Capítulo 19 - Dolor

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Antes de que alguno hablará, Darshan los separó, uno de los hombres cargó a mi doble y se fue a través del bosque junto con Darshan, los demás se quedaron con Patrick, que peleaba con todas sus fuerzas para poder llegar a mí.

Corrí detrás de Darshan y el sujeto que reconocí al instante, era el mismo sujeto que me tomó por sorpresa en casa de mi tía.

Llegamos a una pequeña plaza, y supe que era la misma plaza de aquel sueño tan raro, creo que fue la primera vez que vi a Patrick, estaba igual, el ángel con la dama en la fuente y los árboles en forma de murallas.

Cuando entramos a la plaza, dejamos atrás a Patrick y a los demás, solo estaban Darshan, él hombre que me tomó en brazo y que recordé que se llamaba Flinn, el hermano de Darshan, mi otro yo y por supuesto, la real yo.

A mi otra yo, la lanzaron al suelo y supe que estaba herida por que se quejaba, me acerqué para saber lo que tenía, se había clavado un vidrio en el brazo izquierdo a la altura del codo, por un momento pensé "Esto debe ser una locura". Revise mi brazo y estaba una pequeña cicatriz a la misma altura que la de mi doble, "Fue real, todo esto, es real" –Susurre.

-¿Qué haré contigo Janne? Has defraudado a tu familia, a tu sangre, ¿Por qué? ¿Por amor? ¡Eso nunca durará! –Musitó Darshan.

-Lo único que no durará eres tu Darshan, eres muy poca cosa para poder sobrevivir ¿Crees que matando a tu propia raza, te convertirás en humano? No me disculpo por arruinar tus sueños, pero eso nunca pasará. –Dijo mi otra yo con una irónica y burlona sonrisa en su rostro, que a pesar del dolor, logró embozar.

-¡Cállate! No mereces vivir después de tu traición. –Dijo finalmente Flinn, mientras que le daba una patada en la cadera a mi otra yo.

Mi otra yo se quejó del dolor y solo daba vuelta en el piso.

-¡Ya basta de Golpearla! Ya sé lo que le vamos hacer. –Dijo Darshan acercándose a mi otra yo, se inclinó y le pasó su mano por el rostro, despejándolo del desaliñado cabello castaño.

-Pagarás muy caro tu traición. –Susurro Darshan.

-Pero no tanto como tú... Tío. –Dijo mi otra yo, le escupió en la cara y Darshan se levantó y se secó la cara con rabia.

-Trae el tranquilizante. –Dijo Darshan.

Mi otra yo, lo miraba confundido, sabía lo que le iba había hacer y por más que yo quisiera intervenir, no puedo hacer nada, porque esto es solo un recuerdo perdido en mi memoria.

Flinn saco de una pequeña maleta una inyectadora con un líquido blanco y se lo entregó en las manos a Darshan.

-¿Qué?... ¿Qué piensas hacerme? –Preguntó mi otra yo sonando nerviosa y mirando a Darshan y Flinn tratando de adivinar su plan.

-Primero te dormiremos y luego yo me encargaré de tu hijo. –Dijo Darshan saltando una carcajada que sonó muy tenebrosa, no podía creer que él llegaría a tanto, pero si era capaz de matar a mis padres, también fue capaz de hacerme esto.

-No por favor ¡PATRICK! ¡Patrick! ¡Ayúdenme por favor! –Gritó mi otra yo desesperada, se levantó con pudo y trato de correr hacía los árboles, pero fue inútil, eran una especie de muralla y yo ya lo había experimentado.

Entre Tus Alas ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora