Barrotes.

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- No sea estúpido. Antes de que pueda si quiera apretar ese gatillo, le habré saltado encima y tal vez yo si me atreva a agarrar el arma y pegarle un tiro entre las cejas, Stilinski - Espetó Theo acercándose a él- Baje el arma. ¡Ahora!

- No des un paso más, niñato - Respondió el Sr. Stilinski sosteniendo firmemente el arma-.

- ¿Que mas quiere? Ya le he contado todo, le he dicho la verdad ¿Por que todo el mundo me toca las putas pelotas? - Murmuré apretando los puños - Adelante, dispare. Cualquier cosa es mejor que esto, acabe ya conmigo. O mejor, llame ya a los Argent, si. Y que me maten. Total, seguro que así me quedo tranquilo de una vez.

Theo me miró alzando una ceja y negó con la cabeza.

- No sabes lo que dices, Liam. Escuche, Stilinski, deje que se marche, se lo estoy pidiendo bien. Hable con su hijo, dígale que no vuelvan a acercarse a él, y no volverá a repetirse algo así, de lo contrario, yo mismo me encargaré de poner paz.

- ¿Alguien cómo tu poner paz? - Pregunté rodando los ojos- Vamos, dispare, estoy listo. No se crea nada de lo que él le diga. Usted dispare.

- ¿¡Podéis hacer el favor de callaros!? ¡Los dos! - Gritó el hombre llevándose las manos a la cabeza -. 

Ahí fue cuando Theo aprovechó para agarrarlo y golpearle la cabeza contra lo barrotes.

- ¿¡Lo has matado?! - Grité comenzando a dar vueltas por la celda -.

- Sólo está dormido. Tenía sueño. Será mejor que nos vayamos. 

Me detuve de repente a mirarlo mal. 

- Sólo dame un momento, que te ayude a salir de aquí.

Pude ver como Theo agarraba los barrotes y sin despeinarse los doblaba lo suficiente como para que yo pudiera salir.

- Vamos, sal.

Negué con la cabeza mirándolo.

- No pienso moverme de aquí, prefiero morirme, antes que ir contigo.

- Si entro ahí, vas a salir al momento.

- ¿Ah si? ¿Y como piensas sacarme?

- Por las buenas, o por las malas - Murmuró Theo alzando las cejas y colándose en la celda-.

- No te acerques a mí - Espeté apartándome -.

Pero cuando quise darme cuenta, ya me tenía agarrado. Forcejeé con el unos segundos, en los que el se reía, hasta que me agarró fuertemente y me inmovilizó contra la pared.

- Vas a salir de aquí ¿Queda claro? - Murmuró apretándome contra la pared con fuerza, mientras sujetaba mis manos con una de sus manos, y con la otra me apretaba la cabeza contra esta- Y después de eso, vas a hacer todo lo que yo te diga, y vas a ser amable conmigo, puesto que estoy aquí salvándote la vida. ¿Entendido? 

Me quedé en silencio. No iba a responder.

- ¿Estás sordo? - Susurró cerca de mi oído-.

- ¿Puedes parar? - Susurré apretando los ojos- Por favor, me estás haciendo daño. 

- ¿Has entendido lo que te he dicho?

- No, no he entendido nada ¿Puedes soltarme?

Theo se rió al escucharme y me volteó.

- Mírame bien, Liam. Tenemos poco tiempo, los Argent deben estar viniendo, si te quedas aquí van a culparte a ti de lo de Stilinski, y no me apetece tener que salvarte de los Argent, así que mueve ese culito que tienes, y sal de la puta celda.

- ¿O que? 

- ¿O que, que? - Preguntó Theo confundido-.

- Esta vez te has dejado la típica amenaza al terminar la frase.

- Es la forma de pedirte bien las cosas. Sal de aquí, por favor. 

Alcé una ceja al ver que poco a poco dejaba de hacer fuerza y me permitía moverme. Y comencé a caminar hacia los barrotes, seguido de él. Salí de la celda, y cuando él salió, cogió una silla y la lanzó por una de las ventanas.

- ¿No esperarás salir por la puerta no? - Preguntó al ver mi cara - He podido colarme, pero no estoy seguro de que podamos salir de aquí sin llamar la atención si tu vienes, recuerda que todos saben que estás aquí en la celda. Adelante, sal, te ayudo.

Lo miré mal mientras negaba con la cabeza y tras dar un salto, me colé por la ventana yo sólo. Theo no tardó en salir.

- Vamos, tengo el coche a la vuelta de la esquina.

- Ves, yo vuelvo a casa - Murmuré caminando en sentido contrario al que lo hacía él.

Un fuerte tirón me hizo cambiar de sentido al momento. Comenzó a arrastrarme.

- ¿Cual crees que va a ser el primer lugar donde vayan a buscarte idiota? 

Lo observé mientras me arrastraba por la calle. Odiaba que tuviera razón.

- ¿Puedes simplemente soltarme? - Pregunté de la forma más amable que pude- Se caminar.

Theo dejó de arrastrarme, pero me mantuvo agarrado hasta que llegamos al coche. Una vez allí me abrió la puerta y literalmente me empujó dentro del coche.

Cuando se subió él, sin decir nada arrancó, y comenzó a conducir.

- ¿Y a donde se supone que me llevas?

- Fácil, saben donde tú vives. Pero desconocen totalmente donde vivo yo, por lo que vamos a mí casa - Respondió fijado en la carretera- ¿Te gusta la pasta?

- ¿Que? -Pregunté sacudiendo la cabeza -.

- ¿Querrás cenar no? 

- No comería algo que tu me des en la vida - Respondí arrugando el morro-.

- Entonces yo me comeré la pasta, y tu si tienes hambre, ya sabes lo que puedes comer.

- ¿Ya se lo que puedo comer? 

- Me puedes comer la polla, si, has entendido bien, imbécil - Espetó Theo mientras conducía -.

No pude evitar soltar una carcajada, lo había hecho cabrear.

- En realidad si me gusta la pasta - Musité alzando las cejas -.

- Pues hoy comerás nabo, niñato mal criado. Te salvo, te ofrezco mi casa, y un plato de comida, y encima te crees algo. 

- Bueno si te vas a poner así, te recuerdo quien eres. Theo, la quimera de mierda, que va por ahí jodiendo a la gente, y provocando peleas entre amigos. Por no decir que me has jodido la vida pero bien. Y encima te ofendes, imbécil.

- O te empiezas a comportar bien conmigo, y aceptas que de no ser por mí, probablemente estarías ya muerto, o voy a tener que darle unos azotes a Liam, el niño pequeño que necesita que los mayores lo cuidan.

- Eso no es cierto.

- Y tanto que lo es - Respondió Theo alzando una ceja- Necesitas cuidados todo el día, por que no sabes más que meterte en problemas.

- Se cuidarme sólo.

- ¿Ah sí? - Preguntó deteniendo el coche de repente- Baja y demuéstralo. Si mañana por la mañana sigues vivo, entonces aceptaré que sabes cuidar de ti mismo.

Perdido en mi otro yo (Thiam).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora