No me lo digas, porque duele

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Cuando Mark decidió dar una vuelta por el edificio, la tarde del sábado, Jeno decidió acompañarlo, pues no tenía nada mejor que hacer. Aunque Renjun hubiese perdido un cliente, aún tenía mucho trabajo que hacer durante el fin de semana y, sin él en el apartamento para molestarlo- o viceversa- El rubio se aburría mucho.

- Entonces, ¿ha empezado a gustarte?- preguntó Mark, llevándose una de las galletas hechas a mano por los exploradores, a la boca.

- Ya no te quejas tanto de él como antes- añadió Doyoung.

Jeno miró al médico de pelo naranja.

- ¿Por qué está aquí?

El trío estaba en el tejado, en la piscina que había en todo lo alto, que ofrecía vistas a toda la ciudad y que se abría en los meses de verano y primavera. Sin embargo, a finales de octubre ya no había nadie para darse un baño, pues todos esperarían hasta mediados de marzo para hacerlo.

- Por el mismo motivo que tú, cariño- contestó él, robándole una galleta a Mark. Las protestas de éste se convirtieron en un gruñido vago, dado que sus mofletes parecían los de un hámster, llenos de comida- Porque no hay nada que hacer.

Jeno estaba muy excitado por los planes que tenía para esa noche. No iba a beber hasta desmayarse, pero eso no significaba que no fuera a pasárselo bien. Además, había convencido a Mark para salir con ellos y estaba deseando ver cómo se comportaba habiendo bebido. Baek había prometido ser el conductor sobrio; la idea de estas con tres chicos sexys durante toda la noche era motivo más que suficiente para llevarlos en coche a donde quisieran.

- ¿A qué viene la ropa de Jisung?- preguntó Jeno a Doyoung, después de haber visto al joven vestido con algo que no era en absoluto apropiado para una tarde como ésa.

- ¿Qué le ocurre?

- ¿No es algo exagerado para un niño de su edad?

Mark examinó la caja de galletas.

- Es cosa de Jaehyung, que es un tonto. Después de que sus padres se separasen, ha dejado que Jisung haga lo que le dé la gana, porque no quiere que lo odie a él también- entonces, metió la cabeza en la caja, llenándose de migas.

- Eso es ridículo- murmuró Jeno, mirando a la ciudad- Así sólo conseguirá que se convierta en un engreído y se culpará por ello- en realidad, le preocupaba bastante que eso ocurriera; esa clase de vida no estaba hecha para alguien tan fuerte e inteligente como Jisung.

Dongyoung sonrió.

- Hablas como si fueras el indicado para aclararles las cosas, ¿eh?- se acercó a ellos- Hablando de Jaehyung, acabo de verlo yendo con un ramo de flores, hacia el tercer piso- entrecerró los ojos de manera sugerente- y todos sabemos a dónde iba, ¿verdad?

- Yo no. ¿A dónde?- Preguntó Jeno, mirando a las personas mejor informadas de NCT.

Mark sonrió y agitó las piernas.

- Jaehyung está muy enamorado de la Sicheng Hyung. Siempre intenta que salga con él- el joven enrolló un mechó de su pelo rubio en el dedo índice- Y es muy triste, porque a Sicheng también le gusta, pero está muy… ¡acomplejado, ésa es la palabra! Cree que no es guapo.

Jeno apartó la vista.

- Será porque no tiene espejos- una de las ventajas de no ser romántico era que podía adivinar perfectamente cuándo la gente que lo rodeaba decía tonterías. ¿WinWin acomplejado? Si podía ser un puto modelo- Por cierto, para ser unos cotillas, saben muy pocas cosas en lo que respecta a Renjun- sí, el verdadero motivo por el que iba a pasar la tarde con ellos era para que le ayudasen a resolver el misterio que rodeaba la vida del Huang, pero resultó ser que ellos sabían menos que Él.

Muse (NoRen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora