Sell Boys

Capitulo 10

Cuando el menor ya estaba vestido bajó a la sala para ver quien había tocado el timbre de la casa, que alguien fuera a ese lugar además de Kirt y él era algo que nunca había pasado, exceptuando la vez en que Kirt llevó aquella chica a casa. Queda resaltar que el menor seguía sonrojado pues no podía parar de recordar lo que Kirt y él acababan de hacer, le había gustado pero jamás iba a admitirlo ya que si lo hacia Kirt tomaría confianza y le haría cosas peores.

Cuando por fin llegó a la sala pudo ver a Kirt sentado en uno de los sofás mientras que un hombre y una mujer que aparentaban ser mucho mayores que Kirt estaban sentados en el otro sofá. Cuando Kirt giró su cabeza y vio al menor palmeó suavemente el lugar libre que había en el sofá que estaba sentado indicándole que se sentara junto a él. El menor de inmediato obedeció y se sentó junto a Kirt, su sonrojo había parado pero un nerviosismo empezó a invadirlo por la mirada fija que le daban aquellos que parecían ser los padres de Kirt.

— Y bueno, ¿a que se debe su visita?— Preguntó Kirt abrazando al menor mientras miraba fijamente a sus padres. — Oh, nada en especial solo queríamos conocer al pequeño Akio — Respondió su madre a lo cual el hombre junto a ella rodó sus ojos con clara molestia. — Ella me obligó a venir —  Dijo mirando a todos la dos de la casa — Está bastante limpio... — Resaltó intentando sacar un tema de conversación pues un silencio incomodo estaba invadiendo la casa.

— Si, Akio siempre limpia — Dijo apoyando su barbilla sobre el cabello el menor, el cual no se resistía por miedo a que los padres de Kirt lo regañaran. — Pues hace un excelente trabajo — El menor se tensó un poco por los nervios que le daba recibir aquel cumplido.

— Kirt, podrías soltarlo?... Quiero verlo más de cerca — Dijo su madre sonriendo. El mayor dudó si hacerlo o no pero al final cedió dejando de abrazar a Akio. — Ven pequeño, no voy a hacerte daño — Dijo haciéndole una señal con sus manos para que se acercara. El menor dudó si hacerlo o no, giró su cabeza hacia Kirt buscando su opinión, cuando este asintió empezó a caminar lentamente hasta donde la mujer. — Que lindo que eres — Dijo pellizcando con cariño las mejillas del menor, a lo cual el pequeño respondió sonrojándose levemente. — Aww, si que eres tierno — Dijo soltando sus mejillas y abrazándolo con fuerza.

— N-no p-puedo respirar — Se quejó aun sonrojado a lo cual la mujer la soltó casi al instante. — Perdon, perdon. Esa no era mi intención — Dijo acariciando su cabeza.

— Bueno, ya lo conociste ¿pueden irse ya?... — . Su padre negó con la cabeza y la mujer se fue con Akio a la cocina para que no escuchara la conversación de Kirt y su padre.

— Ya sabes que necesitamos que tengas un hijo que herede la fortuna familiar... — Dijo mirándolo fijamente. — Si, por eso Akio está aquí — Dijo devolviéndole la mirada. — Si... Pero parece que aquel chico no quiere tener un hijo contigo — Ante esto Kirt se puso levemente nervioso pues eso era cierto. — No, no quiere... Aún — El mayor de los dos soltó una leve risa ante el comentario de su hijo. — Ese es el problema, necesitamos ese heredero. Así que tu madre y yo planeamos pagarle a alguien para que tenga ese hijo contigo... — Al escuchar eso el mayor se levantó enfadado. — ¡No! No voy a tocar a alguien a quien no ame, y mi corazón ya se lo llevó aquel pequeño chico — El padre rió nuevamente — Pues si, pero el no te ama a ti. No puedes obligarlo a que te ame, por eso pensamos en pagarle a alguien para que tengas un hijo o hija con ese alguien... — iba a continuar hablando pero un grito que se escuchaba a lo lejos lo interrumpió.

— ¡No!, ¡No permitiré que nadie más que yo toque a Kirt! — Dijo mirando al padre de Kirt con obvio enfado. A lo que el padre asintió y se levantó caminando a la salida mientras la mujer lo seguía. — ¿Entonces estás dispuesto a tener un hijo con él? — Dijo mirándolo burlonamente.

El menor se sonrojó casi totalmente y los nervios no le permitían hablar hasta que por fin logró llenarse con la seguridad suficiente para hablar — ¡Si! — Gritó cerrando sus ojos con fuerza por la vergüenza que lo invadía. Por otro lado el mayor estaba casi muriendo por aguantar y no reírse de lo que estaba pasando. — Vale, entonces te lo encargo — Dijo el padre de Kirt saliendo de la casa junto a su esposa.

— Mm~ ¿así que estás dispuesto a tener un hijo conmigo?~ — Dijo en tono coqueto mientras caminaba hasta donde estaba el menor. Akio lo miraba totalmente rojo y temblando levemente por los nervios, cuando ro mayor llegó hasta el y lo abrazó fue que pudo reaccionar. — ¡P-pervertido! — Dijo golpeándole la barbilla haciendo que lo soltara para ir a su habitación totalmente rojo y enfadado. El mayor rió fuertemente para luego caminar tras del menor