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Woow, tres semanas, solo quedan tres semanas, ¿y sabéis cuanto llevo escrito? AHAHAHA 3 líneas, la introducción, lo que escribí durante su clase. No se que voy a decirle.
Sinceramente nunca me hubiese imaginado esto, es decir, yo le odiaba, y ahora estoy aquí, intentando expresar lo que siento por el. Pero no me sale. Quizás esto sea una 'señal' del mundo para que no se lo escriba, ¿no?

Hoy es jueves, por suerte no tengo Física y Química. Osea, no es que no quiera verle, pero dar clases con él, sinceramente.

Hay algo que me encanta de ir al instituto, creo que es lo que me motiva cada mañana para levantarme con un pensamiento positivo. Para algunos es levantarse con el pie derecho, para mi es si saludo, me explico: cada mañana llego a una esquina del edificio de nuestro instituto a las 7:50 am. Siempre a esa hora. Lo hago porque Matt sale del tren a esa hora y pasa por nuestro lado sobre las 8:00-8:05 am. Soy calculadora, lo se, no puede ser ni bueno, pero vaya, me da igual. A lo que voy, cuando veo que está llegando me pongo nerviosisima, no se porque, y el al pasar levanta la cabeza, esboza una media sonrisa y me dice 'buenos días'. Siempre. No falla ni una. Eso tiene el poder de darme fuerzas para el día, es la razón de mi primera sonrisa del día, y eso para mi, por muy normal que sea, es especial.

Hoy tenía muchísimas ganas de verle, no se porque. Decidí volver a...nuestras clases particulares del recreo. Fui y nada mas entré me dijo:

–¿Sabes que si pongo tu nombre en cualquier red social, como Instagram, Snapchat, Wattpad...–este último con mucho énfasis– me sale todo relacionado contigo que hayas publicado, no?
–¿Perdón?  Me he perdido.
–Natalia, lo he leído...tu novela. ¿Me lo explicas?

Mis ojos se abrieron muchísimo, no me lo esperaba, tenía miedo, no sabía que hacer.

–Estoy esperando una respuesta.
–¿Estas enfadado? ¿Te ha molestado?
–¿¡Qué?! No! ¿Porque iba a molestarme? Al revés...estoy...alagado. No sabía que te gustaba...
–Es que no lo haces–no le dejé terminar la frase, fue un acto reflejo–es...simplemente que tenía ganas de escribir algo, no siento nada por usted, solo agradecimiento.
–Ah...ya...no me llames de usted, te lo dije–comentó apartando la mirada de mi y recogiendo sus cosas.
–Lo siento, es raro para mi llevarme bien con un profesor.
–Lo entiendo, por cierto ¿no se te ocurrió un nombre mas original?
–¿Sinceramente? No. Jaja. Bueno adiós, va a tocar la sirena ya, y yo tengo clase...–vi como antes de yo terminar de hablar sacaba un cigarro del bolsillo–em...¿fumas? Que digo haha, se te nota a kilómetros.
–¿Es molesto?
–Nono, si el olor a menta y tabaco es...común, estoy acostumbrada –mentí, no estoy acostumbrada, pero me encanta.
–¿Cómo sabes lo de la menta?
–El tabaco solo no huele así, y tu colonia también la diferencio bien, creo que es la de Dolce&Ga...vale, mejor me callo, lo dicho. Me voy, adiós. –Tuve que parar de hablar, parecería una acosadora...
–A...adiós – noté que se rió, y yo lo hice, pero de vergüenza.

Después de clase. [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora