Fragile [Petekey]

35.

-Hagamos como que no pasó nada esta noche, ¿De acuerdo?

-No Patrick, no, ¡Ray casi mata a Brendon! Y lo peor es que fue por Meagan.

-Oh sí, una estupidez lo sé, él cree que ella lo trata con cariño porque le gusta... -decía Patrick mientras se dirigía a la cocina y se servía café en una taza.- está muy ilusionado, hasta a mí me trataba así.

-Y a Andy.

-Y a Joe.

-Y a Gabe.

-Hasta a mi papá.

-A todos... y aún así me aguantaba sus cosas, pero ya entendí que no debo buscar gente como ella, ¡No sé en que pensé cuando la vi!

-Bueno, ella es muy atractiva, pero incluso desde antes de que ustedes estuvieran saliendo ya decían cosas malas acerca de ella.

-Y por eso lo digo, ella de verdad está loca, es enfermita.

-Pobre, es una desgracia que ella venga a arruinar todo... oh ¡Tengo una idea!

-¿Ahora qué? -se sentó en el comedor.

-No sé, creo que no te gustará pero te diré cual es mi idea.

-Habla ya.

-Haz lo que ella te pida, y luego la dejas.

-¿Qué? No haré nada de eso Pat, ya estuve con ella antes y le di todo lo que deseaba, ella fue quien me perdió.

-Pero seguro si le das lo que quiere se calme, luego tú te largas y ya.

-No Pat, ella quiere que pase el resto de su vida con ella ¡Y yo no me imagino con ella de esa forma!

-Oh... entonces mejor pongámosle una orden de alejamiento.

-Ush, eso es lo que necesitamos todos.

-O mejor nos calmamos, tampoco es para tanto... ¿No? -dijo con una sonrisa y Pete lo miraba serio.- Okey.

Los chicos se quedaron varios segundos en silencio, Patrick comía galletas y tomaba café mientras que Pete sólo pensaba viendo al piso.

-¿En qué piensas tanto?

-Necesito escribir una canción.

-Pues que bueno que lo mencionas, estaba pensando en hacer público nuestro nuevo álbum en dos meses.

-¿Dos meses? Pero seguiríamos en descanso...

-Pete, luego de publicarlo seguiremos teniendo tiempo.

-Pero igual, tendríamos más tiempo si lo hacemos público luego del descanso, no podemos publicar Infinity On High de una vez.

-Lo sé, apenas tenemos grabadas seis canciones y son quince. -respondió Patrick cabizbajo.

-Thriller, The Take Over, This Ain't a Scene, Hum Hallelujah y...

-I'm Always Like a Lawyer.

-Gracias, se me había olvidado el título.

-Creo que mejor haremos lo que dices, apenas tenemos tres meses de vacaciones y no podemos hacer todo de una vez.

                      *** ***

Al día siguiente...

Patrick se encontraba durmiendo en el comedor con una taza al lado, un lápiz y el cuaderno de Pete.

Pete bajó de su habitación y fue a la cocina, vio a Patrick y se acercó a él.

-Hey, pato... oye -decía mientras le movía el hombro.- Patrick, despierta.

-Hmm...

-Estás durmiendo en mi cocina, anda a tu habitación.

-Meh, estoy bien aquí.

-Pero no es bueno que estés durmiendo aquí, anda ya a la habitación.

-No joda.

-Vamos, muévete, no puedes dormir aquí.

Patrick le hizo caso y se levantó de la silla.

-Pareces un muerto, camina con más ánimos.

-¡Me acabo de despertar, no sé que esperabas!

Patrick entró a su habitación mientras que Pete empezó a ver qué podía cocinar.

Hmm, podría cocinar past...

-¡Buen díaaaa! -gritó alguien tocando la puerta de la casa.

-¿Quién es? -preguntó Pete yendo hacia la puerta.

-Peter, el chico de la tienda de música.

-Ah bueno, igual ten un buen día. -respondió Pete.

-Hey, ¿Me dejarías pasar? No me dejes aquí, luché por poder saber en dónde quedaba tu casa.

-¿Quién te dijo en dónde vivo? -preguntó Pete agarrando la llave de la casa.

-Eh... no me creerás si te digo, simplemente ya déjame pasar.

Pete abrió la puerta de la casa, dejó pasar a Peter y se regresó a la cocina.

-Uuff, caminé mucho con este piano. -dijo entrando con un piano amarrado.

-¿¡Qué diablos haces con eso?! ¡Yo ya estuviera muerto si caminara con eso!

-Es que quise traerte un regalo. -decía mientras intentaba acomodar el piano, el cual por accidente le cayó encima de un pie.

Peter echó un grito algo parecido a los del gato Tom, posiblemente hasta los vecinos lo habían escuchado.

Pete salió corriendo para ayudarlo, pero vaya que ese piano pesaba un montón.

-AAAAAAAY PETEEEEE AYUDAAAA.

Apenas él pudo levantar el piano Peter se lanzó al piso, se quitó su zapato lanzándolo y se quedó quieto por varios minutos.

-Oye, ¿Ya estás bien? Esto no fue nada normal, yo sólo salí a hacer pasta y un chico llegó con un piano para luego echarse a gritar y lanzar su zapato a un rincón de mi casa.

-Aaash... perdón, yo quería hacerte un regalo porque eres buena onda.

-Pues muchas gracias, no sé como podría agradecerte por ese piano la verdad.

-Con que me des un vasito con agua y un pan me basta... también que me lleves al médico por mi pie.

-Ah, bien, ¿Te puedo preguntar algo? ¿Quién te dio mi dirección?

-Tienes un vecino que es mi amigo, y no sólo vine para darte el piano sino para pedirte que me ayudes con mi carrera musical...

-Oh, ¿Entonces viniste para hablar conmigo de eso y hacer que estés también con nosotros, verdad?

-Sí, pero sólo para preguntarte si podías hacerme ese favor algún día... aún no.

-¿Por qué no?

-Quiero unirme y estrenar mi primer álbum el mismo día.

-Ah, entiendo... oye, ya puedes levantarte del piso.

                      *** ***

Los dos Peter estaban en la cocina hablando de la discografía y de la música, cuando entonces escucharon los pasos de Patrick.

-¿Peter? -preguntó Patrick entrando a la cocina y los dos voltearon.- ¿Qué hace él aquí?

-Estoy aquí gracias a un amigo.

-Hey Patrick, ¿Joe te contó acerca de la boda de Gerard y Frank?

-¿Qué? ¿Quién es Frank?

-¿En serio no sabes? -le preguntó a Patrick.- El chico punk... ese de tatuajes que es enano.

-Ahh, sí sí.

-Perdonen, ¿De quienes hablan?

-Son unos chicos geniales y talentosos, Gerard mi cuñado y Frank su futuro marido... o eso espero.