Canem desató a Yoongi, el chico no prestó atención a los cuidados que les prestaba, en su mente los gritos de Taehyung se repetían, la impotencia de poder ayudarlo de apoderaba nuevamente de él y teniendo a Canem frente a él solo le recordaba lo vulnerable que era frente al enmascarado.
-¿Por qué lo hiciste? -preguntó Yoongi luego que la mordaza fuese retirada, su voz estaba más ronca de lo normal y su garganta dolía.
-Era por su bien, debe aprender a no meterse con lo que me pertenece.
-No te pertenezco -contestó sentándose sobre el suelo.
- ¿Quieres saber que sucede con el dinero que paga Kim?
Yoongi no respondió y se limitó a mirar al enmascarado, había algo en sus ojos que le recordaba a un verdadero lobo acechando a su presa.
-Tu familia está viviendo bien gracias a ese dinero
-¿De qué estás hablando?
-Gracias por traer tu móvil contigo, fue mucho más fácil engañar a Kim. Ahora, Yoongi, si algún día escapas, ten por seguro que le harás compañía a tu padre en la cárcel y tu pequeño protegido la pasará muy mal.
Canem se levantó de su lugar y caminó hasta la puerta, cerrándola de golpe. Por su mente pasó la idea de Taehyung en la otra habitación, solo, dañado, con el corazón destrozado. Se sentía culpable, él había acercado al castaño a sus labios porque tenía la necesidad de besarlo.
Yoongi notó como la puerta se abría nuevamente, esperó a uno de los enmascarados pero se llevó una gran sorpresa. Vio la camisa de rayas, unos shorts azules y una cabellera rubia parada, esperando ser notada.
-¿Jimin? -preguntó sorprendido.
-Debes darte prisa, ellos regresarán pronto.
Yoongi se levantó de su lugar y caminó tras Jimin, el chico lo condujo hasta la otra habitación, estaba abierta. El pelinegro observó el lugar, sin adentrarse completamente.
-Adentro esta todo lo que necesitas para limpiarlo, ropa nueva y algunas pomadas. Hay un poco de comida, debe estar hambriento, igual que tú- sonrió Jimin.
-¿Por qué lo haces?
-No soy como ellos, Yoongi, jamás seré como ellos. Ahora date prisa, yo vigilaré.
Yoongi entró a la habitación, era menos oscura que la otra, había una pequeña reja que iluminaba el lugar y dejaba ver a Taehyung tendido en el suelo. La puerta tras él se cerró un poco, caminó hasta el chico y notó que estaba temblando.
Se arrodilló en el suelo y tomó a Taehyung en sus brazos, el chico comenzó a temblar y gritar que lo soltaran, sus ojos estaban cerrados y sus manos hecha puño.
-Soy yo- dijo Yoongi - Soy Yoongi, abre los ojos.
Taehyung abrió los ojos y comenzó a llorar, aferrándose a los brazos de Yoongi. El pelinegro tuvo que soltarlo para poder cambiarle la ropa.
-Detente- dijo Taehyung al sentir como Yoongi comenzaba a retirar sus pantalones.
-Solo te limpiaré y listo, prometo que será rápido.
-No quiero que me veas, no quiero que...
Yoongi se acercó al rostro de Taehyung y lo tomó entre sus brazos, rozando sus dedos por sus mejillas, limpiando las lágrimas. Se sentía destrozado al ver a Taehyung así, debía apresurarse antes que sus captores regresaran.
- Prometo que será rápido- susurró Yoongi.
Taehyung asintió y dejó que el pelinegro retirar sus pantalones, tal como había dicho Jimin habían unas cuantas toallas con agua, y unas pomadas, trató de ser lo más delicado que pudo y evitar ponerse a llorar en ese momento. Escuchó algunas quejas por parte de Taehyung.
Al terminar, completó el cambio de ropas de Taehyung. Observó a Jimin acercarse por la puerta, el tiempo se estaba acabando.
-Debes darte prisa- dijo Jimin.
Yoongi se acercó a Taehyung, observando el rostro del chico, limpiando el resto de lágrimas secas. Se acercó a él y depositó un suave beso en los labios del chico.
-Prometo que vendré pronto.
Yoongi salió de la habitación, Jimin se encargó de cerrarla como si nada hubiera pasado. En sus manos tenía las ropas sucias de Taehyung y los utensilios ocupados para limpiarlo.
-Debes estar hambriento, ¿no?
Yoongi asintió y observó a Jimin, el chico estaba pálido, sus labios se veían sin color y sus ojos mostraban bolsas negras, quería preguntarle que sucedía, pero recordaba que el chico no daba respuestas. Lo condujo de nuevo a su habitación y sonrió antes de salir.
-Gracias- dijo Yoongi
-Haré que le lleven comida a Taehyung y me aseguraré que tú también recibas comida.
-Jimin- dijo de nuevo Yoongi -Espero que estés bien.
-Recuerda llevarme margaritas la próxima vez que me visites, Yoongi.
Antes que pudiese responder, el chico salió por la puerta. Poco tiempo después, Lepus entró a la habitación con un plato de comida y se enteró por el mismo hombre que Taehyung también había recibido comida. Ahora solo tenía una preocupación en mente, Jimin.
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Captivum 《TaeGi》
FanfictionEn un secuestro, las personas más cercanas a ti pueden llegar a ser los mayores sospechosos y los mayores sospechosos podrían terminar siendo quienes te mantienen prisionero. Por supuesto que Taehyung y Yoongi nunca fueron advertidos sobre esto pero...