Soy Piper Chapman, estudiante del último año de psicología.
Ella es Alexandra Vause y es la novia de mi hermano, Cal.
¿Algo peor que tener a la tentación al alcance de tus manos?
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Desperté con una enorme jaqueca y sentía que mi cuerpo pesaba más de mis 55 kilos, mi habitación aún seguía a oscuras y en la casa estaba en un profundo silencio… Hasta que sonó mi celular, era Polly. -Piper ¿dónde te metiste anoche? -fruncí el ceño. -Querrás decir ¿dónde te metiste tú y Larry? Los estuve buscando, pero nunca los encontré. -Te aseguro que no querrás saber dónde estábamos -ya me lo había pensado- pero luego de eso, te buscamos y no estabas por ningún lado. -Decidí venirme a casa, tú y Larry estaban muy entretenidos y Nichols se me perdió, la mejor opción era irme. -Lo siento -se disculpó- sólo quería pasarla bien. -No pasa nada Polly, me alegra que al menos ustedes la hayan pasado bien. Me despedí de mi amiga luego de tranquilizarla y fui a la cocina a prepararme un té, la jaqueca era tremenda.
Cal me había dejado una nota en la nevera. Fuimos por algo de comer, te quiero mocosa. Sonreí, pero mi sonrisa se borró cuando recordé lo que había pasado hace unas horas, ¿por qué me molestaba tanto el hecho de saber que estaban teniendo relaciones? Eso hacían los novios, hasta yo lo hacía sin tener novia. Estaba intentando bloquear todos los sentimientos que me demostraran que de verdad estaba interesada en Alex de otra manera, que me importaba y que yo también la quería en mi cama, escuché las llaves, eran ellos. -Hola dormilona -me saludó Cal, traía pizza, oh sí, le sonreí. -Hola -miré a Alex, cuando nuestras miradas se encontraron la sentí apenada, eso no lo veía ni lo sentía en Cal. -Hola Piper -comenzó a buscar los platos y a poner la mesa, la ayudé con el resto mientras Cal se sentaba y se preparaba para comer. -¿Cómo va esa resaca? -preguntó Cal, la pizza estaba riquísima y estaba enormemente agradecida con él por haberla traído. -Lo peor es que nunca estuve borracha del todo, pero va bien -reímos, Alex ignoraba todo lo que pasaba a su alrededor- ¿estás bien? -le pregunté acariciándole el ante brazo, miro mi mano y luego a mí. -Sí claro, sólo estoy distraída. -Todo el día, en realidad -Cal dio un sorbo a su bebida, quise saber el por qué Alex estaba así ¿debía intuirlo? Podría ser que, si se sintiera apenada por haberlos escuchado, pero no tenía demasiada importancia o al menos intentaba no dársela, al fin y al cabo, ellos eran adultos y podían hacer lo que quisieran. -Que idiota eres Cal -le lancé una bola de servilleta, él se encogió de hombros. -¿Yo qué? -Ni te atrevas a preguntarme porque eres un idiota -a veces olvidaba lo poco detallista que era Cal con las cosas que pasaban a su alrededor, debía por lo menos haberle preguntado a Alex que pasaba con ella, era su novia y debía mostrarle interés.
Terminamos de comer y fui a mi habitación, mañana tenía que retomar mi rutina y lo que menos me gustaba de esa rutina era mi ida al trabajo, tal vez si debía pensar más sobre mi tranquilidad y paz mental, ninguna cantidad de dinero puede comprar eso. Reordené mis pensamientos y pensé en Nichols, me sentía mal por ella y a la vez estúpida por importarme demasiado, sabía el riesgo que podía llevar eso si se ingería más de la cuenta. -¿Puedo pasar? -Alex interrumpió mis pensamientos. -Claro Alex, eres bienvenida. Me miró nuevamente apenada y se sentó en mi cama, le hice compañía. -Quería pedirte disculpas por lo que paso hace unas horas -intenté fingir demencia- la verdad he estado súper apenada contigo, me da vergüenza mirarte a la cara. -Cariño -puse mi mano sobre la de ella- tú y Cal son adultos y pueden hacer lo que ustedes quieran con sus vidas ¿quién soy para criticarles? -le guiñé el ojo cuando nuestras miradas se encontraron- A parte, estaban haciendo lo más delicioso del mundo, tirar -ella se sonrojó y yo me reí- de verdad no te preocupes. -Después de oír el golpe en la pared, no pude continuar con lo que ya estaba haciendo, pero Cal le restó importancia y dijo que tú no dirías nada. -Y así fue, si no me hubieras comentado esto yo jamás te lo hubiese hecho saber. Ya no importa, la verdad. -Gracias -me abrazó sorpresivamente, el olor de Alex llegó a mis fosas nasales, olía delicioso, cerré los ojos disfrutándolo hasta que ella se soltó del abrazo. -De nada -volví a la realidad donde ella, seguía siendo la novia de mi hermano. -¿Me vas a contar como te fue en la fiesta? -se incorporó en mi cama, hice lo mismo. -Nada relevante, bailar y beber. -¿Sabes algo Piper? -fruncí el ceño- A veces siento que te cierras demasiadas oportunidades por vivir aquí con Cal. -¿A qué te refieres? -Eres joven, podrías vivir todos los días de parranda, podrías hacer lo que quisieras con tu vida. Tan sólo tienes veintidós años y eso es toda una vida por delante. Pensé por un momento en lo que acababa de escuchar, quizás estaba en lo cierto, pero también era cierto que yo me sentía bien, así como estaba y no quería cambiarlo. -Estoy bien así Alex. Siento que he vivido lo que he tenido que vivir y realmente no me divierte para nada esas cosas que hacen mayormente las personas de mi edad, no si no tengo ganas. Anoche tenía ganas de ir a la fiesta y eso hice, si no las hubiese tenido, me ahorro la ida. -Yo creo que todos los jóvenes dicen eso porque realmente no les importa lo que viven, sólo hacen eso, vivir. -Mira -sus manos reposaban sobre sus muslos, las apreté contra las mías- estoy bien, en serio. Me siento bien al tener la libertad de escoger lo que quiero o no en mi vida, ya sea una fiesta, una comida, una persona o una decisión. -Que mentirosa eres -me dijo riendo, ya había vuelto su buen humor- si tuvieras la libertad de escoger lo que quieres o no, hubieras dejado ese trabajo. La odie un momento por tener tanta razón. -Ok, sólo porque tienes razón y para callarte la boca, mañana mismo renuncio -ambas sonreímos y vimos nuestras manos juntas aún, sentía la buena vibra que tenía. -Siempre la tuve, pero quería que te dieras cuenta por ti misma -me guiñó el ojo y se soltó de mis manos bajando la mirada apenada. _________________________________________ Holaaa:3, primero quiero agradecerles enormemente porque leer, ya casi somos 1000views y eso me hace feliz y me motiva a seguir escribiendo para ustedes. Segundo, están pasando cosas en el mundo que nos hacen estar alerta, ayer tembló en México, Estados Unidos, Cuba, Puerto Rico y otros países están en riesgo de algún desastre natural, el mundo los está hablando de alguna forma u otra y no queremos entenderlo, es hora de hacerlo. Cuídense mucho las personas que me leen y son de algunos de esos países que están en riesgo, en mi país, hace poco tembló, 4.5, el más fuerte hasta ahora y ha sido la primera vez que lo sentí, fue horrible, también unas zonas de acá, han tenido inundaciones por las fuertes lluvias y todo está destruido. Piensen y actúen ante lo que el mundo nos quiere decir, kisses, gracias por leer y que disfruten el capítulo.
