~ Escrito sobre tu piel ~

Sin ti (2)

POV Lucie.

— ¿Podrías por el amor de Dios decirme que fue lo que sucedió? — Musitó Shep.

Su mejor amiga la miraba tan enojada que desde lejos podía notarse, se sentíavacía, ese sentimiento de abandono la hacíasentirsepésimo, lo único que sabía es que era lo necesario para ella salir a flote. No podía estar más con él. Con Kai el dolor de su corazón hacia que las cenizas se redujeran a nada. De pronto las lágrimas comenzaron a salir inevitablemente, era irresistible dejar de lado ese sentimiento, ese vacío que gobernaba dentro de ella, los brazos de su mejor amiga se encontraban rodeándola, pero no los quería, no eran los brazos que ella quería para que le dieran calor, no quería sentir esto dentro de ella, no lo aceptaba, quería los de Kai, quería que fueran los brazos de él arropando su cuerpo y diciéndole que todo estaba bien, que estaría con ella a toda costa, pero no estaba ahí, no lo estaba ni lo estará, porque ellos habían terminado, ellos y su relación no eran más que polvo esparcido, algo que se disuelve para nunca más volver.

¿Porque había jugado con ella?

Todo por el vil dinero

¿Porque siempre tenía que ser el dinero?

¿Porque no podía ser feliz?

Su corazón latía desenfrenadamente y su mente luchaba por disipar ese dolor el que estáahí, el que se mantiene en un lugar donde no lo quieren, con solo imaginar un mundo en donde Kai no estuviera, de solo pensar en su nombre le hacía sentirse débil, sin fueras y, sobre todo, desanimada. Necesitaba un momento a solas, tenía que respirar hondo y dejar salir... nuevamente todo lo que poseía dentro.

—Por favor... ¿Puedes irte?

No quería decirlo pero era necesario, los vidrios de su oficina se empañaron evitando así que alguien mirara de otro lado, después de algunos momentos no sintió mas los brazos de su mejor amiga y el sonido de la puerta cerrándose acalló sus pensamientos, lo preferíaasí, ahogarse sola y no dejar que nadie entre en ese espacio que era solo suyo, el dolor, laúnica manera de tener a Kai en su mente, porque estaba segura de que de su corazón no se iría, sabía que lo único que haría era torturarse por solo el hecho de seguir recordándolo, pero tampoco podía seguir estancada.

Mantenía mucho trabajo que hacer, por lo tanto sorbio su nariz y paso el antebrazo por sus ojos evitando así que más lagrimas se acumularan, sus manos continuaron con el vaivén entre letras y números y como de un robot se tratase,siguió con su trabajo, como si fuese lo más normal del mundo venir, aun sabiendo que la noche anterior fue una de sus peores, sin dejar de lado las atrocidades de las palabras que ya le dijo su padre, que era uno más y sobre todo que no debe ser tan ingenua.

—Lucie... aquí están los expedientes de los próximos estrenos, debes enseñárselos a Don Miguel... pero si quieres puedes después hablar con él. —Bufo Kate.

La chica, levantó una ceja viendo a su secretaria entrar sin tocar, podía jurar que la puerta estaba cerrada, alzo la mirada escuchando cada palabra que salía de su boca, por un momento le causo gracia, los ojos de Kate fueron cambiando con forme hablaba, su cuerpo se volviórígido y sus manos las que tenían un tic nervioso se juntaron y cada dedo comenzó a tronar.

Era extraño que Kate se preocupara por ella y se pusiera nerviosa, ella no era así y creía que algo tan fácil como lo era hablar se le haga tan difícil. No eran enemigas después de todo. La mirada de Kate era preocupante, aunque no le interesaba en lo absoluto, tal vez era algo que quería desde el fondo.