OPORTUNIDADES

Capítulo 21: Antes de la fiesta

Manu:

El día había sido bastante largo, yo no estaba acostumbrado a ir a clase y a obedecer ordenes. Antes de entrar en la academia, como vosotros ya sabéis, tenia una vida

de mierda, y estoy seguro de que me iba a costar encajar en el instituto y hacer amigos. Aunque en el primer día ya había hecho 2, eran los típicos chicos malos del instituto que todo el mundo temía y como yo estaba acostumbrado a eso, con ellos había encajado a la perfección, ellos me habían dicho que esta noche iba a ver una fiesta en casa del chico popular, ellos no estaban invitados, pero como siempre iban a asistir, a ellos nadie les decía que no, así que me preguntaros si quería ir y yo como quería continuar con ellos en el instituto les dije que si, aunque ahora que lo pensaba me iba a costar salir de la academia sin que nadie se enterara. Pero eso no me iba a prohibir asistir a la fiesta.

Era casi hora de comer, así que como habíamos acordado el día anterior me tocaba a mi hacer la comida junto a Paola, me da mucha rabia, Paola me cae bien, pero hoy en todo el día no había podido estar con Lucía y tenia muchas ganas de verla y hablar con ella, ojala ella hubiera sido mi pareja, porque a parte, esta noche tampoco la vería ya que iba a asistir a la fiesta y no les podía decir nada a ellos, porque estoy seguro de que me dirían que no saliese. Paola y yo estuvimos mucho rato hablando mientras hacíamos la comida, la verdad es que es mejor de lo que me esperaba, el tiempo se me ha pasado volando, no era la típica niña tonta, era muy simpática y me he reído mucho con ella, nos hemos conocido más d lo que pensaba y eso me ha gustado. Hemos decidido preparar macarrones con carne, ya que como ninguno de los dos habíamos cocinado nunca, hemos pensado que seria lo mas fácil de hacer, aunque una vez lo habíamos terminado, creo que nos habíamos equivocado, porque los macarrones se habían quedado pegados, pero bueno, eran comestibles así que se tendrían que aguantar y comérselos y si no que se compraran algo para comer, nosotros ya habíamos hecho bastante intentándolo.

-- Creo que esto no tiene muy buena pista, algo hemos hecho mal--dijo Paola riéndose.

-- Tiene muy mala pinta, pero bastante hemos hecho ya, si no les gusta que no se lo coman, yo tengo hambre así que me los comeré.--le dije riéndome.

-- Tienes toda la razón, yo también me lo pienso comer--dijo Paola al mismo tiempo que se le caía una cuchara al suelo.

Fui a coger la cuchara al mismo tiempo que ella lo hacia, nuestras manos se rozaron y nuestras caras estaban a solo unos centímetros. Cuando en ese momento alguien entro en la cocina y nosotros nos separamos rápidamente como si estuviéramos haciendo algo malo.

-- ¿Qué esta pasando aquí?--dijo Lucía, la verdad es que parecía enfadada y celosa, aunque no creo que fuera eso porque estoy seguro de que yo ni siquiera le gustaba.

-- Emm.. Nada--dije rápidamente

-- Ya claro, si a eso le decís nada, estabais a punto de comeros la boca. La verdad es que te merecías que tu novio te pusiera los cuernos, porque seguramente tu lo hiciste antes ya que de santita no tienes nada, eres mas una zorra--Dijo Hugo gritando mirando a Paola.

-- Eres un cabrón, yo no estaba a punto de besarlo y tu no me conoces para nada, no sabes como soy y no tienes ningún derecho de hablarme así.--dijo Paola enfadada, la verdad es que no se parecía en nada a la chica alegre y simpática con la cual había estado cocinando. Pero la verdad es que Hugo se había pasado mucho y no iba a dejar que le hablara así.

-- Pero tu de que vas capullo, ni se te ocurra a volver a hablarle así, ella es la mejor persona que conozco y no tienes ningún derecho en meterte donde no te importa.--le dije sin pensar lo que decía, pero la verdad es que tenía razón, Paola no se merecía eso.