Sell Boys

Capítulo 33.

La luz matutina de la mayana entraba por la ventana de aquella habitación, al pequeño chico Akio le molestaba esa luz. se removió un poco mientras bostezaba y despertaba poco a poco. Abrazó con mayor fuerza a lo que sea que tuviera al lado suyo, parecía ser una persona. Seguía dormido, no sabía que o quien estaba a su lado. Se separó de lo que fuera que estuviera abrazando y se sentó en la cama, posando su mano en el tabique de su nariz, empezaba a sentirse mareado. El suelo empezó a moverse, de un lado a otro. Todo se movía, empezaba a ver las cosas dobles. Algo lo hizo volver a la realidad, alguien había puesto una mano sobre su hombro. Giró su cabeza para ver quien era el propietario de aquella mano, sonrió levemente al ver que era Kirt, se le notaba preocupado.

-- ¿Estás bien? --  Lo abrazó levemente y con mucho cariño pegandolo a su pecho. El pequeño chico asintió aún con su radiante sonrisa formada en sus labios.

-- Sí, sólo estaba un poco mareado -- Se giró y abrazó con levedad y cariño al chico junto suyo, lo abrazaba com levedad, para luego ir aumentando la fuerza poco a poco. Hasta ek punto de abrazarlo con demasiada fuerza, empezaba a impedir y cortar un poco la respiración de Akio.

-- Deben ser cosas normales de estar embarazado -- Aquella felicidad desapareció, empezó a sentirse mal. Su sonrisa empezó a borrarse lentamente hasta que quedara una expresión nula, sin expresión. Se separó del chico, sentandose en el borde de la cama mirando de forma desanimada al suelo. Esto empezó a preocupar a Kirt,golpeó su cabeza insultandose levemente para luego acercarse a Akio, le miraba de cerca preocupado, no sabía que le pasaba así que simplemente preguntó.

-- ¿Qué pasa? -- Las lágrimas de Akio empezaban a caer por sus mejillas, estaba recordando todo lo pasado en su viaje, recordar lo mucho que le dolió aquel trato frio que le brindó Kirt. Todo esto le dolía y por esto mismo lloraba. Sintió unos brazos rodearle con fuerza, pegando su cabeza al pecho del chico siguió llorando, quería desahogarse. No había llorado eb todo ese tiempo y vaya que lo necesitaba.

-- Perdon... -- Susurró levemente Kirt mientras besava con cariño la cabeza de aquel indefenso dolcel, empezó a cariciar la cabeza de este mientras tarareaba una suave y tranquilizante canción.

Akio se aferró con mayor fuerza a la camisa de Kirt, pegandose más al cuerpo de este y llorando cada vez más fuerte. Necesitaba sacarlo todo. Pasaron los minutos y Akio seguía llorando, Kirt no dejaba de acariciarle la cabeza y tararear aquella suave canción.  Era una canción de cuna, la tarareaba para intentar calmarlo y siguió así hasta que logró calmarlo. Akio se separó levemente y se acercó a los lanios de Kirt, plantando un suave y cariñoso en beso en estos. Kirt se sorprendió bastante por aquel acto, se quedó paralizado para luego empezar a corresponder, el menor empezó a acariciar el cabello de Kirt sin separarse del beso, un leve sonrojo empezaba a plantarse en sus mejillas mientras su corazón empezaba a acelerarse, se sentía feliz ya echaba de menos este tipo de actos con Kirt. Con la persona que tanto ama.