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                  •Narra Alec•
El día en el Instituto era de lo mas rutinario para cierto pelinegro, quien bajaba por las escaleras hacia la cocina, era hora de que preparara el desayuno, sus padres no estaban, solo Jace, Izzy y él, al menos eso esperaba. Comenzó haciendo algo de huevos revueltos y tocino, mientras servía tres platos, escucho las pisadas de sus hermanos, un día para ellos solos era de lo mejor.

-Buenos días. Izzy se sentó en la mesa mientras se acomodaba el cabello y preparaba su labial.

-Buenos días Izzy. Comencé a servir algo de jugó de naranja.

-Buenos. Jace se sentó y miro somnoliento el plato. -Podrías agregar un plato mas, Clary vendara en unos minutos. Apenas termino eso y solté un bufido.

-Si, lo haré. Serví el plato y un vaso, para la mundana "Aunque al parecer ya era una Cazadora" no lo recordaba.

-Este me queda genial. Dijo Izzy mientras se miraba en un espejo de mano el labial que acababa de aplicar.

-Izzy desayuna. Le dije mientras me sentaba frente a mi plato.

-Sabes, saldría mas rico si yo lo cocinara. Replico mientras tomaba un bocada de tocino.

-Tu comida es del asco. Jace la miraba burlón.

-Dejan de pelear y desayunen. Intentaba contener una sonrisa, aunque era un tanto difícil, hasta que la puerta de la entrada se abrio.

-Jace!! Buenos días!!. Levante la vista de mi plato y mire como Clary abrazaba a Jace quien aceptaba gustoso el abrazo.

-Sientate, desayuna con nosotros. Jace se movió de a ciento quedando a lado de Clary.

-Que rico cocinas Alec. Me dijo sonriendo.

-Gracias. No me desagradaba, solo que aun no tenía una gran conexión con ella y no encontraba algo interesante para ambos de que hablar, pero le gustaba que le digieran que cocinaba rico.

-Ni el tocino de mi mamá, sale tan delicioso. Clary comenzó a comer y todos la imitamos.

Al finalizar, Izzy fue a algún lugar, seguramente con algún chico, y Jace se fue con Clary a la biblioteca, mientras que Alec recogía la mesa, Clary siempre se acababa el tocino que el preparaba y Jace se acababa el huevo, Izzy no comía tanto para "cuidar" su figura, pero ya era muy bonita.

-Uff. Termino de lavar los platos y ponerlos a secar y salio de la cocina.

                    •Narrador•

Caminar por los pasillos del Instituto era agradable, aunque ya sabia todo sobre el lugar, nunca le dejaban de impresionar los cuadros y los detalles de la arquitectura, se supone que este día debía de ser como los otros, rutinario. Pero en esta ocasión Alec se sentía vigilado, a pesar de mirar hacia atrás en algunas ocasiones, nunca había nada, solo vacío, siguió caminando para distraerse de esos tontos pensamientos de ser acechado. Si solo se hubiera quedado mirando un poco mas el vacío, tal vez se hubiera dado cuanta de la figura oscura que lo miraba, con aquello ojos violetas, deseoso, esperanzado, cariñoso. Alec camino hasta llegar a la biblioteca, donde se escuchaban la voz de Jace y Clary, en una charla que parecía animarlos a los dos, entro en la habitación y los dos lo miraron.

-Alec, le decía a Jace que el no puede ser el chico mas guapo del mundo. Clary se cruzo de brazos fingiendo molestia.

-Parabatai dile que es mentira lo que dice, yo soy sin duda el más atractivo del mundo. Jace solo me miro.

-Jajaja. Solo tome un libro que tenia tiempo queriendo leer y salio de la biblioteca con una sonrisa.

Aunque inmediatamente se arrepintió al sentir de nuevo esa sensación, la mirada profunda en su espalda y su... Trasero?!, imposible, abrazo el libro a su pecho y camino hacia su habitación, intentaba ignorar la sensación, pero se alarmó al escuchar pasos, comenzó a caminar mas rápida.

-Basta!. Se sentía desesperado.

Al gritar los pasos se deruvieron, no había nadie en el pasillo, pero aún se sentía vigilado.

                 •Narra Alec•

Miraba a todos lados, pero no encontraba nada ni a nadie, pero la sensación seguía ahí.

-Quien sea que este haciendo esta mala broma, de téngase, no es gracioso. Sujetaba el libro con fuerza, para ni temblar.

*No es una broma* la voz venia detrás, sintió su corazón oprimido, y al sentir una respiración en su cuello dio un salto.

-Aah. Al sujetar me el cuello sentí el calor que la respiración había dejado.

Los vellos de mi piel se erizaron, cuando en el fondo del pasillo noto una silueta, alta y oscura, pero con una enorme sonrisa, por impulso deje caer el libro y  comencé a caminar rápidamente hasta llegar a mi habitación donde apenas entre me encerré.

-¿Que fue eso?. Miraba la puerta, era la primera vez que se sentía amenazado al grado de querer correr y suplicar por su vida.

                   •Narrador•

Se acomodo el cabello mientras se sentaba en su cama, su corazón estaba a mil por hora, tomaba respiraciones suaves para a nivelar se.

-Lo mejor es que vaya a disparar algunas flechas. Se levanto y camino a su puerta.

Comino tranquilamente, intentando convencerse que lo anterior no había pasado, al llegar a la sala de armas busco su arco y carcaj y se dirigió a la zona de tiro.

-Tranquilo. Flecha tras flecha, el nerviosismo y el miedo iban bajando, ya ni siquiera notaba a quien le miraba desde la banca, aguardando con el libro que había dejado caer.

                        ∆ ∆ ∆

Es la primer historia que hago de esta serie, libro, película (como ustedes la conozcan) y espero que les guste.

Muchas gracias por leer. <3

El ángel de Lucifer.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora