Entre Tus Alas ©

Capítulo 6 - Un Último Adiós

Ya en casa, subi a mi habitación, mire la hora 3:00pm, me dispuse a tomar un baño, el agua estaba tibia lo cual me relajaba mucho. El baño tenía baldosas en las paredes de color azul cielo, el techo era de color blanco y el piso tenia pequeñas baldosas blancas y negras, La bañera era blanca y sufientemente comoda como para quedarme dormida.

Cuando desperté, aún estaba en la bañera, me levantó, enrollo una toalla a mi alrededor y miró el reloj 4:30pm. Había dormido hora y media, lo primero que pensé, es que luego me daría un buen resfriado, me sequé y me vesti con unos shorts azules y una camisa de mangas cortas de color negro. Baje las escaleras y Jake estaba viendo televisión, me dirijó a la cocina con intención de encontrar un poco de cereal cuando oigo a Jake gritar mi nombre, corró por el pasillo para toparme con Jake y lo primero que dijo con signo de preocupación es que prestará atención al noticiero. Subió el Volumen y Puede Oir.

"Esta Tarde, vía Portland, Fallecieron los reconocidos empresarios Kevin y Victoria Walts en un accidente automovilistico. Sucedió a eso de las 3:30 de la tarde cuando se dirigian a sus respectivos trabajos, Las circunstancias del accidente aun no se aclaran, pero la Policía se guía por la opción de Venganza, La pareja que viajaba en un Audi A6 acababan de salir de la graduación de su hija menor Janne Walts, los funcionarios policiales sospechan que mandarón ha asesinar a la pareja para poder quedarse con el poder de su empresa Walts Construction C.A.

La policia se encuentra en el lugar del accidente, aun no sabemos si sus familiares saben de la perdida. Dentro de unos minutos más información sobre el tragico accidente que enlutó a Seattle."

Quedé horrorizada, esto no puede estar pasando, mis padres no pueden estar muertos, debe ser que el noticiero se equivoco, puede ser que hayan acertado en el auto, pero mis padres no son los unicos con usar un Audi, tiene que ser mentira. Colocando mis manos en mi cara tratando de calmarme caí al suelo, mi hermano estaba a mi lado tratando de consolarme pero el dolor era lo sufientemente grande como para yo poder explotar.

Dos horas después, me encontré acostada en mi cama, creí haberme quedado dormida y que la muerte de mis padres era una simple pesadilla. Observó la manilla de la puerta que esta girando y en eso entra mi tió Jackson, el ha estado con nosotros desde pequeños, aunque no ha sido el tió que está en las navidades y cumpleaños mi papá lo quería y si es así ¿Por qué nosotros no?. Él, a diferencia de mi papá que solo medía un metro sesenta, era un metro ochenta de alto, cabello castaño y sus ojos de color gris, era el vicepresidente de la compañía de mi papá, pero a la vez un tanto egocentríco y con un tono realmente molesto.

-¿Janne? ¿Estás despierta?.-Preguntó mi tió en un tono triste y apagado, algo que no es muy a menudo en él, también puede estar fingiendo, allí entonces, sería un buen actor.

–¡Estoy Bien Jackson.! ¿Qué sucede?. ¿En donde están mis padres?. -Digo con un tono nervioso, espero que el noticiero se haya equivocado.

–Janne, debo decirte algo, pero tomaló con calma, tus padres están muertos, alguien los asesinó. -Dijo con un tono de ironía que se veía desde muy lejos, pero puede que se este burlando, el no podría jugar con algo tan serio.

-Dime que es una broma igual que todas las veces que haz fingido su muerte, porque es imposible creerte después de tantas mentiras. -Digo con un tono fuerte para que me diga la verdad.

-¡Janne! Bajalé a tu tono de voz, y sino me crees ve por ti misma los noticieros, el asesinato está en todos los canales de televisión. –Dijo alterado.

-¡Callaté! ¡Basta de tantas mentiras!. – Digo mientras las lagrimas caían por mi rostro.

-¡Tu y los noticieros mienten! Todo es una mentir. ¡Alejaté de mi!. –Dandole un empujón, bajo tan rápido como puedo las escaleras y me encuentro la casa llena de polícias, detectives y forenses.

Mi hermano Jake estaba sentado en el sillón que daba frente a la puerta principal, junto a él, estaban tres polícias interrogandoló. Esto, no puede ser verdad, tiene que ser un sueño. Me digo a mi misma mientras me dirijó hacia Jake.