I M P R I M A D A [TERMINADA]

Lynn

Le miré. Joder que guapo era. Sus ojos claros eran penetrantes, imposible no quedarse mirando más de la cuenta. Luego estaba ese pelo despeinado y despreocupado, y a eso había que sumarle una pequeña sonrisa que parecía que no dejaba que se asomara demasiado. Conclusión; creía haber conocido a la perfección personificada.

—¿Ahora que pasa? ¿Tú novia me va a dar una paliza? —le dije.

—Me llamo Aiden —se presentó.

La perfección tenía nombre entonces.

—Lynn —dije.

Cerré mí taquilla y comencé a andar, y me siguió.

—Lo siento por Jenny —dijo—, es... complicado.

—¿El qué es complicado? —pregunté yo.

—Tú eres lo complicado —me dijo algo más borde de lo que me hubiera gustado. 

Em... vale. Estaba flipando un poco con su cambio de actitud. ¿No podía ser guapo y además agradable? ¿O todos los guapos tenían esa parte de gilipollas?

—¿Yo? ¿Acaso te he hecho algo?—no respondió— . ¿Por qué me sigues? —le pregunté.

—Voy a la misma clase que tú —me dijo serio.

Entré en clase. No podía no sentir curiosidad por esos chicos. Se sentó detrás de mí y me giré para saciar esa curiosidad.

—¿Quién coño se muda a esta ciudad de mala muerte? —pregunté.

Se encogió de hombros.

—Dímelo a mí —murmuró.

No me estaba contando nada...

—¿Por qué quería tu novia pegarme? —pregunté.

Se rio, este tío era bipolar o algo.

—Porque te lo has ganado —dijo medio de burla.

¿Perdón? ?Me estaba perdiendo algo?

—¿Cuándo? Pero si no le he hecho nada... —dije.

—Mi hermana—dijo otro chico que se sentó a mi lado—, es un amor de persona a veces, no le hagas mucho caso. Lucas, por cierto —dijo con una sonrisa. Este sí me caía bien, le reconocí porque le vi con los demás esta mañana. 

—Lynn —me presenté con una sonrisa—. ¿Le he hecho algo a tu hermana? No me estaba riendo de vosotros ni nada, solo estábamos bromeando con Dani —les expliqué.

—Tranquila no tiene nada que ver con eso —dijo Lucas—, es por él —dijo y señaló a Aiden.

—Lucas —le dijo con tono profundo como un aviso.

—¿Qué? Tendrás que contárselo de todos modos, ahora ya no hay nada que se pueda hacer.

Me estaba perdiendo mucho.

—¿Contarme el qué? —pregunté muy confundida.

Lucas abrió la boca al mismo tiempo que Aiden se echaba para adelante para hacerle callar, pero no hizo falta ya que el profesor entró en ese momento.

Lucas era mi compañero de trabajo, mientras que otro chico, creo que se llamaba Liam era el de Aiden. Me sentía un poco rara al haber hecho tan buenas migas con ellos desde el principio, todos me estaban mirando por ser "la que iba con los nuevos". Pero tampoco me importaba. ¡Yo tenía preguntas y necesitaba sus respuestas! Y que se dejaran ya con todo ese misterio.

—¿Qué le pasa a Aiden conmigo? —le susurré a Lucas.

—Él te ha... —me iba a explicar Lucas cuando un gruñido y una patada a su silla procedente de detrás hizo que se callara. Lucas miró enfadado hacia atrás. La campana sonó y todo recogimos nuestras cosas.

Clara vino hasta mi mesa y salimos juntas. No me despedí de mis nuevos amigos y habíamos dejado una conversación pendiente.