Tras de ti

Tu silencio

El enorme departamento se escuchaba mas callado que de costumbre, el ambiente era tensó anunciando problemas.

El peliazul se había encerrado en la que se le informo seria su habitación, no había salido ni al baño, y eso ya desesperaba a Karma.

Karma por su parte, tan pronto como llegaron al lugar, fue atendido por una maquina que manejaba Ritsu a su antojó, debía agradecer a Itona por tan útil artefacto pero lo haría después de lograr sacar a la pequeña serpiente de su nido.

-Nagisa - llamo de forma suave mientras se recargaba en la puerta de la habitación - Nagisa, sal... Tengo mucho que decirte y otras cosas que quiero preguntarte - dijo moviendo el pomo de la puerta para descubrir que había sido cerrada con seguro - Nagisa, en serio quiero hablar tranquilamente - pidió tratando de mantener la calma, misma que al no recibir respuesta del peliazul, decidió saltar por la borda antes de que el fuego consumiera el barco - Te lo pedí de forma amable - aclaro molesto antes de tirar la puerta y recibiera un cuchillo esta vez en el hombro - Agh! No soy su maldito portador de cuchillos - grito molesto mientras sacaba sin delicadeza alguna el cuchillo de su cuerpo y lo arrojaba al suelo.

-No es mi culpa... - se defendió Nagisa entre bostezos, haciendo muy evidente que estaba dormido - entraste sin avisar -.

-Llevo mas de veinte malditos minutos tocando la estúpida puerta y tu no respondías! - grito Karma sin dejar de ver el suelto y alborotado cabello de Nagisa, sus ojos adormilados, sus mejillas algo sonrojadas y su ropa holgada, estaba sentado sobre sus piernas y la sabana aun cubra su espalda - (Tan hermoso...) - pensó tratando de conservar su expresión de molestia.

-mmm... En serio? -

-Si -

-Ah, no me importa - dijo volviendo a caer en el colchón, acto que termino por matar el intento de calma del pelirrojo.

- Y así te haces llamar el hijo del dios de la muerte! - grito Karma caminando rápidamente a donde el mas pequeño se encontraba... Profundamente dormido - Tu... Pequeño cabrón... Despierta maldita sea! - ordeno tirándolo de la cama.

-Idiota! No ves que trato de dormir!! - grito Nagisa parándose velozmente y saltando sobre el mayor haciéndolo caer al suelo para quedar sobre su pecho con otro cuchillo rozando su cuello.

-Maldito demonio amante de los cuchillos! De donde sacas todas esas mierdas!? - grito Karma mientras sentía como la sangre de su herida no dejaba de fluir.

-Eso a ti no te importa! Ahora, si no quieres morir, deja me dormir - le ordenó quitándose de encima pero el pelirrojo no se lo permitió, tomándolo del brazo y en un rápido movimiento, Karma invirtió las oposiciones quedando ahora sobre el mas pequeño sujetando con ambas manos sus brazos para evitar posibles cuchillos -Quita te maldito! -

-Sigues siendo tan débil como una hormiga - se burlo Karma al sentir los débiles intentos de Nagisa por quitarlo de encima - lo tuyo no es el combate cuerpo a cuerpo, verdad? Y así vas solo con aire de las puedo todas... - ironizó el pelirrojo con mofa.

-He terminado con organizaciones enteras de mas de mil soldados y lo he hecho solo - hablo molesto el peliazul mientras forcejeaba.

-A mi eso me da igual, no puedes ni conmigo...- dijo Karma divertido, mas de un momento a otro se torno serio - como es que llegaste a ser asesino, Nagisa, como terminaste en ese mundo?...- pregunto en tono melancólico.

-No tengo que responder te nada - dijo Nagisa tan frío como el hielo, sin embargo algo en en su interior se había estremecido ante las palabras y la expresión del mas alto.

-Nagisa, por favor, todos te buscamos por años... Yo nunca pare de hacerlo... - confesó Karma con voz quebrada -pasamos noches enteras buscando te, incluso Terasaka obtuvo conexiones con otros políticos después de lo que paso en la embajada hace un año...-

-...-

-No dirás nada? -

-...-

-Bien, esta bien... Esperare a que quieras hablar... - dijo en tono triste el pelirrojo mientras dejaba libre al contrario y caminaba a la salida - Ritsu reparara tu puerta en seguida... - informo parado en el marco de la puerta para que acto seguido, el robot de Ritsu apareciera y reparara la puerta en completo silencio.

-Cuando termines con eso, requiero de nuevas puntadas - informo Karma desde la cocina donde ya preparaba el botiquín.

-Claro, voy enseguida! - respondió la chica virtual sin dejar de soldar las bisagras de la puerta.

Por su parte, Nagisa volvió a la cama, pero ya no pudo dormir, años en misiones casi suicidas, creía haber borrado todo sentimiento a excepción de la ira y llegaba un estúpido pelirrojo a joder su mundo.

-("todos te buscamos por años")- resonó en su cabeza con fuerza - ("Yo nunca pare de hacerlo") - esas únicas palabras fueron suficientes para que su corazón palpitara con fuerza -(Si seras idiota Nagisa, no puedes dejar que este afecte!) - se reclamo molesto presionando su pecho con fuerza - (no puedes...) -.

En la cocina, Karma se encontraba apretando los dientes para no gritar mientras que el "sádico" robot de Ritsu le cosía su nueva puñalada.

-A este paso, ya te habré cosido todo el cuerpo - dijo Ritsu "cansada".

-creeme, no es de mi placer particular el que me claven cuchillos en el cuerpo a diestra y siniestra - aclaro Karma burlón cuando " ella" corto el hilo - Mañana debo ir a comprar mas ropa, esta esta llena de agujeros...- murmuro viendo el saco lleno de sangre en el respaldo de una silla y la camisa que aun portaba, en el mismo estado.

-Procura volver en una sola pieza... - pidió Ritsu guardando el botiquín - Ahora debo informar a Irina-sensei y a Karazuma-san que ya tenemos a Nagisa - informo.

-Aclara que no pueden intervenir a menos que yo lo pida! -

-Si hombre, si...-

Y la casa volvía a estar en silencio... Un asfixiante silencio... Siempre era callado ya que el y Ritsu no hablaban si no era de trabajo, pero ahora... El saber que el pequeño peliazul estaba en una de las habitaciones y se negaba a responder alguna de sus preguntas le dolía...

-Tu silencio pesa mas que tu ausencia, y duele mas que tus cuchillos... - hablo en voz baja mientras tocaba delicadamente las puntadas de su hombro - si no hablo contigo... Moriré de dolor mi amada y mortal serpiente...-