Es quien quieres que sea

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Tomé el vino de un sorbo, mientras la veia de reojo, casi me dan náuseas, su sabor era justo como lo había imaginado, demasiado dulce, es que ¿Acaso todo lo que hacian las mujeres de agua era dulce? Bueno, un poco prejuicio quizá.
Me olvide por completo de que ella estaba ahi, notó mi cara y sonrió nerviosa.

-No te gusta?.. Vaya.. en verdad queria que probaras mi vino pero es demasiado dulce para ti, no?- Río para ella misma mientras se levantaba- Ire por uno que me trajo escorpio, el los bebe amargos igual que tú, dijo que son artesanales del imperio de.. cof cof voy por el-Dijo mientras se alejaba.

Levanté la ceja inconscientemente.
-Esta bien, es solo que no me gusta lo dulce.-Dije restandole importancia.

Capricornio y Virgo estaban en el imperio de fuego, intentando llegar a un acuerdo, los emperadores de aire y agua también.
Se suponía que me quedaria en el imperio trabajando, pero Capricornio ya habia preparado todo antes de salir, asi que virgo me pidió de favor acompañar a Piscis que también se quedaria sola, es increible como hay personas que no disfrutan la soledad, pero ella no parecia una mala persona, me agradaba, me agradaba mas que los habladores de aire o el arrogante de Escorpio, pero Leo... Ella era todo lo opuesto a Piscis.. Mierda de nuevo estaba comparando chicas con ella, los pasos de Piscis me sacaron de mis pensamientos.

-Te ayudo con eso?-Dije mientras veia como sus delgados y palidos brazos se aferraban a la botella de vino.
-Eh? Estoy bien, gracias..-Me sonrió mientras se acercaba a la mesa.

Trajo una copa nueva y me sirvió.

-Virgo me dijo que te gusta el pastel de carne y...-Susurro casi nerviosa mientras yo la veía de reojo y tomaba el vino.
-Lo es ¿Cocinas?-Pregunté casi instintivamente, no es que fuese un glotón, bueno un poco, pero que una princesa cocinara era bastante sorprendente, a Leo se le quemaba el pan y ni siquiera era princesa, decía que tenia una cocinera personal, tonterías.
-En realidad no me dejan entrar a la cocina mucho, por mi... enfermedad-Su amable sonrisa se ensombrecio por un segundo cuando dijo lo último, inmediatamente agrego- Pero las pocas veces que he estado Cancer me enseño algunas recetas, por suerte entre ellas el pastel de carne, así que preparé un poco-Me miro como esperando mi aprobación.

-Deja de mirarme así.. Puedes actuar mas relajada ¿Sabes? Soy igual que tú.-Dije sin pensarlo mucho, en cierta parte era verdad.

-Ah.. eh.. Lo siento! es que yo no hablo con muchas personas desde que tengo memoria, y no sé como debería comportarme, además eres el hermano de virgo y no quiero darte una mala impresión, ella habla muy bien de ti, y me agrada mucho la forma en la que te describe, a mi realmente me gustaria ser tu amiga!-Hablando muy rapido y levantando la voz dijo todo aquello como si hubiese explotado, me reí al ver su actitud para relacionarse conmigo ¿Tan poco accesible le parecía yo? La verdad es que si lo era.

-Piscis, eres muy divertida, pero no sé que tan buenos amigos podramos volvernos si me haces esperar tanto por tu pastel de carne-Le sonreí burlón con toda la calidez que pude mientras lo decia.

La sangre se subio a sus mejillas dandole un color rosado a su cara, sonrió y se fue mientras decía-Espero que te guste la salsa de cebolla-

Hice una cara de asco y como si ella la hubiese visto se echó a reir, esa maldita Virgo, que no le habria contado de mi a Piscis si hasta sabia que odiaba las cebollas.

Furia Elemental ZODIACO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora