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-te lo vuelvo a repetir, si tratas de seducirlos o mostrar tus supuestos encantos femeninos de los cuales no tienes nada, te las veras conmigo.- advertí por milésima vez.- así que actúa como hombre, son nuevos amigos y no quiero que los espantes, ¿podrías hacer eso por mi?- roge. Se escucho un bufido al otro lado de la línea.
- está bien.- aceptó de mala gana, solté una risita.
-bueno, entonces te veo en la noche Joe, te quiero.
-adiós cariño.- colgó.
Un pendiente menos. No es que me avergonzara que actuara así, al contrario, me gusta mucho que se divierta sea cual sea la forma que tiene para ser feliz. A decir verdad me alegraría muchísimo si un día llegase diciendo "¡Soy gay!" porque vamos, ¿a quién no le gustaría un amigo así? luego verlo con su pareja, ¡dos amigos gay! sería maravilloso sin duda. Me recosté en el sillón aun con algo de sueño, iba de canal en canal buscando un noticiero o algún programa donde me dijeran la hora, "10:00 am". Y resulta mi duda me acomode mejor apagando el televisor viendo el techo.
Me deje disfrutar el momento que pocas veces me doy el lujo de tener; un completo y agradable silencio. Jade salió al súper según decía la nota sobre la barra de la cocina.
Parecía que todo estaba listo; ayer por la tarde invite a Louis a dormir acá si se mejoraba claro estaba y como era de esperarse me pidió permiso para invitar a su amigo el afro, yo acepte. Al parecer son uña y mugre.
Permanecí un rato mas disfrutando de la tranquilidad que me rodeaba.
¿Y si un día de estos me llego a encontrar a Mat en la calle?, ¿que reacción tendría él? ¿Y yo? ¿Y si no me recuerda?, eso sin duda sería maravilloso. Por más que me recalco el que posiblemente es una simple confusión de Joe no dejo de pensar en la también posibilidad existente de que no sea una equivocación y, este aquí. ¿Habrá cambiado?, ¿se arrepentirá de aquello?, si me reconociera, ¿me pediría perdón?, ¿habrá lastimado a alguien más igual que a mí?
¿Y los demás?, mi familia, mis amigos. Me siento mal al nunca haber llamado, mi tía Bianca me contaba sobre cortas y escasas llamadas de mis padres mientras yo estaba en la escuela a causa de la diferencia de horario, muchas veces pedí y hasta rogaba que me diera permiso para llamarlos puesto que claramente los extrañaba demasiado pero ella siempre se negó con la escusa de que no tenía el numero pues olvidaba pedirlo cuando llamaban. Desde que mi madre, con el corazón partido a causa de lo sucedido conmigo, decidió mandarme a Londres con mi tía no volví a saber nada de ellos, no tuve tiempo para despedirme de absolutamente de nadie. Y ahora que cuento con la total libertad de llamar no lo hago, ¿por qué? fácil. Por tonta y olvidadiza.
(Harry)
Alguien me removía un brazo pero hice casi omiso. No quería despertar. Ahora eran los dos brazos. Gruñí resignado. Abrí poco a poco los ojos sintiendo como la sangre se me congelaba y el corazón se me paraba. Louis estaba sobre mí sosteniéndose con sus rodillas y manos para no caer a peso muerto sobre mí. Me observaba con una sonrisa guasona y picarona. Su mirada zafiro brillaba con diversión.
-Buenos días, soñador.
(…)
- por milésima vez ¡NO ME GUSTA!
- a Harry le gusta ___, la quiere y ni lo pela.- canturreaba Louis desde mi cuarto.
- ¡QUE NO!- le avente el rollo del baño desde la puerta de la habitación.
-La quiere y no son novios.- siguió cantando.
-si como digas- dije moviendo la mano con desdén. No tenia caso seguir discutiendo.
Y no sé si es verdad o no pero al parecer hable dormido diciendo cosas vagas y entre ellas se repetía más el nombre de ___. Siendo sincero no recuerdo haber soñado nada, y eso es lo que más me frustra. No recordar nada. No sé si es verdad que lo soñé o no pero si no fuera así, ¿por qué tanta insistencia de parte de Louis? Seguro y si soñé con ella. ¿Pero qué?
-vale ya no te molesto, ¿pero si recuerdas que hoy por la noche iremos a su casa romeo?- preguntó.
-Si Louis, me lo has repetido toda la mañana- rodé los ojos y camine hacia la cocina.
-bueno pero, ¿si lo recuerdas?
-Si.
-Te creeré rulitos.-lo ignore y busque jugo de manzana. Ya no había.- ¡Louis! ¡Ya no hay jugo de manzana!- me queje.
- tal vez debas ir con una taza a la casa de la vecina y decir "me das un poco de tu jugo".- me giño un ojo riendo mientras caminaba hacia la ventana.
-¡YA CALLATE! eres como una patada en el trasero.- gruñí. Soltó una carcajada y yo solo lo veía enojado. Enserio que es peor que una chica. ¡TAN TERCO!
