• 21 : Alfas rebeldes •

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El tierno omega corría por los pasillos al encuentro de su alfa, ya todos los estudiantes estaban por ingresar a sus clases. Pero el omega tenía una hora libre y e iba a aprovecharlo lo máximo posible a lado de su alfa. Antes de llegar al gimnasio paso al baño solo a retocar un poco sus cabellos y acomodar su ropa, correr no había sido una buena idea ya que se había agitado demasiado. Mojo un poco su rostro para quitar el nerviosismo que se instalo en el.

Nisiquiera entendía porque lo estaba, después de todo no era la primera vez que hacía ese tipo de cosas junto a su novio. Pero, era consciente que jamás se habían citado en el gimnasio de la escuela. Asi que era un nuevo escenario para el, pero muy poco le importaba donde estuviese, si era a lado de Jongdae ese tema pasaba a segundo plano.

Una vez que se tranquilizó sonrió frente al espejo del baño, mostrando su hermosa dentadura y sus ojos desaparecer. Suspiro ondo y salio del baño, con un poco de cautela para que nadie lo viera. Ya que si un profesor llegara a pillarlo, no traería nada bueno.

Abrió la puerta del gimnasio con sumo cuidado tratando de no hacer mucho ruido, antes de ingresar a el, miro para ambos lado de los pasillos para asegurarse de que nadie lo estaba viendo. Cuando entro al gimnasio cerro la puerta tras suyo, sin embargo, se percató tarde que en el no había nadie.

Frunció un poco el ceño, pero su nariz comenzó a sentir un aroma muy familiar. Abrió los ojos sorprendido, todo su cuerpo se tenso completamente. Ese aroma estaba tras suyo y lo sabía, porque estaba aumentado a cada instante y era más que seguro que quel alfa solo se hallaba a unos centímetros tras el.

- Por un momento pensé que no vendrías Minseok - sonrió burlesque - ¿Pero cómo no lo harías?, Después de todo haces todo lo que tu noviocito diga.

Escalofríos recorieron el cuerpo del omega, había caido en la trampa del alfa. Tenia mucho miedo, pues sabia que aunque tratara de gritar nadie lo escucharía. Uno, porque ya todos estaban en clase y la otra porque en maldito lugar estaba a prueba de ruidos. Por tanto nadie se quejaba por los bullicio provenientes de ese sector.

- Min... - susurro el alfa, llegando por la espalda del omega y tomandolo de ambos brazos - Por qué no dices nada, acaso te comio la lengua el gato.

"Jongdae ven por mi" .

Suplico internamente.

- Date la vuelta - ordenó el alfa, pero no recibió respuesta alguna. Un poco molesto giró al omega para que le diera la cara - Por qué lloras pequeño - dijo al verlo al fin - Sera divertido - sonrió relambiendo sus labios.

Pero lo único que logró en el omega fue repulsión antes sus palabras y la fuerza que ejercía aquel toque en sus brazos. Su cuerpo comenzó a templar repentinamente, tenia miedo... mucho miedo y las lagrimas bajo el silencio salian sin pudor alguno.

"Dae..."

- No llores Min... - con una mano acarició la mejilla del omega limpiando las lagrimas que seguia desbordando MinSeok - Dia algo, no quiero ser el único que hable aqui.

Pero el omega siguió guardando silencio.

El alfa frunció el entrecejo y apretó los dientes, mientras que su agarré se volvía mas fuerte sobre el cuerpo del omega. Pero ni eso logró que este hablara. El alfa tenía mucha más fuera que el pequeño omega y su estatura era igual de impresionante.

- Responde de una vez Minseok - comenzó a usar su voz de mando - Di mi nombre.

Minseok no quería hacerlo, quiso evitarlo, pero su naturaleza sumisa podía más que el y aunque trato de no emitir ningún sonido mordiendo sus labios y apretando los dientes, nada pudo hacer contra la orden y el alfa logró su cometido.

AROMA [HunHan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora