Why did I have to love him? | Kaisoo

Capítulo 9

Otra mañana teniendo que despertarme a las siete de la mañana para practicar. Salgo de la habitación de Lay en mi pijama negro con el borde decorado por una ballena, merchandising de nuestro propio grupo que el dueño del cuarto tenía en uno de sus cajones. La cara de cabreo que tengo antes de tomarme el primer café del día hace que nadie quiera hablarme, lo cuál agradezco porque por la noche me deshidrato demasiado y tengo la boca seca y pegajosa.

No me molesto en maquillarme después de desayunar. Sólo me embuto en uno de mis chándales compuesto por una chaqueta con capucha grande que cubre casi toda mi cabeza. Pillo uno de los cubre-bocas del cajón y espero bostezando en la puerta de entrada.

Sehun aparece minutos después, supongo que cómo ya no está Luhan para distraerle tarda poco en prepararse. Yixing le sigue. Mira hacia los lados, dando los buenos días a Sehun. Carga una mochila en su hombro en la que tendrá la ropa de deporte, porque lo que lleva puesto son unos vaqueros rotos y una chaqueta.

-No creo que haya ningunas cámaras a estas horas, Lay -comenta Sehun-. Y tampoco creo que les importe que lleves ropa de deporte.

Lay se ríe por debajo de su mascarilla y asiente.

-Lo sé pero cuando me he despertado esto ha sido lo primero que tenía a mano... Así que luego me he acordado de que tenía que llevar esta ropa y no me apetecía cambiarme.

Sacudo la cabeza y doy un paso acercándome a él. Le subo la cremallera hasta la nariz casi.

-Vas a coger un resfriado.

-Puede. ¿Qué tocas tú? Estamos en público enano, aguanta las ganas. -Bromea a la vez que mira hacia mis manos y agarra una, bajándose de nuevo la cremallera, mostrándome que no lleva camiseta debajo antes de subirla hasta el punto dónde la dejé. Vuelve a echar un vistazo alrededor nuestro y hace descender la tela que esconde nuestras bocas, sosteniendo mi barbilla con lentitud antes de unirnos en un corto beso. Le correspondo pero soy yo el que se aparta, abriendo la puerta que dirige al ascensor.

-No lo vuelvas a hacer con alguien presente -ordeno cubriéndome lleno de vergüenza y pidiendo disculpas a Sehun con los ojos.

Nuestro coreógrafo calcula bien la hora justa para dejarnos descansar a la hora en la que siempre comemos. Esta vez decidimos meternos al cuerpo un simple bocadillo en la cafetería de la misma planta. La joven camarera también nos saca una gran tarta para todos, aunque sobra bastante porque la mayoría de nuestros miembros se siente mal después de ingerir tanto dulce.

-Dodo... -Escucho la voz de Kai antes de que este me tire del brazo hasta la sala de grabaciones-. Necesito tu ayuda... Eres uno de los mejores vocalistas que conozco... Ayúdame, quiero mejorar mis agudos. He estado viendo directos y un tal Park alcanza unos que parece imposible.

Me río, no lo puedo evitar.

-Kai, no puedes cambiar tu tono de voz, él podrá llegar a agudos sí, pero seguro que no a los graves que tu haces... ¿Baila igual de bien que tú?

-Por favor...

-No soy profesor de canto... No sé cómo hacerlo Jongin. -Me niego a estar solos, si él me mira fijamente cómo lo está haciendo ahora no podré cantar, a penas puedo hablar con él, mi voz no saldría y lo poco que se llegase a escuchar sería demasiado tembloroso.

-Lo sé pero cuando te oigo cantar no puedo dar una nota que no sea la que estás cantando tú, creo que eso podría ayudar, aunque sea por imitación, creo que podríamos trabajarlo. El otro día te escuché cantando 'What is love?', cantaré la parte de Byun, vamos. -Se sienta antes de reproducir sólo el instrumental de esta.

Expiro lentamente, intentando relajarme.

-Está bien. -Me siento a su lado aceptando lo que desea-. Pero te recomiendo que pongas la voz de Baekhyun, intenta, sólo intenta, no fuerces la voz, llegar a la nota más cercana respecto a las de Baekhyun.

-De acuerdo.

Yixing me envía un mensaje después de una hora preguntándome dónde estoy. Y otras cuantos minutos más tarde se presenta en la sala, ya duchado por lo que parece.

-Kai te cogo prestado a tu profesor, mañana seguís -anuncia sonriendo. No le hago ninguna pregunta, la verdad es que ya estaba cansado de estar todo el santo día metido en ese edificio, hasta que llegamos al apartamento y me pide que me cambie de ropa.

-¿Dónde vamos? -cuestiono para poder elegir algo apropiado.

-A un concierto, BIBGANG, Taeyang va a cantar una canción inédita. Sé que amas su voz y siempre le has tenido de referencia.

Los asientos en los que estamos son VIP, y no siento ningún reparo esta vez en levantarme para aplaudir con todas mis ganas y cantar las canciones aquellas canciones del álbum que me sabía de memoria. Yixing me apoyaba, no se reía de mí cuando me veía emocionarme cuál fan cuándo las letras más tristes llegaban. Nos reímos muchísimo cuándo le dimos una sorpresa al grupo colándonos en el backstage sin que nos viese nadie. Teníamos pase y es técnicamente legal hacerlo pero Lay quería que nadie lo supiese porque no había mensajeando a Jiyong diciéndole que asistiríamos. Yixing hace que te sientas más joven con el carácter tan brillante que tiene. Diría que podría contagiar su sonrisa sincera a la persona más deprimida de este mundo.

Cenamos rápido en su propia habitación cuando llegamos a las tantas de la mañana y me caigo desamayado encima de su cama. Ha sido un día agotador pero genial, aunque me cueste admitirlo porque nunca iría a un concierto por mi cuenta, no me gustan tantos las aglomeraciones de gente cómo parece, las fiestas y todo eso no son mi fuerte, con Lay no es que haya cambiado de punto de vista, pero no es tan desastroso cómo en situaciones anteriores.

-Deberías sonreír más, Kyungsoo. Juro que nunca te había visto reir -dice en un ritmo melódico cuándo los rayos del sol inciden directo en mi cara. Me he tenido que levantar a bajar un poco la persiana.

-Aunque no lo haga lo hago en mi mente -murmuro acariciándole el pelo. Ahora los bordes de este están más recortados que el centro, cuando les iba a tocar no creía que estuviesen tan suaves, es cómo acariciar a un pequeño gato de estos que no tienen tanto pelaje cómo los demás, a esto se suma a los sonidos que salen de la boca de Yixing, propios también de un gato.

-Ya veo. -Asiente pensativo antes de pasar dos dedos por encima del borde de la única prenda con la que he dormido, mis calzoncillos. Se inclina para dejar unos besos en mis pezones y le da un ligero apretón a mi entrepierna-. ¿También gimes en tu mente, Kyungsoo?