contactará contigo para hablar- terminó de hablar para salir por la puerta.

Rubén cerró la puerta y se dirigió corriendo hacia mi, miró mi pulso y se dirigió a dar golpes a la pared donde estaban mis amigas. Esto estaba planeado,ahora entendía todo,el no me quería matar y se jugó su vida haciendo este show para salvarme.

Mi vista terminó por nublarse del todo y antes de desmayarme escuché hablar a Rubén.

-Sigues siendo una chica dura; vamos a salir todos de aquí en cuestión de días. Estas en mis manos _____,te quiero- dijo para romper en llanto y levantándome la cabeza para besarme.

Yo ya no sentía nada.

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Nuevo capítulo el sábado por la noche ( hora española ) o el lunes. ✨

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