Pasar página.

Capítulo 21: Ella ya no me ama.

PoV Jake.

Empezó a llover cuando salí a la calle, me puse la capucha de mi chaqueta y comencé a caminar rápido. Me paré en un portal y me senté en las escaleras, me quedé mirando en un punto fijo, no sabía lo que me pasaba por la cabeza, demasiadas cosas que no podía ordenar, y entonces apareció ella, estaba mojada y con una sonrisa, se sentó a mi lado y apoyó su cabeza en mi hombro.

-¿Qué te ha pasado? -Preguntó Dylan. -Parecías un niño pequeño al que han castigado sin televisión.

No respondí, no quería hablar con ella, aparté mi hombro y me levanté. Pero ella me cogió de la mano.

-¿No quieres saber por qué he venido? No ahora, sino aquí, a CrossVille.

-Dylan, no tengo ganas de hablar contigo.

-No te voy a mentir, me he escapado del psiquiátrico. -Dijo y mis ojos se abrieron como platos. -Era broma, quería ver tu reacción.

-Dylan, vete por favor. No tenemos nada que hablar.

-¿De verdad? Mira te refrescare la memoria, hace un tiempo, tenía un amigo, un amigo muy falso, que me hizo mucho daño...

-Dylan, cállate, sé perfectamente lo que te hice.

-No, no lo sabes, lo pasé muy mal por tu culpa, intente suicidarme muchas veces, porque pensaba que lo había perdido todo y tú, que eras el único que me apoyaba y me ayudaba en todo, me traicionaste, nadie me quería...

-No tenemos porqué hablar aquí...Hay mucha gente por estas calles. -Dije y ella se puso de pie.

-Jake, bésame. -Dijo ella acercándose.

-¿Qué? -Pregunté sorprendido. -Dylan, no estás bien.

-Lo estaré si me besas. -Me acerco a ella bruscamente y me estampó contra sus labios. Seguía usando el cacao de fresa que siempre usaba, aquellos que cuando se ponía triste por cualquier estupidez le regalaba uno.

Me aparté de ella y me relamí los labios, miré a los lados y ella sonrió.

-Vamos a una cafetería a hablar.

Caminamos bajo la lluvia hasta que encontramos la cafetería más cercana y entramos.

-Un capuchino. -Dije al camarero. -¿Tú que quieres? -Pregunté a Dylan.

-Una infusión de hierbas. -Respondió, el camarero anotó y se fue.

-Dylan, no tendrías que haber hecho eso...

-¿Por? Audrey se va a casar, y además te has alejado de ella.

-¿Tú cómo sabes lo de Audrey?

-Oh Jake, ese tiempo que pasé fuera no estuve incomunicada...-Dijo y empezó a jugar con su cabello.

-¿Quién te lo dijo? ¿Chase? ¿James?

-No, tal vez no sepas quien es, o no lo recuerdes ¿Te suena el nombre Drake Collins, o Espinosa?

-¿Cómo le conoces? Es el hermano de Emma, la mejor amiga de Audrey.

-Lo sé, por eso lo escogí como fuente de información.

-¿Cómo? No lo entiendo.

-Es cosa del destino como dirían... ¿Has oído la frase de "el mundo es un pañuelo"? Pues eso me pasó cuando conocí a Drake.

El camarero trajo los pedidos y ella dió un sorbo a su infusión.

-Todo empezó cuando a mi psicóloga se mudó a Kresworg, mis padres estaban encantados con esa psicóloga, decían que veían progresos en mí. Así que, a pesar de que Kresworg se encontraba a veinte minutos desde donde yo vivía, decidí seguir yendo. En una consulta, estaba Drake, tenía su cita después de la mía, pero el siempre llegaba antes, a veces charlabamos y todo, me contó que estaba ahí por la pérdida de su padre, a él le sentó peor que a Emma, así que sólo iba él. Seguíamos quedando fuera de consulta, hasta que un día vi a Chase, junto a Audrey, y a James, con la rubia que nos estuvo siguiendo por todo el aeropuerto a mí y a Chase. Drake y yo estábamos en una mesa un poco alejada, Drake notó que sentía curiosidad por ellos, y me contó que os conocíais, así que él fue el que me mantuvo informada, quería vengarme por todo lo que me hiciste, pero no pude, ni podré, porque yo aún te sigo queriendo.