no temas

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Me desperté algo sudada, recordando por completó lo que había sucedido la noche anterior.
En eso escucho el crujir de la puerta, estoy en mi habitación.

Zac.
Doy un gritó ahogado, el corazón quiere salir se pecho.

- alejate- le grito.

- tranquila, no voy ha hacerte daño. Eres de la familia- dijo y se sentó a mi lado.
Me volví una bolita en un rincón de la cama.
Tenia miedo, confiaba en él, ahora no sé nada de nadie.
Todos estos días que he estado aquí, corría peligro.

En eso se vuelve a escuchar el crujir de la puerta.

- él quiere verla- dijo Elizaved.

- ella necesita tiempo- dice zac.

- ahora- exige.

Zac me mira, parece preocupado. Me toma de los hombros y levanta.

Caminamos por varios pasillos. Diablos, no sé en donde me encuentro. Debo hacer pequeños recorridos.

Entramos en una especie de estudio.
Zac me observa y asiente.
En ese momento ambos salen, y la puerta se cierra ante mis ojos.

- abran me- grito, mientras doy fuertes golpes en ella.
Doy un vistazo a mi alrededor. Todo esta oscuro, a acepción de unos cuantos rayos de sol que se colaban por la cortinas.

Estaba asustada, casi muriendo del miedo. Más y me desmayo. Me volví bolita en una pequeña esquina.
Las lágrimas cahian, no podía pararlas.

Después de varios minutos que parecían eternos. Se escucha el crujir de la puerta, levanto mi rostro.

Corro hacia en su dirección y me pierdo en su pecho, el cual me ofrecía calor y seguridad, por algunas extraña razón que no comprendía. Mis lágrimas caen con mas rapidez, empapando su playera.

- tranquila nadie te ara daño, de eso yo me asegurare. No temas, estoy aquí- susurra en mi oído.

Alzo mi vista a sus hermosos ojos, en los cuales me pierdo.
Me regala una de sus sonrisas.
Es uno de ellos, es diferente. Pero sé, y confió en jamas me hará daño.
Al menos no físicamente.

- es una perdida de tiempo dejar que se quede, es débil, incapaz. Sera un completo estorbo- dijo una voz, la cual me sobresalto, volví mi vista a vi al chico de anoche a unos cuantos pasos detrás de mi - esas fueron tus palabras, apenas la viste llegar. Eso fue lo que me dijiste. Y pensándolo bien, fue lo que todos digieron ¿no? Ryan.

¿que?

- dicen que se siente muy bien ¿puedo?- pregunto extendiendo sus brazos.

Mire a Ryan, el cual se vehia tensó.
Salí de sus brazos y entre en los del chico, me apretó fuertemente, me abrazaba, pero no le correspondi.

- los primeros días, se referían a ti como un estorbo, con el cual debían  de cargar. Pero ahora eres la bebé cirzerts - dijo y miro a Ryan- odiabas tenerla serca, y ahora  no soportas tenerla lejos- dijo en tono burlón.

- callate- exigió Ryan.

El chico sonrió.
- soy tu rey, pero sobre todo, soy tu amigo. Y no puedes negar lo que veo en ti- me beso en la mejilla- ya puedes volver.

Me soltó y no dude en regresar a los brazos de Ryan.

El chico se rió.
- me sorprende que le tengas tanta confianza al que una vez quiso negarte la entrada a casa- dijo sonriendo- por cierto,  tu ropa le queda de maravilla a baby.

¿que?
Mire hacia bajo. Traía puesta una camisa blanca que terminaba al comienzo de mis muslos,  y unas bragas negras.

Que vergüenza.
Alce mi vista a Ryan, el cual  sonreía.

- me tengo que ir- dijo Ryan.

- no. No  me dejes con él- suplique.

El chico se hacerco y acaricio mi rostro.

- me llamo reident, soy el líder de la familia cirzerts... Tu rey- dijo.

Un dolor muy agudo me golpeo en la cabeza, por lo cual grité. Ryan me  levanto en brazos y apartó del tal reident.

- no comprendo por que la buscan, esta limpia, aun que no puedo leer o borrar su memoria- le escuche decir a reydent.

Ryan en poso en un pequeño mueble, y se puso en cuclillas frente a mi, me miraba fijamente, como buscando algo que ocultara.

En eso se levantó y salió de allí, dejandome sola con ese chico.




Elizaved....

Ya hacia varias horas que había dejado a Daniel en el estudio de reydent, me preocupa, sé que él es nuestro líder y que tienen mas de doscientos mil años, pero todavía se comporta tal y como luce, como un adolescente, hasta Ryan parece algunos años mayor que él.

Temo que le haga algo a ella,  al igual que Ryan es mujeriego, no me sorprendería si tratara de insinuarsele a Daniel, y con lo ingenua e inocente, también temo al igual que sirey de que se aprovechen de ella.

La ansiedad no me deja hací que me dirigí a su habitación, toque la puerta, pero nadie abría. El miedo se apodero de mi.

En ese momento la veo salir mojada de su habitación, mi corazón salta.

Ella me sonríe.

-¿ por que estas mojada?- pregunté.

- me acabo de bañar- dice sonriente.

- ¿ como te fue?- pregunto.

- no quiero volver allí, ese tal reydent me da miedo. Me hizo muchas preguntas. Pero también me....- sus ojos se llenaron de lágrimas- me dijo que ustedes me consideraban un completa estorbo y una carga patética.

Me hacerque a ella y la abraza fuertemente.
- no es así... Bueno, al principio todos lo creían, hasta tu amado zac.... Pero luego te convertiste en nuestra bebe. Y a sirey le encanta tenerte, te considera una pequeña, su hija... Aun que creo que los chicos no te ven solo como una bebe, ni como una hermana, es algo mas.

Me aparté de ella y la vi sonreír. Al parecer se había perdido en sus pensamientos.

- esa mirada no me gusta ¿quien es?- pregunte, algo me decía que ella tampoco los vehia de esa manera.
 

Ella alzo la vista hacia mi, se había sonrojado, le queda bien, aun que no me ha gustado el gesto... Hay alguien.

- no se de que hablas- dijo, vaya es tan mala para mentir. Le vendrían bien que milo de clases, el es experto en eso.

- No me engañas - le digo, bajo la vista a sus manos y algo me llama la atención

-¿ eso no es de Ryan?- pregunto.

Ella baja su vista y asiente.
Esto no le va ha gustar a sirey, y menos si es de su hermano, ella lo conoce ala perfección.
Pero quiero saber quien la tiene así, y una idea que jamas a podido funcionar resuena en mi cabeza. Ya se como conocernos mas,  viaje de compras.

Espera no tengo dinero...pero se quien lo tiene.

-Daniel ¿ te gustaría ir de compras?- pregunte, ella asiente de inmediato.

- pero tengo que entregarle esto a Ryan. ¿sabes en donde esta?- preguntó.

Perfecto...

- si, vamos yo te llevo- dije, esto sera perfecto, obtendré lo que quiero y aun mas....

Mas...



TRAS TU SOMBRA. un rastro difícil de seguir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora