TRAS TU SOMBRA. un rastro difícil de seguir.

solo pasa.

Ya es de mañana, los rayos de sol se filtran por las cortinas de la habitación, intento levantarme, pero se me es               imposible hacerlo, dos fuertes brazos rodean mi cintura y me unen fuertemente con un cuerpo cálido y musculoso.
Me volteo, pero creo que ha sido un completo error. Su rostro queda a pocos centímetros del mio, su pestañas caen por sus pómulos, siento su respiración en mis labios y no puedo evitar bajar la vista a los suyos, se ven carnosos y provocativos, delicioso. Pero que estoy pensando.

Deja de fingir, los deseas al igual que yo. Solo besalo, jamas lo sabrá.

No creo que sea buena idea.

¿si no lo deseas por que te lames los labios?

No me había dado de cuenta, pero era la verdad.
Quiero.
Pero...

Esta dormido.
Nadie sabrá....te lo juro, y sabes que jamas hago promesas que no cumplo.

Con cierta desconfianza por sus palabras, me hacerco a él, hasta poder rozar sus labios con los mios.
Son delicias.
Cierro los ojos y disfruto de su cercanía sin separar nuestros labios.
Después de algunos segundos siento que soy correspondida, y con el corazón en la mano me aparto. Ver una sonrisa de oreja a oreja, junto con un par de ojos brillantes algo oscurecidos.
Una leve risa sale de sus labios, lo cual hace que me sonroje y la vergüenza crezca en cada parte de mi ser.

- ese fue un muy inesperado, sorpresivo, pero muy delicioso despertar- dice jalandome hacia él.

Si antes estaba sonrojada, ahora debo verme como un tomate de rojo, ¿ por que tuviste que despertar? Me hubiera encantado quedarme mas tiempo así.

Lo observo hacercarse, y mi corazón salta, cuando sus labios tocan los mios, le correspondo y disfruto  de ellos, mientras nuestras lenguas se unen en una muy sincronizada danza.

Esto definitivamente es mejor de lo que había pensado que sería. Mis manos se deslizan a través de su cuello y me sujeto firmemente para poder sentirlo aun mas.
Sus besos delicados se vuelven salvaje y apasionados, haciendo que en pocos segundos me quede sin aliento y mi corazón por lo agitado no me permita respirar.
No puedo creer que ha pasado esto. Creo que confiare mas en Aciul.

Me aparto para poder respirar, y siento su vista clavada en mi. Estoy apenada, posa una mano en mi mentón obligándome a mirarlo.
Pero creo que no Resistiré mucho, ya que me estoy perdiendo en su mirada. Una que es tan dulce como apasionada.

-No esperaba eso ¿ por que lo hiciste?- pregunta con picardía.

- he... Yo... Yo, quería...- de mi solo salen balbuceos.
Que vergüenza.

-¿ querías besarme?- pregunta sonrojado.
 
No puedo creer que quiera saber si quería.
- yo... He...si... Quería besarte- confieso apenada.

Su sonrisa crece mucho mas, y si no fuera por que lo he besado le golpearía.

- dime algo... ¿ me deseas?- No puedo creer esto, es mucho mas de lo que abría imaginado  que preguntaría, pero al perecer le encanta verme de esa manera.
Y con mis mejillas como semáforo asiento con la cabeza, lo cual logra que se ría. Y no comprendo que es tan gracioso, me muero de vergüenza.