Capítulo 40.

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Pasaban las horas, y comforme estas aumentaban la desesperación de Kirt igual, el doctor le pidió que esperara todo lo necesario pero sentía que terminaría perdiendo la cordura, en cuanto se veía que todo tardaría demasiado Will y su novio decidieron irse. Se levantó de la silla donde estaba y empezó a caminar de un lado a otro intentado calmar sus ansias. En el caso de que Akio fuera una chica dejarían que Kirt estuviera presente en el nacimiento de su hijo pero al ser un Doncel las cosas son distintas, principalmente porque debían hacerle una especie de examenes al bebé, aquellas pruebas serían principalmente para comprobar su estado de salud, que todo haya salido bien en el parto, además para saber de antemano si aquel bebé es Doncel o no.

Se levantó al oir los pasos de una persona, sonrió bastante alegre y suspiró mucho más tranquilo. Sabiendo que ese bebé es el nieto de aquel doctor pensaba que al menos se le notaría más feliz pero era todo lo contrario, parecía estar preocupado e incluso un poco triste.

-- Todo salió bien... el bebé está sano. Puedes pasar a verlos, te llevaré hasta la habitación en la que se encuentran. --

Asintió con la cabeza y ambos empezaron a caminar por los pasillos del hospital, al llegar a la habitación el docor hizo una leve señal para indicar que esta era la habitación donde se encontraban Akio y su hijo. Kirt asintió y el doctor se fue, por más que quisiera estar cerca de su hijo en estos momentos debía continuar con su trabajo.

Kirt caminó con lentitud hasta la cama, allí estaba Akio dormido, junto a la cama había una pequeña cuna donde se encontraba el bebé. Se acercó a la cuna para ver a su pequeño, era un niño, era demasiado pequeño a los ojos de Kirt pero era bastante normal para ser un recién nacido, tenía sus ojos cerrados ya que estaba dormido, estaba cubierto por una pequeña manta de color azul con unas estrellas amarillas. Sonrió levemente y se giró a ver a Akio, se apoyó con levedad en la cama y besó suavemente la cabeza de este. se recostó a su lado abrazandolo con levedad y pegandolo a su pecho, aquel chico se acomodó mejor en los brazos de este correspondiendo el abrazo, soltó una leve sonrisa mientras continuaba dormido.


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El rubio salía del baño con una toalla rodeando su cintura mientras suspiraba y pasaba sus dedos entre sus cabellos. Miró hacia el techo un poco desesperado, habían abandonado el hospital gracias a la insistencia de Will, no habían comido nada, ninguno de los dos había tomado un baño, tenía razón que era mejor que fueran a casa y luego regresaran pero no podía soportar dejar así a su amigo, no ha sabido nada de Akio desde que se fueron. Le dominaba la intriga por saber cual era el estado actual de su amigo. 

Escuchó como su celular empezaba a sonar, caminó hasta este y contestó la llamada al instante al notar que era su madre quien lo llamaba.  Hablaron por unos minutos, su madre le preguntó que cuando iría a visitarlos, pues ahora vivía con Will. Con permiso y concentimiento de estos, obviamente. Sus padres aceptaban que fuera novio de Will, con tal de que su hijo fuera feliz ellos estaban bien con ello. Dejó su movil sobre la mesa que había allí y caminó hasta el armario para buscar algo que ponerse .

Will estaba en la cocina preparando algo de comer para ambos, él se había adelantado a Drac y tomó un baño desde que llegaron, con un poco de insistencia logró que el rubio durmiera un poco más.

-- ¡Wiiilll! -- Le grtitó el rubio mientras bajaba hasta la cocina y caminó hasta el lado de este, lo abrazó con levemente mientras sonreía. --  Tengo hambre --. Dijo mientras lo abrazaba con mayor fuerza.

Will rió con levedad y acarició los cabellos de este y lo separó un poco para luego empezar a poner lo que cocinó en dos platos y los dejó sobre la mesa, regresó hasta donde el menor y besó la cabeza de este para luego tomarlo de la mano y caminar juntos hasta la mesa, movió la silla para que le resultara más facil para el menor sentarse. Luego que se sentó volvió a acercar la silla  a la mesa. Negó con la cabeza mientras reía y fue hasta la otra silla, jamás se imaginó ser tan cursi con alguien. Suspiró alegre, era realmente feliz de que la unica persona con la que ha sido así sea este pequeño rubio.

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Despertó entre los brazos de Kirt, se sentía demasiado comodo. No quería levantarse ni moverse de donde estaba, escuchó  un leve bostezo. Por su culpa Kirt se había despertado, se terminó de despertar al oir una puerta abrirse. Se removió un poco y se estiró en el momento en que Kirt lo soltó, miró hacia la puerta y se sorprendió un poco al ver a su amigo y su novio. Miró a todos lados intentando ubicar donde se encontraba, abrió un poco más sus ojos al recordar lo que pasó, intentó acercarse rapida y bruscamente hasta la cuna pero Kirt lo detuvo.

-- Calmate... sigues debil y debes descansar -- Lo abrazó con un poco de fuerza y mucho cariño para luego besar la cabeza de este. El menor asintió con un poco de malagana y suspiró para luego recostarse nuevamente en la cama. -- Además está dormido y no hay que interrumpir su sueño -- Continuó hablando el mayor mientras se giraba con levedad a mirar la cuna con cariño. Acarició la cabeza de Akio, se levantó para recibir a sus amigos. Habló con ellos por un rato hasta que se escuchó un leve llanto, el bebé había despertado. Kirt caminó hasta él y lo tomo en brazos mientras a arrullaba y cantaba una tranquilizante canción de cuna, cuando dejó de llorar lo acercó hasta Akio, para que conociera a su hijo. El hijo de ambos, el bebé que ahora prometen cuidar y proteger con todo el cariño posible.


--------------FIN-------------

Espero que no me maten por lo que estoy por decir pero... cuando empecé a escribir el cap la idea original era que Akio o el bebé murieran durante o después del parto xD. Luego me di cuenta de que era un final demasiado cruel y que ustedes me matarían así que mejor los dejé con vida a ambos.



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