conciencia parte dos

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Eres tan estúpida ¿ por que te desmayaste? No ves que quedar inconsciente, no puedo hacer nada. De verdad que idiota.

– ¿quien eres? – pregunte, refiriéndome a la voz de mi cabeza.

– ¿ te sientes bien? Pensé que el beso había servido– dijo zac, posando su mano en mi mejilla.

– ¿ como lo haces? Pregunte.
El me sonrió y se sentó a mi lado.

– yo... Emm– las palabras no salían de su boca, se vehia nervioso.












Katrina...

Las lágrimas rozaban mis mejillas, mejor dicho las empapaban por completo. Estaba desesperada, no sabia que hacer.
No podía volver a perder a lila, ya había buscado por todos lados, el miedo me estaba invadiendo.

Me hacer que rápidamente ala habitación, y toque la puerta, él era mi ultimo recurso.

– zac... Soy yo. Katrina...por favor abre la puerta, no se que hacer ayuda me–  al ver que no abría, la desesperación hiva en aumento. Me deslice por la puerta hasta quedar sentada en el suelo.

En eso escuche el crujir de la puerta al abrirse, apenas lo vi salir, lo abrace fuertemente. Y las lágrimas que estaba tratando de contener salieron a flote.

– ¿ que ha ocurrido? Lo escuche preguntar, su era de angustia y preocupación.

– no... No... Yo – las palabras no salían de mi boca.

– tranquila repita, ¿ que ha pasado? Preguntó.
Su voz me tranquilizaba, era la única persona en la que mas había contado en toda mi vida. Trate de tranquilizar me.

– no la encuentro zac, no la encuentro, Daniel, no sé a donde esta. Ayuda me –  dije sollozando.

– yo sé en donde esta– esas palabras, me llenaron de alegría, sabia que en el siempre podía confiar, él jamas me defraudaría.

Me señalo a su habitación, y ambos entramos. Mi corazón dio un vuelco completo, al ver a Daniel, en esa habitación.
Me hacer que corriendo a ella, y la abrace fuertemente, estaba muy feliz de verla.
Pero me percate de que no llevaba ropa puesta. Volteé a mirar a zac, y él solo llevaba unas bermudas cortas.

La felicidad que tenia se transformó en  ira, estaba furiosa. No me podía creer, que zac hubiera abusado  de ella. Daniel, la pequeña, la que es considerada por todos como una pequeña bebe inocente y frágil, me las pagará.

Me hacer que a él, y lo tome por la nuca, obligando a que se arrodillará en el suelo, pero el grito que dio no era suficiente. Lo tome del cuello, y lo arroje contra la pared. Apretando cada vez mas su agarre, hasta hacer que mis uñas se clavaran en su cuello, el cual sangraba. Pero todavía no bastaba, debía pagar por haberla usado.















Daniel...
– no – grite.

Me hacer que corriendo, hasta donde Katrina – no paso nada, no  hicimos nada... Sueltalo... Por favor– suplique.

Ella lo soltó y dejó caer en el suelo. Me agarro de la muñeca, y saco al pasillo. Cerro la puerta.

Del otro lado de la puerta, se podían escuchar gritos, golpes, cosas callendo al suelo.

Después de algunos segundos observe a Katrina salir, tenia las manos ensangrentadas. Me asuste, y trate de entrar al cuarto pero ella me lo impidió.

Llegamos a mi habitación, la observe entrar en todas partes, parecía estar buscando algo. camino hacia mi.

– te espero, vez a bañarte, es tarde– salio de mi habitación.

Estaba preocupada por zac, me metí al baño. Saque la ropa que llevaba puesta.
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Ambas bajamos a la estancia, tome asiento  al lado de Dulce, pero zac todavía no había bajado.
Todos murmuraban, se vehian molestos o mas bien preocupados.

Se escucho el crujir de la puerta al abrirse. Era zac, llevaba su uniforme pues al igual que todos, tenia muchos moretones en su rostro.

Se sentó a mi lado. No pudo evitarlo, se aguaron mis ojos, pose mi mano en su hombro, lo observe retorcerse de dolor.

Realmente lo había lastimado.
Katrina se levanto de su asiento y aclaro su voz, para que todos la escucharan con claridad.

– escuchen bien mis palabras. Eso es una prueba de lo que les pasara a cada uno de ustedes, si le tocan, tan siquiera un cabello.

–!callen! Esas malditas voces, no dejan dormir a nadie– dijo Ryan mientras entraba en la estancia.

Se vehia agotado, tenia grandes ojeras, se vehia a simple vista que se había acabado de despertar. No llevaba camisa puesta, lo cual dejaba al descubierto su esculpido abdomen, y traía los pantalones del día anterior.
Miro a zac y se hacer rápidamente, posado su mano en su mejilla.

–¿ quien te ha hecho esto? Preguntó enojado.

– yo he sido– respondió Katrina seca.

– ¿ por que? Esto solo se aplica para algo Realmente malo ¿ que ha hecho? Estoy seguro de que no es tan grave, y tu pagaras las consecuencia por haberlo lastimado– dijo Ryan enojado.

– se ha aprovechado de Daniel– respondió Katrina.

–!¿Que?¡– grito Ryan, mientras tomaba a zac del cuello y lo estrellaba contra la pared– te arrepentirás por hacerla tocado. Confíe en ti, la lleve para que la cuidarás. Pero abusaste de mi confianza. Morirás, ese sera tu castigo.

–¡no !– grite, me hacer que rápidamente a ellos– no paso nada, él no me toco un solo cabello. Confían en mi no paso nada.

Ryan soltó a zac, el cual cayo al suelo. Me hacer que, para poder ayudarlo a levantarse.

– llevaba desaparecida, desde anoche. La encontré en su habitación desnuda en su cama– dijo Katrina.

Observe como el enojo de Ryan se convertía en ira. Se hacerco a zac, pero me interpuse, me hacer que, y lo abrace fuertemente.

– no ocurrió nada, no lo lastimes, por favor. Nada paso- dije mientras mis lágrimas cahian en su pecho.

– No lo haré...por ti. Pero si vuelve a tocarte, no tendré piedad– susurro Ryan en mi oído.

TRAS TU SOMBRA. un rastro difícil de seguir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora