Enamorada de la novia de mi hermano {VAUSEMAN, TERMINADA}

Sin límites.

Dormí toda la tarde, cuando desperté Cal no estaba en casa y me pareció extraño, él no llegaba tarde, revisé mi celular y tenía un mensaje, era él, llevaría a Alex al cine. Prepare algo para cenar y deje algo para Cal, quizás comería, quizás no.
Debía hacer una tarea para la próxima semana, era de la psicopatología, estaba muy emocionada porque el semestre estaba terminando, pero también me sentía triste porque terminaría esta etapa de mi vida, no sabía lo que podía venir después, si pudiera pedir un deseo, desearía que mis padres estuvieran el día de mi graduación.

FLASHBACK.

-Piper cariño, la cena está lista -estaba terminando de ponerme el pijama para bajar a cenar.
-Hola princesa -me dijo mi papá al verme, me acerqué a él y lo abracé, olía a cigarrillo y a su perfume, era una mezcla extraña- ¿cómo te ha ido hoy en el colegio?
-Bien papá, gracias -le sonreí- ¿y a ustedes? -mamá había terminado de traer la charola de la comida.
-Muy bien cariño -respondieron los dos al unísono.
-Cal quedó en venir -papá miró el reloj- ya debería estar por llegar -escuchamos la puerta, corrí a la entrada y allí estaba mi hermano, deshaciendo el nudo de su corbata, me lancé sobre él.
-Mocoso -lo abracé muy fuerte, se tambaleo, pero me abrazo con tanta fuerza que me costaba respirar.
-Hola mocosa -beso mis mejillas.
-Me alegra verte -caminamos hacía el comedor, su puesto en la mesa estaba a mi lado.
-Hola familia.
Cenamos y hablamos de nuestras cosas, Cal nos estaba comentando que había comprado un nuevo departamento a unas cuantas manzanas de aquí, me emocioné.
-Felicidades hijo, estamos muy orgullosos de ti -mi papá lo felicitó, Cal era muy parecido a él físicamente, sentimentalmente era como mamá, muy sensible y amoroso, estaba muy feliz de formar parte de esta familia, amaba ser una Chapman.
-Princesa ¿por qué lloras? -mi mamá se acercó y me abrazó muy fuerte- ¿Qué ha pasado?
-Nada mami -le sonreí con mi cabeza en su pecho- sólo los he visto y no puedo creer que forme parte de esta familia.
Cal y mi papá se unieron al abrazo mientras me llenaban de besos, esa noche le pedí a Cal que se quedará a dormir conmigo.

-Buenas noches mocosa -me dio un tierno beso en la mejilla mientras me pegaba a su pecho.
-Feliz noche mocoso, te quiero.
Y en aquel silencio, con una sonrisa en mis labios, me dormí.

Decidí dejar de pensar en aquellos recuerdos que eran muy lindos, los atesoraría por siempre en mi corazón y saber que no habría más de esos recuerdos junto a mis papás, me daban ganas de llorar. Fui por una taza de café y escuche llegar a Cal junto a Alex, se me estaba haciendo costumbre verla en casa.
-Hola mocosa -puso sus cosas sobre la mesa y fue a saludarme.
-Hola Cal -le sonreí correspondiéndole- ¿qué tal el cine?
-Muy bueno, hemos visto una película que a Alex le ha gustado.
-Me alegra que la hayan pasado muy bien -miré a Alex, lucía preciosa, tenía unos pantalones negros de cuero y una camisa rosa sin mangas ceñida al cuerpo ¿cómo lograba verse tan bien siempre? - hola Alex -ella sonrío.
-Hola Piper ¿qué tal ha estado tu día?
-Mejor ahora que los veo, estaba nostálgica, pero me ha levantado el ánimo verlos.
-¿Y ahora qué atormenta a mi mocosa? -me abrazo, me encogí de hombros.
-Estaba pensando en mamá y papá, pero ya no importa -fingí una sonrisa- los dejó, tengo tarea pendiente, buenas noches.

Fui a mi habitación a terminar lo que tenía pendiente, aún me quedaba el resto de la semana para hacerlo, pero no quería perder el tiempo y tampoco, dejarlo para última hora.
Cuando logré terminarla del todo, ya eran las once de la noche y supuse, Alex se quedaría en casa porque en ningún momento escuche la puerta o el auto de Cal. Fui por un poco más de café y me los encontré en la cocina, al parecer Alex le estaba enseñando a hacer cupcakes, se veían muy tiernos.
-¿Qué hacen? -serví lo último que quedaba de café en mi taza.
-Estoy intentando enseñar a tu hermano a hacer la mezcla de cupcakes -mojé mis labios con la lengua viéndola.
-¿Y qué tal? ¿Es un buen aprendiz? -lo miré y reí, Alex negó con la cabeza.
-Hago mi mayor esfuerzo mocosa ¿quieres ayudarnos?
-¿En qué necesitan ayuda?
-Es simple, sólo debes terminar de cortar los trozos de chocolate y luego, unirlos a la mezcla para terminar de batirlo, Cal se encargará del resto.
-No sabía que se te daba la cocina Alex -picaba pedazo por pedazo.
-Ya lo sabes, es una de las cosas que más amo hacer.

Habíamos terminado la mezcla, Alex había traído una bandeja donde se harían los cupcakes y tendríamos que esperar que estuvieran listos, mientras, preparé más café para mantener a Cal despierto, yo había dormido lo suficiente en la tarde, como para no tener sueño.
-No les he comentado -dio un sorbo a su café para luego sentarse en el sofá- me iré de viaje el jueves.
-¿A dónde? -Alex me miró y luego miró a Cal como desconcertada.
-Iré a Perú, una de las empresas afiliadas a la nuestra quiere hacer unos cambios respecto a la edición de las noticias y necesitan que nos reunamos lo antes posible -Alex se sentó en sus piernas y lo besó, me removí en la silla un tanto incómoda al verlos.
-¿Y es necesario que vayas? -pregunté intentando ignorar a la Alex amorosa.
-Sí Pipes -besó a Alex- regreso el lunes, no te preocupes, te dejaré todo en orden.
-No me preocupo, te extrañaré.
-Sólo serán unos días mocosa -entrelazó su mano a la Alex, mierda, ¿por qué me era tan difícil verlos demostrándose amor? ¿Estaba celosa? ¡No! No podía permitirme sentir aquello,
-¿Falta mucho para que estén listos los cupcakes? -pregunté cambiando de tema, Alex se levantó y fue hasta la cocina.
-Aún faltan cinco minutos más.
-Me gustaría que se hicieran compañía durante mi ausencia -miré a Alex y luego a Cal, no, no quería que ella me hiciera compañía o bueno sí, pero aquello no iba a resultar buena idea.
-Cal, todo va a estar bien -le dijo Alex para después mirarme- ¿verdad Piper? -su mirada profunda me intimidaba, no pude emitir palabra alguna, mi hermano me veía a la espera de una respuesta.
-Sí… Sí -titubeé.
-De igual manera, por favor, no les estoy pidiendo nada del otro mundo.
-Yo no tengo problema -termine por aceptarlo, nada iba a sacarle esa idea de la cabeza a Cal.
-¡Listos! -dijo Alex al acercarse a la cocina.

Iba a tener la tentación en casa y peor, sin ningún límite que pudiera frenarme. Con Cal aquí, no haría nada por insinuarle o siquiera mostrarle a Alex que estaba interesada en ella, iban a ser días largos y… Emocionantes.
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Holaaa de nuevo, no es día de actualizar pero la verdad, he leído sus comentarios y me anime a subirles este capítulo es importante porque a partir de aquí, va a empezar lo bueno. En serio, mil gracias por su buena receptividad y sus comentarios, cuídense. Kisses!