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-Laur pon música ¡Quiero bailar!

- Pero yo no sé bailar...

-Aghh seguro que si. Venga.- Camila se había emocionado con las cervezas. Bueno, en realidad había tomado las mismas que Lauren pero a la morena el alcohol le afectaba más. Y vaya si le afectaba, había perdido la vergüenza.

Lauren fue a los altavoces y puso 7/11 de Beyoncé. Camila saltó del sofá y se abalanzó sobre Lauren entre risas e hipo. El alcohol había hecho efecto.

-Laur... ¡Enséñame a boxear!- Camila corrió hacia el saco del que se colgó como si fuese un Koala. Lauren le pedía que bajase y que era mejor irse a dormir pero Camila insistía. Era tal el empeño en aprender a boxear de la morena que a Lauren no le quedó más remedio que darle una pequeña clase.

- Es tarde... ¿No es mejor ir a la cama?

-Eso lo diré yo... Vengaaa ¡Enséñame como pegas al saco!

Lauren suspiró mirando al techo pero cedió. No se podía resistir a esa sonrisa. Se colocó los guantes y comenzó a pegarle al saco mientras le explicaba de Camila como colocar los pies y los brazos. Camila apenas se podía mantener de pie, lo que a Lauren en parte le hacía gracia. Después de demostrarle lo básico en el deporte, le puso los guantes a Camila, se puso detrás suya y le iba colocando los brazos.

- La espalda más erguida y el culo más atrás.- Y Camila siguió las instrucciones de su profesora. Estaba agusto, tan agusto que la música seguía sonando y con la canción de Back to You de Bebe Rexha y Louis Tomlinson, Camila se pegó a Lauren y sin parar de reír frotaba su cuerpo al de la chica.

-Camz ¿Qué haces?-Dijo Lauren con una sonrisa nerviosa, con sus manos en las caderas de la morena intentándola separar pero ¿De verdad quería separarla?

- Huel...hue...les tttan bien. Estaría ttodo elll día oliéndote. Me encantas.- Camila se giró y enrolló su brazos en el cuello de Lauren, pone su cabeza en el cuello de esta y respira.- Lauren...

Lauren estaba atónita con lo que estaba sucediendo. Por un lado no quería aprovecharse de Camila, no estaba en sus plenas facultades pero por otro lado se moría por la forma en la que Camila jugaba con los dedos en su nuca o por como se mordía el labio con una sonrisa.

-Camila tienes que meterte en la cama. No estás bien.- Se apartó y fue a apagar la música. La fiesta se había acabado.

-Creéme nunca estuve tan bien...-Le susurró en el oído consiguiendo poner de punta todos los pelos de la boxeadora.

Si fuese otra chica, ya la hubiese puesto encima de la cama, la hubiese desnudado y hubiese pasado una buena noche pero con Camila no le salía eso. ¿Por qué? Pues porque ahora el corazón sólo le pedía protegerla y cuidarla, respetarla y no aprovecharse de ella. Lauren sabía que una noche con cualquier chica traía una mañana vacía y ella no quería eso con Camila porque para ella, Camila no era una chica cualquiera.

-Venga Camila a la cama.- Lauren levantó a la chica por la cintura y esta se enganchó a su cuerpo .

- Lauren... Bésame. Quiero saber que se siente. Me muero de ganas...- La boca de Camila estaba muy cerca de la de Lauren, podía notar su aliento a cerveza. Para sujetar mejor el pequeño cuerpo de Camila, puso sus manos en sus glúteos y la miró ¿De verdad le pidió que la besase?

- No Camila estás borracha.- La llevó a la cama y la acostó para luego arroparla. Aunque Camila había adoptado una postura infantil. Tenía sus brazos cruzados y con el ceño fruncido.

-Queeee...

-Dame un beso de buenas noches. Sólo eso.

Lauren se sentó en la cama, al lado de Camila y la miró con resignación.

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